El nuevo Mestalla arranca en enero

El Valencia debe a las constructoras casi 50 millones y pagará ahora cerca de 15 para que los operarios entren a trabajar en el coliseoLlorente llega a un acuerdo con la UTE para reiniciar de inmediato las obras del campo


El Valencia puede tener unas navidades completas, mucho más de lo que podía esperar hace poco tiempo. Si hace apenas unos días se cerraba el fichaje del 'Chori' Domínguez, lo que ha conseguido ahora Manuel Llorente es cazar uno de esos regalos que equivaldría casi a uno de los premios gordos que hoy se repartirán con motivo de la lotería. Se trata del inicio de las obras del nuevo campo de Mestalla. Anoche, de hecho, el presidente cenó con los representantes de las empresas constructoras y alcanzó un punto en común, cuestión en la que de manera oficial el club todavía no había pronunciado. El problema eran esos 50 millones que debe actualmente el Valencia a la UTE.

Según apuntó ayer LAS PROVINCIAS Punto Radio (92.0 FM), la UTE, encargada de la ejecución de la construcción de Mestalla, se mostraba dispuesta a aceptar el pago al contado de 15 millones de euros recogiendo el resto de la deuda pendiente en diferentes plazos, para ponerse de inmediato a trabajar en el campo. La cifra, aunque importante, no encajaba en la idea inicial a la que estaba dispuesto a llegar el club, que desde hace bastantes semanas ha estirado su propuesta de pago hasta los 12 millones de euros. No obstante, al final el Valencia parece que sí llegará a esos 15 millones.

Los contactos entre UTE y el club han sido continuos desde hace un par de meses. El consejo, en una reunión de carácter oficial, se fijó como objetivo prioritario el conseguir que a primeros de año la actividad obrera en el nuevo Mestalla fuera un hecho palpable. Y parece que lo ha conseguido.

La semana pasada, por ejemplo, Manuel Llorente mantuvo otra reunión con los representantes de las constructoras y tras la toma de contacto, la versión que recogió el propio Valencia es que el acuerdo entre ambas partes estaba cada vez más cerca de fructificar, como parece que así ha sido. Al club le interesa por encima de otros frentes que el campo se acabe cuanto antes. Son muchos los intereses que hay creados porque no sólo aumentarían los ingresos de nuevos socios al tener más capacidad, sino también todo el tema publicitario y comercial.

Aunque nadie se atreve a señalar una fecha en concreto en el calendario, todo indica que será a mitad de enero cuando se reanuden las obras. La idea es arrancar subiendo la cota del suelo que da a la zona recayente a la Dama Ibérica, donde el nuevo estadio tendrá el acceso principal.

El club abre la puerta a siete jugadores

El VCF no se opondría a la salida de Manuel Fernandes, Del Horno, Jordi Alba, Zigic, Miku, Baraja y Vicente.

En un grupo de 25 futbolistas es muy difícil tener satisfechos a todos, a pesar de que algunos técnicos recurran a las rotaciones, porque cuando se echa un vistazo a las estadísticas, la realidad refleja que hay un grupo formado por siete jugadores cuya participación hasta ahora ha sido anecdótica. ¿Qué van a hacer esos jugadores en el mercado invernal? ¿El club les está buscando una salida? ¿Van a seguir teniendo un papel secundario o pueden variarlo? Asier del Horno, Manuel Fernandes, Jordi Alba, Zigic, Miku, Baraja y Vicente no han sido protagonistas en el primer tramo del curso, a día de hoy todos están citados para regresar el día 28 por la tarde —sólo Ever Banega tiene un día más que sus compañeros al jugar hoy con su selección— pero tienen las puertas abiertas en el mercado de invierno si el Valencia recibe una propuesta que contente a las dos partes. Cada protagonista tiene sus particularidades.

Algunos como Vicente, Del Horno o el ´Pipo´ Baraja no tienen previsto cambiar de aires, Unai prefiere que Jordi Alba siga su aprendizaje entrenando con la primera plantilla, y el resto va a depender de las propuestas que surjan, aunque el único de todos que ya se ha mentalizado para salir cedido cuando la reglamentación de la Liga BBVA lo permita es Miku.

Emery se ha reunido recientemente con Manuel Fernandes y le ha transmitido que va a tener «un papel importante» en el equipo después de varios meses lesionado, pero desde que ha sido uno más en el grupo, sólo ha disputado once minutos. Tanto Unai como Fernando Gómez consideran al portugués un futbolista muy «aprovechable», por eso han decidido que en enero sólo le abrirían las puertas para un traspaso, nada de cesión, términos idénticos a los de Zigic con la salvedad de que Unai no le encuentra sitio al estilo de juego y apenas ha jugado.

La llegada del Chori Domínguez arrincona aún más al ariete serbio, que va cambiando de opinión y según el día que se le pregunta, o bien medita irse para coger ritmo de competición de cara al Mundial o bien prefiere quedarse porque Radomir Antic le ha garantizado una plaza para la cita de Sudáfrica. Manuel Llorente es consciente que la palabra de Nicola acaba siendo decisiva sobre su futuro, basta con ver lo que ocurrió en verano, cuando se negó a fichar por el Rubin Kazan que le ofrecía siete millones de euros. Si algún club se hiciera cargo de su ficha hasta final de curso, se valoraría la cesión, pero únicamente si el Valencia sale beneficiado económicamente. Del Horno también está en el mercado, pero no tiene alternativas para salir, sobre todo por sus altos emolumentos. No cuenta para Unai.

La duda de Jordi Alba
En Riazor, Jordi jugó media hora y se vio que aún no tiene rodaje en Primera, le faltan minutos de competición en la élite, de ahí que haya una facción en el club partidario de su cesión, a la que Emery se resiste. El técnico considera que puede seguir aprendiendo entrenando con el grupo, pero si llegase una propuesta interesante se volvería a abordar el tema.