#YoEstoyConelMestalla

Partidos del Valencia CF

Partidos del Valencia CF
Valencia CF - R. Sociedad

Partidos del Mestalla

Partidos del Mestalla
Valencia CF Mestalla - Atletic Balears

Partidos del Valencia Femenino

Partidos del Valencia Femenino
UD Collerense - Valencia CF Femenino

Plan de entrenamiento

Plan de entrenamiento
Martes 24 de mayo | Entrenamiento a las 11h en Paterna. Primeros 15 mins abiertos a los mmcc. Miércoles 25 de mayo | Entrenamiento a las 11h en Paterna. Primeros 15 mins abiertos a los mmcc. Jueves 26 de mayo | Entrenamiento a las 11h en Paterna. Primeros 15 mins abiertos a los mmcc.

ORGULLO

ORGULLO

sábado, 10 de marzo de 2012

Previa rueda de prensa Valencia cf - Cd Mallorca

MallorcaCaparrós: ´El Valencia cumple sus objetivos todos los años´


El entrenador del RCD Mallorca.

 El entrenador del Mallorca, Joaquín Caparrós, ha elogiado hoy al Valencia, que mañana recibe a su equipo en el campo de Mestalla, y ha afirmado que "cumple sus objetivos todos los años".


"El Valencia lleva años trabajando juntos, cumplen los objetivos todos los años, están terceros por méritos propios, por su calidad individual y son colectivamente fuertes", ha explicado Caparrós en rueda de prensa.


"Si no estamos a un alto nivel tendremos problemas. Los que salgan tienen que hacerlo convencidos de hacer un buen partido a nivel colectivo", ha subrayado.


Caparrós cumplirá mañana en Mestalla 400 partidos como entrenador en Primera división.


"La cifra es importante", ha afirmado.


"Es una cantidad fácil de decir pero detrás hay once años, tenía más pelo y otra pinta más joven. Estoy muy agradecido a los clubs como son el Sevilla, Deportivo, Athletic y Mallorca, me han dado la oportunidad de llegar a estos 400 partidos, también a la afición y sobre todo a los futbolistas", ha subrayado.


Caparrós no cree que el esfuerzo del Valencia en la Liga Europa (jugó y ganó 4-2 al PSV Eindhoven el pasado jueves), le pase factura.


"Los futbolistas que saldrán son de primer nivel y son jugadores que el año pasado quedaron y son terceros. Independientemente de la alineación, cumplen los objetivos toda la plantilla. Tienen nivel y su entrenador confía en ellos", ha indicado el técnico mallorquinista.

Caparrós cumplirá mañana en Mestalla 400 partidos como entrenador en Primera división


ValenciaEmery: ´El Mallorca vende muy cara su piel´





Unai Emery, entrenador del Valencia, espera para mañana un partido "rocoso" y "cerrado" en Mestalla ante el Mallorca, un rival que "vende muy cara su piel en cada jugada" y que es muy poco probable que propicie un partido abierto.

"El Mallorca, como la mayoría de los equipos de la Liga española no ofrecen el fútbol alegre como el que, por ejemplo, ofreció el PSV Eindhoven el jueves en la Liga Europa", agregó el entrenador del Valencia.

Tras la lesión de Víctor Ruiz, quien con una microrrotura ha quedado fuera de la lista para recibir al Mallorca, indicó que Adil Rami, a pesar de que tiene molestias, está en condiciones de jugar, mientras que Hedwiges Maduro, aunque faltó de ritmo, podría volver.

El equipo ha tratado de adaptar el último día de entrenamiento al horario del encuentro de mañana, que dará comienzo a las cuatro de la tarde, una hora muy poco habitual para el equipo valenciano.

"Quizá haga un poco más de calor y de sol, pero creo que no nos va a afectar mucho. Pienso que es una buena hora para jugar al fútbol y ya veremos cómo lo ve la afición. Si ganamos, el horario habrá sido muy bueno", indicó.

