VALENCIA. El Gobierno Valenciano está muy preocupado por lo que pueda decir el próximo viernes el presidente del Valencia CF, Amadeo Salvo, en la Asamblea que ha convocado para accionistas y abonados de la entidad en el estadio de Mestalla. Pese a la versión oficial que ofrecen los políticos queriéndose alejar del proceso de venta de la entidad, la realidad es bien diferente ya que desde el Consell se está siguiendo muy de cerca el curso de los acontecimientos de dicho proceso.
En la Generalitat, y también en Bankia, no hace ninguna gracia la comparecencia que ha preparado el presidente valencianista. No se teme por el proceso de venta, ya que entienden que lo que diga el máximo mandatario blanquinegro no debe afectar para al mismo, pero no quieren que Salvo haga declaraciones explosivas que puedan incendiar las relaciones entre las partes y que puedan complicar más de la cuenta la fase final del proceso de venta.
La comunicación entre el Gobierno Valenciano y Bankia en este asunto es fluida. De hecho, y pese a que desde el Consell siempre se han querido desmarcar totalmente de la venta, y repiten de manera reiterada que no ellos no venden el club, y que tampoco han tomado la decisión de hacerlo, la realidad es muy diferente. El conseller de Hacienda, Juan Carlos Moragues, lleva meses encargándose en primera persona de este asunto, el problema del club y Fundación, y en los últimas días conoce de primera mano todos los pasos que está dando el banco.
CONSELL CONOCE LA IDENTIDAD DEL CANDIDATO DEL BANCO
Según pudo saber PlazaDeportiva.com el Gobierno Valenciano está al corriente de cuales son las ofertas que el banco ha recibido al cierre de la primera fase del proceso, así como de la identidad de la oferta que para la entidad financiera es en estos momentos la candidata número uno para convertirse en la ganadora.
El Consell aceptó de buen grado que el club fuese vendido, y siempre ha insistido a Bankia para que el nuevo dueño sea una alguien solvente, fiable y coherente, y que acceda al club con un proyecto importante. Ahora, el Consell está deseoso de que el proceso de venta finalice con una buena solución para el club, y que además lespermita liberarse de la pesada carga que le ha supuesto el aval que en su día concedió a través del IVF. Por eso, están por la labor de colaborar con el banco para que la operación de venta pueda finiquitarse cuanto antes y con las máximas garantías.
La intención del Gobierno, es convencer a Amadeo Salvo para que desconvoque la Asamblea fijada para el viernes. Eso sería lo ideal para ellos y también para Bankia, que no entiende lo que pretende explicar el presidente sobre el proceso sin la información necesaria para relatarle a los presentes que es lo que está ocurriendo ahora mismo. Eso sí, aunque lo ideal sería que Salvo accediera a desconvocar la Asamblea, lo que si le pedirán al presidente valencianista, es que si termina llevándola a cabo, no sea para realizar declaraciones incendiarias, que puedan ir en contra del proceso de venta, del propio Gobierno o de la entidad financiera. Eso se quiere evitar a toda costa.
SALVO PREVISTO CONTAR RELACIÓN ENTRE PARTES
Sin embargo, la intención de Amadeo Salvo es ligeramente diferente. El máximo mandatario cree que el club debería conocer ya hoy cuales son las ofertas que recibido el banco para ser los nuevos dueños de la entidad valencianista. Salvo, defiende que el valencianismo merece saber quien son los interesados en comprar el Valencia CF, y que el propio club y la Fundación deberían poder tener al menos opinión sobre el que va a ser el nuevo máximo accionista de la entidad.
El banco, sin embargo, se negó a darle información sobre la identidad de los ofertantes el pasado viernes, aludiendo al contrato de confidencialidad que firma con cada uno de ellos.
Esa negativa del banco es la que Salvo cree que debe explicar. El presidente del Valencia CF, tiene previsto detallar a todos los que acudan el viernes a Mestalla cual ha sido la relación que han mantenido con el banco en los últimos meses.
Salvo y su gente cercana se sienten defraudados y engañados por la entidad financiera. Aseguran que primero les propusieron un plan de refinanciación que posteriormente rechazaron. Que más tarde pusieron en venta el club, y se les presentó un comprador, Peter Lim, al que no han hecho ni caso, y que una vez abierto el proceso de venta por parte del banco, en ningún momento se ha consensuado ni con el club, que se vende, ni con el máximo accionista, la Fundación, cuales deberían haber sido los parámetros exigidos a los interesados en comprar el club.
Eso será exactamente lo que explicará el presidente valencianista el viernes en la Asamblea convocada. Una Asamblea que preocupa y bastante en la cúpula del Gobierno Valenciano.