PAU FUSTER Meses después de anunciarse el acuerdo con Bankia, el VCF sigue sin dar los datos que el valencianismo exige. Hoy, un portavoz del club da la cara, explica la extrema dificultad de la operación en el contexto socio-económico actual y que la misma no está totalmente cerrada en algunos detalles. A partir de ahí, dos retos: el nuevo estadio y aficionados para llenarlo.
¿Por qué el VCF no explica a sus accionistas la operación Bankia?
—Lo fundamental se sabe y es que gracias a este acuerdo el Valencia podrá bajar su deuda más o menos a la mitad, financiarla y todo ello tras acabar el estadio y la nueva Ciudad Deportiva. Es una operación tan importante que cuando fue aprobada por el Consejo de Administración de Bankia el VCF y la entidad financiera la hicimos pública ante la posibilidad de que se filtrara la aprobación del protocolo, pero aún no está totalmente cerrada en algunos detalles como para poder dar todos los datos de manera exacta. Por tanto, cuando se pueda dar toda, aunque hay medios de comunicación que sí han dado datos, el VCF la explicará a todos los accionistas y aficionados. Es más, está previsto que en poco tiempo haya una comparecencia al respecto.
—¿Y qué falta para cerrar la operación?
—Cuestiones técnicas de la operación de índole urbanístico y también del proyecto del nuevo estadio que se están definiendo. Cuando ha de afrontarse la decisión sobre hacerlo público o no lo fundamental es plantearse si dar una información en un momento inoportuno puede poner en peligro la operación. Por encima de los intereses de gente que quiere conocerlo antes de hora, que es normal porque es una operación muy relevante para el VCF, lo fundamental para el club es el buen fin de la misma. Ese es el criterio que hay que anteponer a la hora de explicar o no una operación a pesar de la presión externa que tenemos. Muchas veces se entiende porque esta operación es extraordinaria y necesaria para el futuro del Valencia. Cualquier empresario o persona que regente un negocio y sabe lo difícil que está el mercado inmobiliario y financiero, sabe que esta operación en estos momentos es extraordinaria. No es lo mismo hace cinco o seis años, cuando se pudo y no se supo cerrar la viabilidad del estadio, que ahora mismo tal como está el mercado. Con el tiempo se verá la operación Bankia como extraordinaria y más en la perspectiva de cómo está la sociedad, con decrecimiento del PIB, con el paro, los problemas financieros y las restricciones. Igual que ocurrió con otras gestiones, como en la época del desaparecido Arturo Tuzón, se pondrá en su lugar una gestión que ha sido fundamental para salvar al VCF. No es una forma confabular, se ha salvado al club dada la deuda y los problemas que tenía. Sin exagerar, la operación con Bankia ha sido como ganar la Champions.
—Considera la operación extraordinaria, ¿por qué se ha aceptado vender la parcela de Mestalla por menos dinero el metro cuadrado que en su día se le abonaron a Juan B. Soler por la torre comprometida?
—A Juan Soler no se le ha devuelto dinero, él se hizo un contrato a sí mismo para quedarse una de las parcelas de Mestalla por una cantidad de dinero fuera de mercado, arreglando así unas cuentas deficitarias. Y no es que lo diga yo, es que nadie se acercó ni de lejos a pagar por el resto del estadio lo que él decía que iba a pagar al club cuando era máximo accionista. Era un precio que en aquel momento estaba fuera de mercado y hoy en día es ciencia ficción. Aquí el criterio a comparar es la actual tasación de Mestalla, y así estamos hablando de que la operación para el VCF es extraordinaria. Y es muy buena para Bankia, porque finalmente tendrá un gran activo, no es un activo tóxico y no son unos terrenos mal situados, estamos hablando del mejor solar de la Comunitat.
—Antes ha comentado que faltan cuestiones técnicas de índole urbanístico. ¿Ha de cambiarse la calificación del suelo de los terrenos de la Ciudad Deportiva de Paterna?
—Eso son temas técnicos en los cuales no puedo entrar.
—¿Qué falta para reanudar las obras del nuevo estadio?