Emery no quiso comparar este encuentro con el del jueves ante el PSV, en el que el Valencia ganaba por 4-0 a diez minutos del final y en el que sólo se impuso por 4-2, al recibir dos tantos en los instantes finales.

"El otro día vimos muchas cosas positivas, pero no era un partido por puntos, sino una eliminatoria y hay que jugar en Holanda. Se puede decir que perdimos mucho de lo ganado, pero hay más cosas positivas que negativas", explicó Emery.



http://www.superdeporte.es/valencia/2012/03/10/mallorca-vende-cara-piel/155845.html

Vuelve Maduro y se caen Víctor Ruiz y Pablo





 Los jugadores del Valencia Víctor Ruiz y Pablo Hernández no jugarán por lesión ante el Mallorca, ya que hoy se han sumado a la lista de lesionados en la que también se encuentra el portugués Ricardo Costa, que se retiró en el encuentro del jueves ante el PSV Eihdoven.

El entrenador del Valencia, Unai Emery, ha ofrecido hoy una lista de diecinueve jugadores para recibir mañana al Mallorca en la que no están Víctor Ruiz y Pablo Hernández, cuyas respectivas lesiones se confirmaron hoy.

Los convocados son los porteros Guaita y Alves, junto a Barragán, Dealbert, Maduro, Rami, Bruno, Mathieu, Jordi Alba, Albelda, Tino Costa, Topal, Parejo, Feghouli, Piatti, Bernat, Jonas, Aduriz y Soldado.

La principal novedad es la del holandés Hedwiges Maduro, recuperado de la lesión que sufrió a finales del pasado año y que le han mantenido cinco meses fuera del equipo.

Según las pruebas realizadas hoy, Ricardo Costa sufre una rotura fibrilar de siete milímetros en el bíceps femoral de su pierna derecha y en unos diez días volverá a ser sometido a un control de su evolución.

Por otra parte, Víctor Ruiz presenta una microrrotura fibrilar de tres milímetros en los isquiotibiales de su pierna derecha y también la próxima semana será sometido a un nuevo control.

Finalmente, Pablo Hernández, según las pruebas realizadas este sábado, sufre una contractura en los isquiotibiales de su pierna izquierda.

Estas lesiones se unen a las dolencias de larga duración que padecen tanto el argentino Éver Banega como el también centrocampista Sergio Canales.



http://www.superdeporte.es/valencia/2012/03/10/vuelve-maduro-caen-victor-ruiz-pablo/155841.html

¿Está el Valencia CF en buenas manos?

Presumía Vladimir Putin hace un par de noches, en una Plaza Roja repleta hasta la bandera de incondicionales seguidores, de haber arrasado en las elecciones presidenciales rusas sin recurso a trampa alguna. Cuando su jefe de prensa le pasó un recorte de un periódico americano en el que se recogía que en un colegio electoral de Chechenia su candidatura había obtenido más votos que electores inscritos en el mismo, Putin sonrió. Nadie como él sabe lo fácil que es ganar cuando uno domina los resortes del poder.

Lejos de Rusia, pero con un régimen igualmente presidencialista —sólo se diferencia del ruso en que en este también habla el jefe de prensa—, transita el Valencia Club de Fútbol, inmerso en una curiosa encrucijada. Parece que definitivamente desterrada ya entre sus hinchas la falacia de que su rendimiento deportivo se mueve «dentro de los objetivos marcados», suele el aficionado aferrarse a la parcela económica para defender la gestión de Manuel Llorente al frente del club. Echa mano, para ello, de los tenebrosos precedentes y, sobre todo, de lo que se transmite desde las oficinas del club —un poco al estilo Putin—. Pero, ¿es ello suficiente para estar, de verdad, tranquilo? ¿O expedientes cuanto menos curiosos como la venta de la famosa parcela R1 revelan que hay detalles oscuros que necesitan aclaración?

