La noria de Rodrigo De Paul

Rodrigo De Paul (Sarandí, 1994) ha convertido su primera temporada en Valencia en una noria de altibajos.
En 2014 el verano asomaba en la cálida capital del Turia, cuando se llevó a cabo una prometedora incorporación al club valencianista, avalada por el responsable de la secretaria técnica del club en Sudamérica, Roberto Fabián Ayala, y por el aquel entonces entrenador del club, Juan Antonio Pizzi.
Su fichaje desde el primer momento causó polémica, su precio había sido anunciado en 5m€ días después Amadeo Salvo, como presidente del club, salió al paso de las declaraciones y desmintió tal montante. Finalmente según cifras oficiales el traspaso del jugador que tenía 19 años y contaba ya con 50 partidos oficiales, se estipuló en 4,5m€ y el jugador fue blindado con una cláusula de 40m€.
El club estaba convulso en el tedioso proceso de venta con decenas de nombres de jugadores que supuestamente entraban o salían del club, y con uno de sus grandes valedores en la cuerda floja. Tras rumores y secretos a voces, Pizzi fue destituido y su relevo lo tomo Nuno Espirito Santo. El joven jugador por primera vez viviendo fuera de su país vivía la situación con preocupación, no obstante con trabajo y sacrificio se ganó el respeto de su nuevo entrenador y la que era su nueva afición quedó prendada de su desborde por banda, su velocidad y sus ganas de agradar.
El jugador hizo amistad con Evér Banega y Fede Cartabia, ambos tuvieron que hacer las maletas y trasladarse al sur del país a sus nuevos equipos. Un vuelco más en la historia de Rodrigo De Paul. Para su alegría poco antes del cierre del mercado de fichajes llegó al club uno de sus mejores amigos y compañero en su exitosa etapa en el Racing de Avellaneda argentino, Bruno Zuculini.
Finalizó el proceso de venta, el jugador se hizo dueño del “20” que luciría en su espalda con la camiseta valencianista, y en la primera jornada debutó.
Corrían apenas treinta segundos con De Paul en el campo, al que había ingresado desde el banquillo, cuando en un forcejeo con un rival soltó ligeramente el brazo, que tras impactar en la cara del rival, hizo que el colegiado del partido lo expulsara inmediatamente con el agravante de además escribir una acta arbitral muy desfavorable considerando la acción como agresión. Resultado; cuatro partidos de suspensión.
De Paul no se lo podía creer, tras todos los obstáculos debutó y tras una acción desafortunada estaría un mes sin entrar en las convocatorias, como consecuencia, se desanimó mucho.
Tras cumplir la sanción no entró en la dinámica del grupo de jugadores habituales para Nuno, y a su vez veía como su amigo Zuculini no corría mejor suerte.
Con esta situación llegamos hasta el 4 de diciembre del 2014, cuando en un partido de Copa del Rey salió de inicio al césped, a partir de este momento el joven extremo empezó a entrar en las convocatorias y a disputar minutos, llegando a jugar minutos en 9 de los 10 partidos jugados hasta la fecha (todos excepto la victoria ante el Real Madrid).
Hay que decir que el jugador ha jugado por la banda derecha, por la banda izquierda, como mediapunta e incluso como segundo delantero.
Con Piatti lesionado, y Sofiane Feghouli jugando la Copa África con Algería, es el momento de ver al mejor Rodrigo De Paul ante la que puede ser su prueba de fuego.
http://gradavalenciana.com/la-noria-de-rodrigo-de-paul/