—Antes que nada estamos en un proceso de acumulación de información sobre el proyecto y de redefinición adecuado a las nuevas necesidades. El proyecto inicial era muy ambicioso y diría que quizá excesivo en algunas partidas, y estamos en el proceso de redefinición con sentido común del que tiene que ser el nuevo estadio. Ha de ser un gran estadio, magnífico, uno de los mejores de Europa, pero desde luego cuando se hace un estadio nuevo hay que pensarlo bien en términos de sostenibilidad y eficacia.
—¿Espera alguna novedad de última hora?
—No, será un gran estadio de fútbol, el orgullo no sólo del valencianismo sino de todos los valencianos.
—¿Estará adecuado también para que el Ayuntamiento pueda realizar en él otro tipo de actividades?
—Con esta instalación el VCF tendrá uno de los mejores estadios y también colocará a Valencia en el gran circuito de conciertos y de grandes eventos en una instalación que hasta ahora no tiene la Comunidad Valenciana y que el VCF va a realizar.
—Otro asunto que parece no definido es la ubicación de la Ciudad Deportiva. En su día se compraron unos terrenos en Porxinos, Riba-roja, pero en el Consejo se ha hablado de la opción de hacerla en Náquera.
—En estos momentos la operación fundamental y que tenemos en el horizonte es la del estadio, y la operación sobre la Ciudad Deportiva va claramente sobre unas vías que es la opción de Riba-roja.
—¿Ya están hablando con JinKO Solar para prorrogar su patrocinio principal?
—Es una posibilidad, estamos hablando con ellos, están muy contentos y satisfechos con el Valencia y nosotros también porque nos ha dado un impulso muy grande. Hay que ver que de los cuatro o cinco clubes que presupuestariamente hay por detrás del Barcelona y Real Madrid, todos comenzamos la temporada sin patrocinador y el único que lo ha conseguido es el VCF. Ellos están contentos, han visto la repercusión que tiene el club, no sólo en Europa sino también en China, y estamos negociando. Somos optimistas a la hora de creer que prolongaremos la vinculación con ellos. Son una empresa pujante, extraordinaria y comparten una visión de futuro con nosotros.
—¿Esa vinculación también la facilitará el hecho de que JinKO coloque placas solares en el nuevo estadio?
—No está definido, es una opción que evidentemente puede darse si el proyecto técnico lo aceptara, pero no se está hablando de esa situación.
—¿Hacia dónde va el patrocinio deportivo?
—Creo que cada vez más hacia patrocinios internacionales. El mercado español está muy tocado, es difícil que empresas españolas puedan acometer lo que es el patrocinio de un gran club de fútbol. El futuro está en los países emergentes, como Brasil, China o Medio Oriente, empresas o multinacionales dispuestas a apostar por los clubes como vehículos de patrocinio globales, no sólo para el mercado de España. Por ejemplo, para JinKO, que es una gran empresa internacional, España es un mercado relativamente importante pero puede ser el que hace diez o doce.
—¿En qué mercados emergentes bucea el VCF para buscar ingresos y por el que trazan las lineas maestras del plan de internacionalización?
—En el VCF estamos inmersos en un plan estratégico empresarial, intentando primero conocer nuestras limitaciones y luego ver dónde están las oportunidades en estos momentos de crisis. Aparte del día a día del club y de la obligación de obtener ingresos y ser eficientes en los gastos, sin gastar lo que no debemos, hay tres asuntos fundamentales subrayados en este plan: la orientación hacia el abonado del VCF, no ya tanto los aficionados o simpatizantes en general, sino mirar al abonado. Después un plan de internacionalización en el que estamos inmersos ahora mismo, sobre todo a la hora de determinar qué mercados estratégicos son los que el VCF debe abordar. Después de estudiar la situación, es importante el mercado de Asia y también el de Sudamérica. Y después el asunto del nuevo estadio. Aparte del día a día, está siendo nuestra gran preocupación.
—¿En qué se basa el plan de internacionalización?