Sería de necios no reconocer una mejora en la gestión del club si la comparamos con los desmanes perpetrados por la pareja Soler-Soriano. Ello, sin embargo, tiene un mérito escaso. Tomar como punto de referencia a los dos peores presidentes que ha conocido el VCF y, probablemente, club alguno en el mundo, puede ayudar a inflar el ego, pero poco más. Fiarse, a pies juntillas, de lo que transmite el club en cuanto a su situación económica tampoco parece la mejor de las opciones ¿Se nos ha olvidado acaso la tournée de radios y periódicos nacionales que en su día se marcó Vicente Soriano para defender su «nuevo modelo de gestión», que iba a situar al Valencia a la vanguardia de Europa? Bien es cierto que todo se vino abajo cuando llegó un mes de febrero y no pudo ni pagar las nóminas —situación a la que todavía no se ha llegado—, pero nadie le quita el baño de masas y los halagos infinitos que recibió quien parecía el Bill Gates de Puçol.

Está todavía por venir al mundo, así, el presidente de un club que no califique su gestión económica como ejemplar. Las deudas, los pufos, los expolios son siempre cosas de los antecesores. ¡Si ni siquiera Soler reconoce haber dejado al club en la ruina! Ramón Calderón o Joan Laporta vociferan y amenazan con acciones judiciales cuando sus sucesores aseguran que los números de los clubes que presidieron están manipulados y son las deudas mucho más serias de lo declarado. De todos es conocida la credibilidad de los informes de las empresas de auditoría que se presentan en las juntas de accionistas. Informes como esos, sin ir más lejos, situaban a los bancos y cajas valencianos entre los más saneados de Europa, por no decir del mundo hasta hace cuatro días. Quien manda, en definitiva, presenta los números cuando y como le viene en gana y no es hasta que llega el siguiente que se conoce solo parte de la verdad. La otra parte, la de las comisiones para hijos, sobrinos, tíos y abuelas nunca se cuenta, porque todos forman parte de la omertà que va en el carné de presidente.

La gestión
Así las cosas, ante un Mestalla en mínimos históricos de ocupación, eliminados de la posibilidad de cualquier cosa en los últimos tres años y con un grado de conexión equipo-aficionado sumamente debilitado, Llorente sigue esgrimiendo la economía como ariete inatacable de su gestión. Y sí, hay que reconocer que va pagando las nóminas y ha refinanciado —insisto, refinanciado— la deuda. ¡Ah! También asegura haber vendido las parcelas. De hecho, se dijo cuando se presentó, atropelladamente, el acuerdo con Bankia que con la operación se iba a finiquitar toda la deuda del club. Todo ello muy loable, pero sujeto a sutiles matizaciones.

Sanear tu empresa a base de deshacerte de sus mejores activos tiene un mérito digamos que relativo. La gestión de Llorente se ha basado en vender a sus mejores futbolistas —en buenas condiciones para el Valencia, todo hay que decirlo— y comprar otros de bastante menos calidad que, en la mayor parte de ocasiones, no han dado el rendimiento adecuado. Así, cualquiera rebaja la deuda. Esa declarada —contra facta non valent argumenta— falta de ambición deportiva, refrendada por la renovación de un entrenador tan conformista como su presidente y los fichajes realizados sirvieron, a su vez, para tranquilizar a los mandamases de Bankia, que viajan ya a Valencia seguros de que no van a tener sobresaltos… y dispuestos a firmar la famosa adquisición de las parcelas.

