ANDRÉS GARCÍA No se ha buscado un mal destino para veranear...
—(ríe) Cullera es un lugar muy tranquilo donde vengo a descansar en mis vacaciones y a pasármelo bien con mi gente. Mi familia, mis amigos, mi novia... La verdad es que son días muy agradables.
—¿Desde cuándo pasa aquí las vacaciones?
—Vengo desde pequeñito, desde que nací, porque el apartamento ya era de mis abuelos. Mi madre venía de pequeña, así que yo también he disfrutado de Cullera desde que nací. Es donde mejor me lo paso.
—Pónganos los dientes largos un poco. ¿Cómo es un día en Cullera?
—Me levanto por la mañana y enseguida me bajo a la playa. Me gusta mucho. He estado en la de La Malvarrosa y esta de Cullera. ¡Me quedo con esta! Me gusta tomar el sol y bañarme también. Luego vamos a la piscina antes de subir a casa. Comer... y luego otra vez lo mismo. Otra vez, playa, piscina, amigos y si tengo tiempo jugar una partidita de tenis con los amigos.
—No me lo creo.. ¿Ahí acaba el día?
—(ríe) También me gusta dar una vuelta por el paseo cuando se va el sol... ¡y a dormir! Ahora sobre todo pronto que no están mis amigos.
—¿Algún partidito en la playa con los amigos, no?
—Bueno, algún partidito con los amigos en los ratos libres sí que cae. En la playa, en el campo que hay al lado del apartamento... ¡También al voley, eh! Aquí hay de todo.
—¿Qué le dicen los colegas cuando juega ahora que ya es jugador del primer equipo del Valencia?
—Desde que subí al primer equipo, la verdad es que he jugado poco con ellos. Pero sí que bromean. ¡Me dicen que no vaya a tope cuando juegue con ellos!
—¿Le ha cambiado mucho la vida en un año? Justo hace un año era jugador del Juvenil y el primer equipo parecía tan lejos...
—Sigo siendo el mismo. Quien me conoce lo sabe. Mira, justo fue aquí en Cullera, en la piscina del apartamento, donde me enteré el verano pasado de que había muchas posibilidades de que hiciera la pretemporada con el primer equipo.
—¿Estaba en la piscina?
—Sí, sí. Estaba en la piscina y no me lo creía. Venía del Juvenil, no había pasado por el filial y cuando me lo dijeron me quedé un poco sorprendido. Hablé con mi representante, me lo confirmaron y, mira, al final todo salió bien.
—Ya lo creo que salió tan bien... Menuda pretemporada se marcó.
—Fue la pretemporada que cualquiera sueña. Estaba muy contento. Las cosas me salieron muy bien y tengo unos recuerdos fantásticos. Recuerdo los partidos del Sporting en Lisboa y contra el Hamburgo... Marqué y fueron goles muy bonitos. Esos partidos se van a quedar ahí para siempre.
—El premio fue empezar de titular en el primer partido de Liga...
—Sí, no me lo esperaba. Si te digo la verdad, aquel día estaba muy nervioso. No me esperaba ser titular. Pensé que la pretemporada era como un premio y que se iba a quedar ahí... pero el míster me dio esa confianza y yo la verdad es que no pude devolvérsela. No fui yo en el campo. Lo noté dentro y se notó también desde fuera.
—Luego Emery le hizo desaparecer y su presencia en el equipo ya fue intermitente. Desde mi punto de vista, no parecía la mejor decisión...
—Bueno... luego jugué también partidos. Intenté hacerlo lo mejor posible. Mira, tengo buen recuerdo del partido contra el Levante en la Copa. Me encontré muy bien. Al final, el balance de la temporada fue muy positivo. Porque alcanzar todo esto con sólo 19 años es para estar contento. Emery me dio la posibilidad de debutar en Primera con el Valencia, jugué en la Europa League... Tengo que estar agradecido y le deseo suerte en su nuevo proyecto. Creo que tiene potencial para hacer grandes cosas allí.
—¿Se había imaginado un vestuario del primer equipo del Valencia como el que encontró?