—En Sudamérica son economías emergentes Brasil, Mexico, Costa Rica, Puerto Rico, Venezuela… Son países que empiezan a tener recursos, quieren que vayan allí los clubes europeos o venir ellos aquí. Digamos que tener una relación y ganar prestigio a través del fútbol español. Date cuenta que en el mundo, si hay una cosa por la que España es envidiada es el fútbol. La marca España en fútbol y no sólo Real Madrid o Barcelona, esos clubes son los fundamentales pero después el nivel de conocimiento de nuestra marca es el más alto. El VCF es conocido por cualquier aficionado en todo el planeta al que le interese el fútbol español. La gran suerte que tenemos es esta marca, ahora estamos en un momento difícil porque finalmente son los éxitos deportivos los que te catapultan, pero tenemos que preparar el terreno para cuando llegue el momento de los éxitos deportivos tener toda la estrategia montada y dar el salto. Posiblemente, y es difícil decirlo, en 2004 se daban esas condiciones para dar el salto y no se orientó o no se dedicaron los recursos necesarios cuando se consiguió colocar al VCF a un nivel de éxitos deportivos grandísimos.
—De las tres grandes ramas en las que trabaja el VCF, ya hemos hablado del nuevo estadio y de la internacionalización. ¿Cómo se van a acercar al abonado?
—Tenemos un proyecto interesante que desarrollaremos poco a poco en el futuro, especialmente en orientar todo lo que son ventajas comerciales, ticketing, comunicación constante y promociones, en la figura del abonado, además de reajustar los precios. Los precios del fútbol son caros respecto a la situación de la sociedad, pero no son caros respecto a las necesidades del club porque al final el nivel de ingresos del club baja pero el nivel de expectativas de los aficionados nunca baja, siempre sube. Es una situación difícil de conciliar, pero tenemos en cuenta que el VCF ha de iniciar una estrategia con los abonados, no encaminada únicamente al corto plazo, sino hacia el traslado al nuevo estadio. Hemos hecho la Grada Jove, reivindicada por muchos aficionados jóvenes, la temporada pasada bajamos precios, ponemos ventajas hacia diferentes colectivos y este año vamos a profundizar en el tema de la gente joven. Queremos que la gente joven se acerque a Mestalla, tenemos la percepción de que el aficionado del VCF ve el hecho de ir a Mestalla como algo fuera de sus posibilidades y es todo lo contrario porque hemos puesto las entradas más económicas que nunca. De los diez primeros clasificados de la liga tenemos los precios más baratos, y nuestra preocupación ahora no es tanto subir el nivel de los ingresos económicos por esa partida como subir la asistencia de Mestalla. Esa es la obsesión, que la gente sepa que lo más importante es que Mestalla esté lleno todos los partidos.
—¿Se han estudiado medidas de la Bundesliga o la Premier League, donde se ven pocos asientos libres?
—Hay dos factores fundamentales; el precio de las entradas, el precio que pone el VCF se está equiparando a los que se fijan en la Bundesliga con precios económicos, pero está el tema adquisitivo. En Alemania e Inglaterra la crisis no está golpeando ni la mitad que en España y mucho menos que en la Comunitat Valenciana, donde el paro entre los jóvenes es altísimo. Queremos decirle al joven que ir a Mestalla no debe ser mucho más caro que ir al cine y los jóvenes no se privan de ir al cine un par de veces al mes, por tanto, ir a Mestalla debe ser asequible, fácil y bueno. De hecho, para la próxima temporada trabajamos en dos cuestiones; el pase infantil para que un padre pueda seguir con la tradición de ir con su hijo al fútbol un 50 por ciento más barato que el adulto, y la financiación de los pases. Es más importante, más que bajar en 20 ó 30 euros un pase, que se tenga la posibilidad de pagar el abono en varias veces y que no sea obligatorio pagarlo de golpe o en dos veces si tienes la tarjeta VISA Bancaixa. Se está trabajando en una financiación entre cuatro y seis plazos del abono porque la obsesión es la gente joven y que Mestalla se llene.
http://www.superdeporte.es/valencia/2012/03/06/operacion-bankia-ganar-champions/155404.html