ALBERTO SANTAMARÍA. HOY ...Como él mismo ha reconocido, ha pasado de ser el técnico de Lim para convertirse en el responsable del vestuario del Valencia. Y quizá este cargo ya se antoja corto...
VALENCIA.
Es jueves. Han pasado cuatro días desde que el Valencia acabara con la maldición de El Madrigal y se impusiera por 1-3 a un señor equipo como es el Villarreal. Casi ocho años después, los blanquinegros consiguieron volverse a casa con los tres puntos en el bolsillo y, lo que es mejor, con la sensación de haber dado un golpe encima de la mesa. Con la certeza de que esta temporada van a dar mucho que hablar y con la seguridad de que, como reza el cántico más extendido en el mundo del fútbol, nunca caminarán solos. Ni siquiera cuando la voz de su afición queda enjaulada por el acero y el metacrilato de una grada ejemplar para la UEFA e indecente para las personas. Por partes.
DESENJAULADO 1.0 ‘El valencianismo' Nuno y sus hombres no se cansan de repetirlo. El agradecimiento a su gente es infinito. En cada comparecencia pública, en cada rueda de prensa no hay respuesta en la que el rostro del protagonista en cuestión no se ilumine con una sonrisa cuando se hace alusión a todos aquellos valencianistas que domingo a domingo llenan los asientos de Mestalla y, cada vez más, de los estadios foráneos. Son conscientes de que el latido de su corazón lo acompasa la ilusión de una hinchada que ha comulgado con ellos como en los mejores tiempos. Un sentimiento que parecía enterrado y que ha resucitado cuando más se le necesitaba. Porque ni la crisis económica, ni las televisiones ni cualquier otra 
excusa barata han podido con una forma de ver la vida que ha roto con todo aquel que, como en El Madrigal, ha querido enjaular sin éxito a una afición que es la envidia de toda Europa.
DESENJAULADO 2.0 ‘Nuno' Tal vez nunca lo haya estado. No hay obstáculo que se cruce en su camino desde que es entrenador. No entiende de límites. Nada ni nadie puede enjaularlo. Como no lo hizo el hecho de venir de la mano de Peter Lim cuando éste todavía no era dueño de la entidad siendo, además, el protegido de Jorge Mendes. Ni el recelo que provocaron estos condicionantes lo apartaron de la senda que creyó correcta. Como él mismo ha reconocido, ha pasado de ser el técnico de Lim para convertirse en el responsable del vestuario del Valencia. Y quizá este cargo ya se antoja corto. Es el jefe. Así lo demuestran los hechos. Si el portugués asegura que viene una bomba, la bomba aparece. Cueste lo que cueste. Si le pide a los suyos que vayan a recibir al equipo tras la victoria en el derbi, éstos no fallan y se presentan dónde haga falta. Como el pasado fin de semana. Porque, a día de hoy, no hay jaula que sea capaz de encerrar a Nuno.
DESENJAULADO 3.0 ‘El sistema' Nueve encuentros de Liga se habían disputado y nueve encuentros en los que el sistema no había variado. Ni un ápice. El trivote formado por Javi Fuego, André Gomes y Parejo era innegociable. Ni siquiera la lesión del internacional luso antes de viajar a A Coruña hizo cambiar de opinión al míster. De inicio 4-3-3. Pero la discreta actuación de Filipe Augusto en Riazor unida a la ausencia del capitán de Coslada desenjauló a Nuno en La Plana Baixa. Zuculini no cuenta y Feghouli estaba rindiendo a buen nivel cada que saltaba al campo. Además, la forma de jugar del Submarino invitaba a tapar las incursiones por banda de sus laterales y a que los delanteros trabajaran para intentar -sin mucho éxito- que Bruno y Trigueros dirigieran a los amarillos. Un cocktail de ideas que permitió comprobar a propios y a extraños que el dibujo de este Valencia al empezar cada partido no siempre va a ser el mismo. Me gusta.
DESENJAULADO 4.0 'Peter Lim' Superadas las barreras impuestas por Bankia a lo largo de lo que parecía un interminable proceso de venta, el magnate ya hace y deshace a su antojo -que para eso los ha puesto-. Vuela libre en su nuevo club. Como ya estaba ocurriendo durante estos últimos meses -para ser sinceros- tal y como demuestran los fichajes de Nuno, André, Rodrigo o Negredo. Y con el empresario de Singapur sin cortapisa alguna, lo único que podemos hacer es disfrutar de cómo abre sus alas y, con ellas, cómo convierte al Valencia en un club todavía más grande. Con mejores jugadores -Enzo Pérez y el mercado de invierno-, con una internacionalización de la marca, con un aumento de ingresos en forma de patrocinios o con el reinicio de las obras del Nuevo Mestalla. Objetivos y metas a corto y medio plazo que, con Lim 'desenjaulado', -esperemos- se harán realidad.
