Joan Carles Martí
Los gestores enviados por la Generalitat para no vender el Valencia, llevan días ofreciendo el club en el mercado persa global. Eso pasa en la orilla oeste del Mediterráneo sin bochorno alguno. Menos mal que dimitió Antonio Paños, la excepción que confirma la regla, como hizo antes Federico Varona. Pero ahí están todavía en sus cargos Amadeo Salvo y Aurelio Martínez. El presidente asegura en la junta de accionistas que no se vende, pero luego su homónimo de la Fundación confirma, sin despeinarse, que es uno de los que ha traído tres ofertas solventes para comprar el club. O sea, que mientras actuaba de enfurecido «palleter» de cara a la galería, hacia tiempo que iba llamando a puertas para vender. No sé lo que pensaran esos valencianistas de buena fe que todavía dudan sobre que la única solución pasa por alguien que traiga mucho dinero, pero la único claro es que los actuales responsables han puesto precio a su «sentiment». Y en la mayoría de los casos con nocturnidad.
Por si fuera poco, a pocos días de la cercana venta, reconocida por el propio Aurelio Martínez, el Valencia ficha un nuevo entrenador, y lo que eso significa. Aunque es cierto que el equipo no se puede parar, lo más sensato sería que esa transición tan modélica que pretende dirigir la Fundación se hubiera puesto en contacto con la opción favorita para ver si estaba de acuerdo con el sustituto deDjukic. Lo mismo que hizo Andreu con Salvo en el tema de Valverde. Aunque en este caso fue el preparador vasco el que decidió no continuar. Así que podemos asistir al más difícil todavía, que el comprador venga con su propio cuerpo técnico cerrado y que Pizzi ni siquiera se estrene en un partido en Mestalla. No se sofoque, estamos acostumbrados a eso y mucho más, recuerde que casi pasa con Emery. En aquel verano de 2008, cuando el bueno de Unai iba a entrenar por primera vez en Paterna,Luis Aragonés, que acababa de dejar la 'Roja' campeona de Europa, tenía la maleta preparada para volver a Valencia después de hablar con Juan Villalonga.
Mientras tanto, mañana el Madrid juega en Mestalla. El eterno rival blanquinegro encontrará el valencianismo más indefenso de los últimos duelos. Es inútil mirar las apuestas, los gestores valencianos del club, ellos solitos y con la ayuda de la autoridad se han cargado un equipo que fue alternativa real en la Liga. Busque, compare y seguro que encuentra algo mejor.
Por si fuera poco, a pocos días de la cercana venta, reconocida por el propio Aurelio Martínez, el Valencia ficha un nuevo entrenador, y lo que eso significa. Aunque es cierto que el equipo no se puede parar, lo más sensato sería que esa transición tan modélica que pretende dirigir la Fundación se hubiera puesto en contacto con la opción favorita para ver si estaba de acuerdo con el sustituto deDjukic. Lo mismo que hizo Andreu con Salvo en el tema de Valverde. Aunque en este caso fue el preparador vasco el que decidió no continuar. Así que podemos asistir al más difícil todavía, que el comprador venga con su propio cuerpo técnico cerrado y que Pizzi ni siquiera se estrene en un partido en Mestalla. No se sofoque, estamos acostumbrados a eso y mucho más, recuerde que casi pasa con Emery. En aquel verano de 2008, cuando el bueno de Unai iba a entrenar por primera vez en Paterna,Luis Aragonés, que acababa de dejar la 'Roja' campeona de Europa, tenía la maleta preparada para volver a Valencia después de hablar con Juan Villalonga.
Mientras tanto, mañana el Madrid juega en Mestalla. El eterno rival blanquinegro encontrará el valencianismo más indefenso de los últimos duelos. Es inútil mirar las apuestas, los gestores valencianos del club, ellos solitos y con la ayuda de la autoridad se han cargado un equipo que fue alternativa real en la Liga. Busque, compare y seguro que encuentra algo mejor.