—Cuando eres pequeñito ves a los futbolistas como personas diferentes, pero luego entras, los conoces y te das cuenta de que son personas normales, como cualquiera. Hay humildad. Son iguales que tú y que yo y eso me ha ayudado mucho. Me han tratado muy bien como canterano y eso se agradece.
—La afición le adora. Se nota.
—(Asiente) Lo notaba cuando salía a calentar, en la calle, el cariño de la gente es muy bonito. Ojalá pueda agradecérselo en el campo.
—Todo este sueño lo ha vivido al lado de Paco Alcácer.
—Eso lo ha hecho todo más bonito. Llevo jugando con él desde infantiles, es más que un compañero. Me alegro mucho por él y deseo que le vaya bien. Ojalá sigamos juntos en el Valencia, pero es decisión del míster. Empezó mal el año a nivel personal con la pérdida de su padre. Fue una pena. Yo también lo conocía y me llegó mucho, pero Paco ha sabido rehacerse y todos le hemos ayudado. Ahí es cuando tenía que demostrar que era su amigo.
—El futuro en el banquillo ahora se llama Mauricio Pellegrino.
—Sí y me alegro mucho. Lo tuve en el Cadete de primer año, me trató muy bien. Era muy amable, muy serio, muy disciplinado y aprendimos mucho con él.
—¿Qué es lo que más le llamó la atención del ´Flaco´?
—Que era serio y disciplinado y lo ordenado que era en cuestiones tácticas. Fuimos campeones de Liga. Hicimos un buen trabajo.
—¿Recuerda cómo jugaban?
—Con línea de cuatro atrás, 4-2-3-1, 4-4-2, pero a veces también 4-3-3. No recuerdo bien. ¡Hace tanto!
—¿Qué pensó cuando se enteró de que iba a ser el entrenador?
—Me alegré mucho porque podré verlo otra vez. Él ya me conoce y es algo que tengo positivo. También a Paco. Coincidimos los dos.
—Quiere verle y que sea Juan Bernat quien se gane un hueco en el primer equipo. ¿Qué le parece?
—Sí, bueno, eso es lo que voy a intentar hacer. Voy a intentar ir a tope en pretemporada, como hice el verano pasado. Quiero hacerlo lo mejor posible y demostrarle que puedo tener un sitio en este equipo. Es un reto complicado, pero es un sueño que tengo al alcance y por el que voy a luchar para que se haga realidad. Yo voy a darlo todo por mi parte este verano para convencerle.
—¿Qué le parecería una cesión a un Primera? El Rayo Vallecano es el que más interés tiene.
—Sí, se ha hablado. Si es lo mejor para el club y para mí... El club es el que decidirá. Eso ya se verá, pero yo no pienso ahora en eso. Sé que hay equipos por lo que leo en la prensa y es bonito que equipos de Primera piensen en ti, pero lo único que me preocupa ahora es hacerlo lo mejor posible en pretemporada.
—El Valencia ha fichado un interior izquierdo, Andrés Guardado. Competencia de la buena...
—Sí, ahí se complica un poco más la situación, pero esto es el Valencia y sé que tengo que competir con todos los que juegan en mi posición. Es lo normal. Está Guardado, está Piatti, pero yo voy a competir por hacerme un sitio.
—¿Y Jonathan Viera y Joao Pereira? ¿Qué le parecen?
—A Jonathan no le he visto jugar, pero me han hablado muy bien de él. A Joao Pereira sí que le conozco. Jugué con él en el amistoso contra el Sporting de Lisboa. Él me cubría. Es un gran jugador. Es internacional con la selección.
—Pero le reventó con un gol...
—(Ríe) ¡Me reventó él a mí que le hice un autopase y me hizo una obstrucción que me quedé allí KO!
—Parece que se marcha Jordi Alba, Aduriz, puede que Topal, Tino...
—Son grandes compañeros, pero ahí en temas deportivos no me voy a meter. Esas decisiones las tiene que tomar el club. Yo sólo, a jugar...
