EFE
La pizarra de Nuno Espírito Santo, entrenador del Valencia, ha dado sus frutos en las diez primeras jornadas de Liga, ya que siete de los veintitrés goles que lleva anotados el conjunto valencianista han sido fruto de jugadas de estrategia.
Cuatro tantos han llegado desde el saque de esquina: dos frente al Elche, otro ante el Atlético y otro ante el Villarreal, dejando constancia del peligro que tienen los valencianistas en las jugadas a balón parado, e incluso se consiguió uno tras segunda jugada.
Los goles a balón parado le han dado al Valencia siete de los veintitrés puntos, que ahora mismo le colocan segundo en la clasificación junto con el Atlético, y que permitieron al conjunto de Nuno empatar en Sevilla y derrotar a Elche y Villarreal.
El punto de penal también ha contribuido a forjar estos números. Rodrigo Moreno ha anotado su único gol en la Liga hasta el momento desde los once metros ante el Getafe, mientras que Dani Parejo aprovechó el rechace del penalti que erró ante el meta del Málaga, Idriss Carlos Kameni, para marcar el segundo tanto ante el conjunto andaluz.
El Valencia, además, parece tener la suerte de cara que otras temporadas le ha sido esquiva. Tres de los goles que lleva se los han marcado los contrarios en propia puerta. Joao Miranda (Atlético de Madrid) y Manu Trigueros (Villarreal), anotaron en propia para abrir el marcador y desequilibrar el choque, mientras que David Lombán (Elche) cabeceó a su propia portería un saque de esquina.
El resto de los goles sí que han sido obra de jugadores valencianistas. Ocho se han marcado con el pie derecho, seis con el izquierdo, cinco de cabeza y hasta uno con el pecho.
Además cabe destacar que ocho de los veintitrés goles se han conseguido antes del minuto quince de partido, lo que demuestra la intensidad con la que los valencianistas saltan al césped. Catorce tantos han conseguido la primera parte, y nueve en la segunda mitad.
El máximo anotador del equipo, por el momento, es Paco Alcácer con cuatro dianas, seguido por el central Skhodran Mustafi, que con el doblete del domingo en Vila-real se ha colocado con tres, los mismos que Parejo. La lista la completan Pablo Piatti y André Gomes (dos), y Lucas Orban, Rodrigo, Sofiane Feghouli, Nicolás Otamendi, Jose Luis Gayá y Carles Gil, con uno.
Por su parte, Diego Alves está cuajando su mejor temporada desde que llegó al Valencia, y de momento es el segundo mejor portero de la Liga con un coeficiente de 0,67 tras recibir seis goles en nueve partidos -Yoel fue quien defendió la portería en la derrota de A Coruña por 3 a 0-, tan solo superado por Bravo, el guardameta del Barcelona.
La comparación con el equipo de hace un año no deja lugar a dudas. La pasada campaña, el Valencia ocupaba en la jornada diez la undécima posición con trece puntos, muy lejos del líder -Barcelona-, que ya contaba con veintiocho. En la actualidad, el Valencia ocupa la segunda posición junto con el Atlético, con veintitrés puntos, a tan solo uno del Real Madrid.
Los números tampoco engañan. El Valencia del año pasado había anotado trece goles en diez partidos, mientras que este año lleva veintitrés y es el segundo máximo anotador junto con el Barcelona. Además, había recibido la friolera de diecisiete, y ahora lleva nueve tantos recibidos, siendo el tercer equipo menos goleado junto con el Atlético.
Las diferencias han propiciado que el ambiente del club también diste mucho de un año a otro. El año pasado Miroslav Djukic, que era el entrenador, se veía contra las cuerdas, y acabaría destituido a mediados de diciembre. Este curso, Nuno Espírito Santo ha ganado en diez jornadas todo el crédito que el técnico serbio perdió en media temporada e incluso se habla ya de su renovación.
El Valencia ha igualado el mejor arranque de Liga de su historia tras diez jornadas disputadas. El precedente más reciente lo encontramos en la 08-09, pero también se logró en la 03-04 y en la 43-44, temporadas en que el Valencia se proclamó campeón de Liga.