Ya ayer pudimos leer aquí, en la pluma de J. Ríos-Capapé, lo fácil que es manipular una operación contable para que parezca que somos los tíos más listos del mundo. Unos días antes pudimos también leer una entrevista al jefe de prensa del VCF, el único que habla, además de su jefe, a la espera de que salga el consejero Giner a reclamar la renovación de Emery en cuanto se asegure un puesto en Champions. De esa entrevista, repleta de obviedades, me quedo con un detalle: la supuesta operación con Bankia, que sigue sin ser explicada, ya no va a dejar a cero la deuda del club, que nadie sabe exactamente a cuánto asciende, sino que la va a dejar a la mitad. En unos pocos meses, y con absoluta ligereza, se han esfumado 150 millones de euros tirando por lo bajo. ¿Puede el aficionado estar tranquilo en estas condiciones? ¿No debería alguien aclarar todo este asunto? ¿En qué quedamos?

Pues quedamos en que tal vez no sea oro todo lo que reluce en los balances y desde luego no lo es en lo que vemos, día sí y día también, sobre el campo de juego. Lo que solemos ver es un triste espectáculo, que es, justamente, lo último que le pide un aficionado a su presidente.



http://www.superdeporte.es/colaboradores/2012/03/03/valencia-cf-buenas-manos/155186.html

La cara de Llorente lo dice todo

El careto de Manuel Llorente, al acabar el partido de la otra noche, hablaba por si solo. Más que un poema, el rostro del presidente del Valencia era un verso suelto, cuando compareció en su tradicional cita con las reporteras de los canales de televisión, a las que tanto quiere como teme. La palabra no es precisamente el don de Llorente. Se trata de un hombre más de números -no me atrevo a decir de ciencias- que de letras, y cuando se decide a largar, Damiá Vidagany -su particular perro guardián de Moscú- tiembla. Al no dominar la prosodia, las ideas se le atascan en la cabeza y le salen a borbotones, de ahí que en esos lances televisivos postpartido, haya deparado momentos memorables y meteduras de pata descomunales. Al acabar el choque ante el PSV, no le escuchaba pero le veía. No hacía falta más. Su cara de ira contenida, de contrasentido inexplicado, era fiel reflejo de lo que había sucedido sobre el césped y denotaba el titubeo que embargaba a la grada, que transitaba de un sitio a otro, entre la euforia (4) y el cabreo (2). No es necesario que digas nada, Manolo, pensé. Estamos contigo, comprendemos tu desazón. Es como si en baloncesto -para que lo entiendas mejor- ganas los tres primeros cuartos por abrumadora diferencia y acabas entregando el tercero por inadmisible indiferencia. 
Mestalla no se merece esto. En partidos como este, que se encarrilan desde el arranque, Mestalla la gente se viene arriba y se ilusiona con un festín completo, duradero y sin piedad. En cambio, los futbolistas abren la mano, sueltan la presa que tenían atenazada por el pescuezo y levantan el pie. La frustración se expande por la grada. No hay manera de asistir a una orgía a tutti plen, con gaudeamus final. El día que Dani Parejo se decide a parar, mandar, templar y repartir juego, el equipo se enreda con los cuartos traseros y acaba echando un borrón sobre su fino trazado anterior. No hay manera de dar con un VCF redondo.