—(ríe) Cullera es un lugar muy tranquilo donde vengo a descansar en mis vacaciones y a pasármelo bien con mi gente. Mi familia, mis amigos, mi novia... La verdad es que son días muy agradables.
—¿Desde cuándo pasa aquí las vacaciones?
—Vengo desde pequeñito, desde que nací, porque el apartamento ya era de mis abuelos. Mi madre venía de pequeña, así que yo también he disfrutado de Cullera desde que nací. Es donde mejor me lo paso.
—Pónganos los dientes largos un poco. ¿Cómo es un día en Cullera?
—Me levanto por la mañana y enseguida me bajo a la playa. Me gusta mucho. He estado en la de La Malvarrosa y esta de Cullera. ¡Me quedo con esta! Me gusta tomar el sol y bañarme también. Luego vamos a la piscina antes de subir a casa. Comer... y luego otra vez lo mismo. Otra vez, playa, piscina, amigos y si tengo tiempo jugar una partidita de tenis con los amigos.
—No me lo creo.. ¿Ahí acaba el día?
—(ríe) También me gusta dar una vuelta por el paseo cuando se va el sol... ¡y a dormir! Ahora sobre todo pronto que no están mis amigos.
—¿Algún partidito en la playa con los amigos, no?
—Bueno, algún partidito con los amigos en los ratos libres sí que cae. En la playa, en el campo que hay al lado del apartamento... ¡También al voley, eh! Aquí hay de todo.
—¿Qué le dicen los colegas cuando juega ahora que ya es jugador del primer equipo del Valencia?
—Desde que subí al primer equipo, la verdad es que he jugado poco con ellos. Pero sí que bromean. ¡Me dicen que no vaya a tope cuando juegue con ellos!
—¿Le ha cambiado mucho la vida en un año? Justo hace un año era jugador del Juvenil y el primer equipo parecía tan lejos...
—Sigo siendo el mismo. Quien me conoce lo sabe. Mira, justo fue aquí en Cullera, en la piscina del apartamento, donde me enteré el verano pasado de que había muchas posibilidades de que hiciera la pretemporada con el primer equipo.
—¿Estaba en la piscina?
—Sí, sí. Estaba en la piscina y no me lo creía. Venía del Juvenil, no había pasado por el filial y cuando me lo dijeron me quedé un poco sorprendido. Hablé con mi representante, me lo confirmaron y, mira, al final todo salió bien.
—Ya lo creo que salió tan bien... Menuda pretemporada se marcó.
—Fue la pretemporada que cualquiera sueña. Estaba muy contento. Las cosas me salieron muy bien y tengo unos recuerdos fantásticos. Recuerdo los partidos del Sporting en Lisboa y contra el Hamburgo... Marqué y fueron goles muy bonitos. Esos partidos se van a quedar ahí para siempre.
—El premio fue empezar de titular en el primer partido de Liga...
—Sí, no me lo esperaba. Si te digo la verdad, aquel día estaba muy nervioso. No me esperaba ser titular. Pensé que la pretemporada era como un premio y que se iba a quedar ahí... pero el míster me dio esa confianza y yo la verdad es que no pude devolvérsela. No fui yo en el campo. Lo noté dentro y se notó también desde fuera.
—Luego Emery le hizo desaparecer y su presencia en el equipo ya fue intermitente. Desde mi punto de vista, no parecía la mejor decisión...
—Bueno... luego jugué también partidos. Intenté hacerlo lo mejor posible. Mira, tengo buen recuerdo del partido contra el Levante en la Copa. Me encontré muy bien. Al final, el balance de la temporada fue muy positivo. Porque alcanzar todo esto con sólo 19 años es para estar contento. Emery me dio la posibilidad de debutar en Primera con el Valencia, jugué en la Europa League... Tengo que estar agradecido y le deseo suerte en su nuevo proyecto. Creo que tiene potencial para hacer grandes cosas allí.
—¿Se había imaginado un vestuario del primer equipo del Valencia como el que encontró?
