El director deportivo habló ayer con el canario y tiene claro que la llave de una salida para Gago está en manos del futbolista Valverde y Braulio deben decidir el futuro inmediato de Viera y la opción de reforzar el equipo
JUAN CARLOS VILLENA | VALENCIA..-
Restan tres días para que se cierre el mercado de fichajes en España y todos los clubes apuran sus opciones, en las entradas y salidas. Y en el primer apartado de la agenda, hablando en clave valencianista, aparecen los nombres de Jonathan Viera y Gago. Eso sí, en el club de Mestalla tan sólo están moviendo pieza por el canario, ya que las opciones de salida del argentino están en manos de su representante. Para hoy está prevista una cumbre en la ciudad deportiva de Paterna entre Braulio Vázquez y Ernesto Valverde. Entrenador y director deportivo tienen que consensuar la conveniencia de aceptar una cesión para Viera y, en caso de producirse, si el club llega a tiempo de reforzar la plantilla con un jugador que mejore lo existente.
Y esa eventual entrada de última hora no está restringida a los extremos, aunque el futbolista por el que suspira Braulio juega en esa demarcación y no va a llegar a Valencia en este mercado invernal. El club de Mestalla tiene una opción de compra por Vitolo, que continuará hasta junio en Las Palmas. El técnico dejó claro, el pasado viernes, su postura con respecto a la salida de Viera: «Es una posibilidad. En el caso de producirse alguna salida necesitaríamos que llegara algún jugador, y no tiene porqué ser banda derecha».
Y es en ese punto de la ecuación donde vuelve a aparecer la variable de Gago. El cuerpo técnico no apostaría ningún euro de su bolsillo a que una eventual 'no salida' del argentino antes del cierre del mercado vaya a transformarse en un cambio radical en su actitud. Si Fernando sigue dentro de la plantilla, Valverde tiene muchas dudas con respecto a si es recuperable para la causa. Ese aspecto, importante, unido a la falta de efectivos en los centrales hace que desde el club se mire con lupa el granero disponible de mediocentros con capacidad para desdoblarse en defensa, algo que por cierto ya se buscaba en verano... pero finalmente se fichó a Gago.
Braulio llamó ayer a Viera para confirmarle que el Rayo Vallecano sigue siendo el equipo mejor colocado para hacerse con sus servicios hasta final de temporada. Los madrileños pagarían la ficha de Jonathan sin opción de compra, ya que en el Valencia se sigue confiando, y mucho, en esa perla canaria que ficharon de Las Palmas hace unos meses por 2,5 millones de euros más un 10 % para la entidad grancanaria en un futuro traspaso. El propio jugador, nada más terminar el partido de vuelta de la eliminatoria de Copa contra el Real Madrid, se mostraba algo resignado a su salida: «El club es el que manda y si me comunican que me tengo que ir lo valoraré. No me planteo ninguna opción, porque mi idea se seguir».
El escenario perfecto para el Valencia, tal y como avanzó LAS PROVINCIAS el pasado 24 de enero, sería incluir en la operación de cesión de Viera la llegada de Javi Fuego. El asturiano es el elegido por Braulio para reforzar el centro del campo valencianista de cara a la próxima temporada. El jugador acaba contrato el 30 de junio y es por ello que el Rayo ha pedido desde que arrancó el mercado invernal un mínimo de un millón de euros para cualquier equipo que se lo quiera llevar antes del verano. Pero esa postura de fuerza puede cambiar si el club que quiere al mediocentro es el mismo que tiene los derechos de la ficha del futbolista que quiere Paco Jémez, el técnico rayista. La operación, que no estará descartada hasta que se firme la cesión de Viera, permitiría la llegada del refuerzo que quiere Valverde, y en la posición que quiere. Además de ser un último mensaje, demoledor, para Fernando Gago.
El entrenador extremeño le ha dejado claro al argentino, con la decisión de dejarle fuera de las dos últimas convocatorias, que sus opciones de volver a entrar en el equipo pasan, única y exclusivamente, por un cambio de actitud. Y el Valencia, que pactó con el Real Madrid este verano un pago aplazado de algo más de 3,5 millones de euros, no va a dejar salir al mediocentro si no llega una buena oferta, de cesión o de traspaso. La pelota, en su caso, está en el tejado del propio Gago y de su representante Marcelo Lombilla, que ya intentó durante las vacaciones de Navidad que Boca Juniors diera el paso al frente. El mercado argentino no cierra hasta la próxima semana, con lo que el Valencia va a seguir con su postura de fuerza. La prisa, en este caso concreto, la tiene el jugador. En caso de no fructificar una salida, será Valverde el que tome la decisión partido a partido.