http://www.levante-emv.com/deportes/2012/03/10/cara-llorente-dice/888470.html

Los cortocircuitos letales del Valencia


O el libro de Emery no es efectivo o sus jugadores aún no lo han leído. El Valencia tiene un problema de mentalidad, de concentración. Es imposible que el equipo blanquinegro esté centrado al cien por cien en cada partido. Y eso ha costado demasiados sustos y muchos puntos a lo largo de esta misma temporada. Da la sensación de que, aunque todo funcione bien, siempre va a llegar un instante del encuentro en que el equipo sufrirá un cortocirtuito letal.
Durante 80 minutos el Valencia firmó un partido casi perfecto ante el PSV. Los holandeses necesitaban nada menos que cinco goles en la vuelta para superar la eliminatoria, lo que colocaba al equipo de Emery en puertas de los cuartos de final. Pero tras la pájara de turno, a los de Eindhoven les basta ahora con un 2-0 en casa para dejar en la cuneta al conjunto blanquinegro. Y todo por una desconcentración... de diez minutos.
Son errores que el equipo ha repetido demasiadas veces, el talón de Aquiles de un Valencia que todavía no ha encontrado la manera de poner remedio. Los jugadores son incapaces de estar con los cinco sentidos en el césped hasta que pita el árbitro. El jueves se dejaron ir, viendo la eliminatoria cerrada y a un rival entregado, y aunque no se espera una tragedia en la vuelta esa actitud final, que empaña un gran partido, puede salir cara. La serie está abierta para el duelo de vuelta en Holanda.
Ni a Emery ni a Llorente les gustó nada el tramo final del encuentro ante el PSV. El presidente estaba visiblemente enfadado al término del partido, porque esta falta de actitud es lo que más le irrita. «Hemos perdido la concentración al final, no te puedes confiar», manifestó el máximo mandatario tras el encuentro.
El entrenador lamentó «la falta de constancia tras haber hecho un buen encuentro» y explicó que el pésimo desenlace del partido se debió «al exceso innecesario» de confianza y la pérdida de concentración. «Nos ha costado dos goles y de eso debemos aprender para que no se vuelva a repetir», argumentó Emery.
Otro que también hizo ayer autocrítica fue Pablo Piatti. El futbolista argentino, que marcó el cuarto gol, instó a «aprender» de lo ocurrido. «No nos pueden pasar estas cosas, porque los rivales no perdonan y lo acabas pagando caro», comentó el delantero, en racha en este inicio de 2012, ya que ha conseguido ver puerta en todas las competiciones.
Si esa autocrítica surte efecto y el equipo corrige sus errores, podría ser un paso importantísimo en la Europa League. Hay que tener en cuenta que los dos principales favoritos, los equipos de Manchester, tanto el United como el City, han perdido sus partidos de ida y tienen complicado continuar en la competición. Eso despejaría el camino al Valencia y le convertiría en uno de los grandes candidatos a ganar el torneo, una oportunidad que no se puede desaprovechar.
El ex del Almería reconoció que tenían «el partido encarrilado, pero la desconcentración de los últimos minutos pone más complicada la eliminatoria, aunque hubiéramos firmado el resultado antes de empezar», destacó el jugador tras el entrenamiento en Paterna.
A la opinión de todos ellos se suman los pitidos de la afición al acabar el encuentro, que evidenció un descontento general quizá exagerado. «Se entienden los pitos, porque era un encuentro en el que no estábamos sufriendo; que de repente nos metan dos goles, molesta» señaló Piatti.
La reacción de Mestalla vino por la reiteración en la falta de actitud. Ya son muchas veces esta temporada las que el equipo ha dejado escapar puntos por bajones de rendimiento en un tramo concreto del partido. En Sevilla ante el Betis, con dos goles de Rubén Castro en el tiempo añadido. En Santander contra el Racing, con un tanto de Bernardo que frustraba la remontada blanquinegra. En Pamplona, donde Lolo se llevó dos puntos. En Mallorca, con penalti in extremis transformado por Hemed. Sobran los ejemplos.
Pero hay más. El Sevilla venció en Mestalla hace dos jornadas tras una segunda parte lamentable de los de Emery, algo que no llegó a ocurrir el pasado domingo en Granada, donde sí se vio a un Valencia muy inferior tras el descanso del que jugó en la primera mitad.
La goleada en el Camp Nou se gestó en el último cuarto de hora, cuando los culés marcaron tres goles para hacer una manita humillante. Es uno de los momentos donde más clara se ha visto la bajada de brazos general del equipo, y llegó ante un supuesto rival directo y con el marcador igualado.
En el Sánchez Pizjuán el Valencia se 'olvidó' de jugar los minutos finales y casi echa por tierra la eliminatoria copera con los dos goles que marcó el Sevilla. También en Mestalla los blanquinegros dejaron escapar puntos importantes ante los equipos vascos. Con un encuentro para olvidar, cayendo derrotados ante la Real Sociedad con gol de Griezmann, y al empatar a uno contra el Athletic, que será un rival peligroso en el tramo final de la Liga y ante el que los de Emery no pasaron del empate... y gracias, ya que Soldado evitó lo que parecía una inevitable derrota.
Sin embargo, las dos grandes pájaras defensivas de la temporada fueron en la Champions ante Chelsea y el Bayer Leverkusen, con resultados que abocaron al Valencia a caer eliminado en la máxima competición continental para llegar rebotado a la Europa League que disputa actualmente.
Tras firmar un primer tiempo apoteósico, los blanquinegros vieron cómo en sólo tres minutos de trágica desconcentración el Bayer remontaba el tanto de Jonas, depositando sobre sus hombros una paesa losa imposible de levantar durante el resto de la liguilla.
Ante el Chelsea la soberbia actuación de Diego Alves evitó la derrota en Mestalla, pero otra nueva empanada defensiva puso en jaque al equipo en Stamford Bridge y complicó la existencia de un conjunto habituado a jugar con fuego.
Por todo ello, da la sensación de que al vestuario del Valencia no le gusta vivir tranquilo, y cuando ve un partido encarrilado desconecta para sufrir y hacer sufrir a sus aficionados. La falta de esa mentalidad ganadora a la que Emery hace referencia y el hambre que no tienen pero sí muestran Real Madrid o Barcelona para ganar cada partido hacen aún más evidentes las diferencias entre los dos escalones de la Liga. El técnico ha admitido en más de una ocasión que su gran preocupación es que el equipo sepa cerrar los partidos, pero aún no ha dado con la tecla.