—Cuando eres pequeñito ves a los futbolistas como personas diferentes, pero luego entras, los conoces y te das cuenta de que son personas normales, como cualquiera. Hay humildad. Son iguales que tú y que yo y eso me ha ayudado mucho. Me han tratado muy bien como canterano y eso se agradece.
—La afición le adora. Se nota.
—(Asiente) Lo notaba cuando salía a calentar, en la calle, el cariño de la gente es muy bonito. Ojalá pueda agradecérselo en el campo.
—Todo este sueño lo ha vivido al lado de Paco Alcácer.
—Eso lo ha hecho todo más bonito. Llevo jugando con él desde infantiles, es más que un compañero. Me alegro mucho por él y deseo que le vaya bien. Ojalá sigamos juntos en el Valencia, pero es decisión del míster. Empezó mal el año a nivel personal con la pérdida de su padre. Fue una pena. Yo también lo conocía y me llegó mucho, pero Paco ha sabido rehacerse y todos le hemos ayudado. Ahí es cuando tenía que demostrar que era su amigo.
—El futuro en el banquillo ahora se llama Mauricio Pellegrino.
—Sí y me alegro mucho. Lo tuve en el Cadete de primer año, me trató muy bien. Era muy amable, muy serio, muy disciplinado y aprendimos mucho con él.
—¿Qué es lo que más le llamó la atención del ´Flaco´?
—Que era serio y disciplinado y lo ordenado que era en cuestiones tácticas. Fuimos campeones de Liga. Hicimos un buen trabajo.
—¿Recuerda cómo jugaban?
—Con línea de cuatro atrás, 4-2-3-1, 4-4-2, pero a veces también 4-3-3. No recuerdo bien. ¡Hace tanto!
—¿Qué pensó cuando se enteró de que iba a ser el entrenador?
—Me alegré mucho porque podré verlo otra vez. Él ya me conoce y es algo que tengo positivo. También a Paco. Coincidimos los dos.
—Quiere verle y que sea Juan Bernat quien se gane un hueco en el primer equipo. ¿Qué le parece?
—Sí, bueno, eso es lo que voy a intentar hacer. Voy a intentar ir a tope en pretemporada, como hice el verano pasado. Quiero hacerlo lo mejor posible y demostrarle que puedo tener un sitio en este equipo. Es un reto complicado, pero es un sueño que tengo al alcance y por el que voy a luchar para que se haga realidad. Yo voy a darlo todo por mi parte este verano para convencerle.
—¿Qué le parecería una cesión a un Primera? El Rayo Vallecano es el que más interés tiene.
—Sí, se ha hablado. Si es lo mejor para el club y para mí... El club es el que decidirá. Eso ya se verá, pero yo no pienso ahora en eso. Sé que hay equipos por lo que leo en la prensa y es bonito que equipos de Primera piensen en ti, pero lo único que me preocupa ahora es hacerlo lo mejor posible en pretemporada.
—El Valencia ha fichado un interior izquierdo, Andrés Guardado. Competencia de la buena...
—Sí, ahí se complica un poco más la situación, pero esto es el Valencia y sé que tengo que competir con todos los que juegan en mi posición. Es lo normal. Está Guardado, está Piatti, pero yo voy a competir por hacerme un sitio.
—¿Y Jonathan Viera y Joao Pereira? ¿Qué le parecen?
—A Jonathan no le he visto jugar, pero me han hablado muy bien de él. A Joao Pereira sí que le conozco. Jugué con él en el amistoso contra el Sporting de Lisboa. Él me cubría. Es un gran jugador. Es internacional con la selección.
—Pero le reventó con un gol...
—(Ríe) ¡Me reventó él a mí que le hice un autopase y me hizo una obstrucción que me quedé allí KO!
—Parece que se marcha Jordi Alba, Aduriz, puede que Topal, Tino...
—Son grandes compañeros, pero ahí en temas deportivos no me voy a meter. Esas decisiones las tiene que tomar el club. Yo sólo, a jugar...
http://www.superdeporte.es/valencia/2012/06/21/quiero-convencer-pellegrino-verano/165163.html
