Resumen de la temporada

Habrá un cara a cara entre Mata y Llorente

Las distancias ayudan a reflexionar, permiten analizar situaciones desde otro punto de vista al habitual para sacar conclusiones más próximas a la realidad. Se prioriza la frialdad al corazón y Juan Mata está haciendo un ejercicio de reflexión en Sudáfrica. Hace unos días, el ´13´ de la Roja tomó buena nota de las manifestaciones que hizo Manuel Llorente en las que le consideraba un jugador «imprescindible». A Juan no le parece mal que el Valencia quiera convertirle en uno de los nuevos referentes, más bien todo lo contrario porque eso significa que está haciendo muy bien su trabajo, pero esa sonrisa e ilusión que debe salirle de dentro cuando escucha una declaración así no fue tal con el asturiano. ¿No es feliz? ¿Está pensando en cambiar de aires? ¿Puede más el poder de persuasión de Pep Guardiola?

Hay muchas cosas que hablar cara a cara con Manuel Llorente, de ahí que ya le haya hecho un hueco en su agenda para reunirse con él nada más finalizar el Mundial y aclarar muchas cosas si quieren seguir caminando cogidos de la mano. Mata pide cita con su presidente.

A Juan le gusta hablar claro, con educación y siguiendo los cánones correctos. No es un futbolista que utilice a la prensa para enviar mensajes a su dirigente o reclamar públicamente que su ciclo en un club ha acabado para forzar su fichaje por otro equipo, Juan no es así. Ha estado toda la temporada silenciando su decepción por lo que veían sus ojos después de prometerle una mejora salarial que sí llegó de modo automático por su contrato anterior, y no a instancias propias del Valencia. Las malas formas no van con él y tampoco va «vender humo» expresando en público una alegría plena que no se corresponda con la realidad. Mata quiere seguir en el Valencia y está dispuesto a ser uno de los referentes después de las salidas de Villa y Silva, pero quiere un trato acorde a su comportamiento y no que le tomen el pelo por ser demasiado educado.

La paciencia tiene un límite, por eso a veces es necesario sentarse en una mesa para aclararlo todo, para bien o para mal, pero no estirar un chicle que puede romperse el día menos esperado. Mata quiere ir al grano y no va perder el tiempo. No entra en su cabeza que le digan que su contrato será mejorado cuando haya dinero en caja y que, a la hora de la verdad, se realicen fichajes con contratos superiores al suyo, como así ha ocurrido a su entender.

Juan quiere ir con la verdad por delante, que el presidente Manuel Llorente hable claro con él y solucionar punto por punto la disparidad de criterios que tienen ahora. Si es así, Juan será uno de los referentes del nuevo Valencia.

http://www.superdeporte.es/valencia/2010/07/06/habra-cara-cara-mata-llorente/99488.html

Ricardo Costa:«Vine porque di mi palabra y porque creo en el proyecto»

Su agresividad sobre el tapete se transforma en un discurso pausado y hasta agradable pese a las prisas del momento. Ricardo Miguel Moreira da Costa (Vila Nova de Gaia, 16-5-1981) no pierde la sonrisa. Acaba de aterrizar del Mundial y en su paso fugaz por Valencia para ser presentado tras firmar por cuatro años (llega gratis) se da un pequeño baño de masas con la chiquillería que se ha acercado al Veles e vents.

-Parece que le ha llegado la oportunidad de su vida.

-Es una oportunidad de representar a un gran equipo como el Valencia en una gran liga, para mí la mejor liga de Europa. Jugar aquí es un sueño que tenía. El Valencia me abrió las puertas y por estoy encantado porque, además, jugaré la Champions League.

-Pese a que acumula once títulos (entre ellos UEFA, Champions e Intercontinental), ¿le llega tarde ese deseo que buscaba?

-No. Después de un proyecto de tres años en el Oporto, en el que fuimos campeones de la Champions, decidí salir. Después apareció Valencia y no pude decir que no. Todas las personas de Valencia saben que tenía un compromiso y que todos los grandes equipos me querían tener. Decidí venir aquí porque di mi palabra.

-Llorente dice que usted quiere seguir creciendo y que ha puesto mucho de su parte, ¿tenía otros equipos atractivos?

-En términos futbolísticos, tenía de Italia, Inglaterra, Turquía y también de España, pero lo importante es que creí en el Valencia, en el equipo que quiere y en su proyecto no solamente para España sino para Europa. Todos los jugadores están revalorizados aquí, juegan muy bien y a la afición le encanta.

-¿Le cautivó algo del Valencia en concreto?

-Desde que jugaba en Oporto, cuando jugamos contra el Valencia y perdimos vi que era un equipo diferente, que todos los años lucha por el campeonato en España. Me encantaba mirar partidos en Mestalla y ver cómo los aficionados vibran en el partido. Quería un día jugar en la liga española y en un gran equipo. Nunca pensé jugar en el Valencia, creía que era imposible y cuando fui para Alemania me olvidé un poco la idea de jugar en España; pero luego apareció en Valencia y ahí conseguí lo que quería.

-¿Por qué Braulio está tan seguro de que el Valencia ha acertado de pleno en su fichaje?

-Para mi contratación no se miró un partido ni dos ni tres. Se miran muchas cosas: estadísticas, velocidad, trabajo... él me conoce. Todas las personas de Portugal me conocen y también habló en Alemania de mí. Puedes pregunta a quien quieras y todos en Alemania dirán de mí lo del trabajo. Hay que trabajar lo máximo para estar bien. Si estoy bien físicamente soy muy fuerte, para eso tengo que trabajar todos los días. Todos los jugadores son buenos pero he tenido buenísimos profesores. Con Mourinho fui campeón y me enseñó muchas cosas. Después, con la capacidad física que gané en Alemania me hice un jugador muy completo y bueno. Ahora sólo falta que tenga suerte.

-Y agresivo también es...

-Agresivo sí. En todos los equipos que jugué siempre fui agresivo pero las personas me avisan: 'Ten cuidado para no ser tan agresivo'.

-En el partido contra España, hasta en tres ocasiones le vi enfrentarse muy duramente con Villa.

-Porque él me buscaba. Braulio me conoce y en Alemania se juega mucho el uno contra uno. Aprendí a jugar así. Villa no sabe como juego y ahora ya me conoce un poco más. A Villa hay que atacarlo, no dentro del área porque es peligroso, sino fuera. Pero mira, tuvo una oportunidad y un gol. Luego pensé, ¡oh Ricardo!

-Tiene ganas de volver a jugar contra él.

-Sí, y espero que juegue.

-Para devolverle algo.

-No, lo que quiero es ganar, jugar bien y que no haga gol. Para mí, un defensa bueno es cuando no deja que le hagan ningún gol.

-¿Llegó a hablar algo con alguno de los internacionales españoles?

-No pude. Después de la cartulina roja me tuve que marchar, pero Miguel ha estado hablando con Marchena, Villa, Mata... con todos.

http://valenciacf.lasprovincias.es/noticias/2010-07-06/vine-porque-palabra-porque-20100706.html