¡Alarma en la defensa del Valencia!





Cuando Adil Rami se subió a su vehículo y esperó al médico no era buena señal, ya que se iba a realizar unas pruebas de control por unas molestias en el pubis que ya sufre desde hace unas semanas. Hasta el momento no le han impedido jugar y el central francés cree que Unai puede contar con él si lo considera oportuno, pero al técnico le preocupa su estado físico, sobre todo porque este sábado no va a poder contar con su teórico sustituto Ricardo Costa. Emery va a esperar hasta ver cómo realiza el entrenamiento, y después dará la convocatoria en la que tiene a dos centrales sanos al cien por cien: Víctor Ruiz y Dealbert. 

La pubalgia es una lesión que a veces no te impide jugar, pero sí es muy molesta y en ocasiones se recomienda descanso. Emery tenía la intención de darle descanso ante el PSV, pero la lesión de Ricardo alteró los planes iniciales y acabó jugando 66 minutos. Ese fue el motivo por el que este viernes formó parte de los elegidos para la sesión de recuperación, igual que Víctor, de ahí que Emery realizara el entrenamiento del viernes —en el que sólo participaron doce futbolistas— un ejercicio con Dealbert ejerciendo de central izquierdo y Maduro a su lado. 

Ricardo Costa, mejor
El central portugués tenía buenas sensaciones después del fuerte pinchazo en la zona de los isquiotibiales de su pierna derecha, pero el viernes tenía mejores sensaciones y espera que tras la exploración médica de este sábado esté parado como máximo dos semanas. Ricardo estaba cuajando un buen encuentro.

Mathieu se lleva la bronca de Unai
Una vez ya en el vestuario, Unai se dirigió a Mathieu con un enfado tremendo y le recriminó que cometiera un penalti por «una falta de concentración». El técnico considera que era innecesario y se llevó una bronca delante de sus compañeros, ya que a pesar del triunfo, se tiene la sensación que con el 4-0 y el rival del PSV escorado no se le podía derribar dentro del área. Jeremy no es un futbolista que exprese mucho sus sentimientos pero estaba afectado, admitiendo así que el penalti se lo habría podido evitar, ya que dio alas al PSV y redujo diferencias.



http://www.superdeporte.es/valencia/2012/03/10/alarma-defensa-valencia/155812.html