HÉCTOR GÓMEZ. HOY Las responsabilidades y el poder, las decisiones y quién las toma marcan el tablero de juego en el que se decidirá cuál va a ser el Valencia CF de los próximos años
VALENCIA.
El panorama social del Valencia CF dio un vuelco importante el pasado viernes con la dimisión de Manuel Llorente como presidente del club. Ahora mismo, el futuro del club pasa por las manos de muchos y debe empezar a decidirse en diferentes despachos.
El panorama social del Valencia CF dio un vuelco importante el pasado viernes con la dimisión de Manuel Llorente como presidente del club. Ahora mismo, el futuro del club pasa por las manos de muchos y debe empezar a decidirse en diferentes despachos.
1.Consejo de Administración VCF: Se reunirá en las próximas horas con la intención de convocar una junta general extraordinaria de acccionistas, en la que se nombre al nuevo consejo de adminstración y al nuevo presidente del Valencia CF.
De momento Fernando Giner es el que ha ejercido como presidente en funciones, y habrá que ver que decide el consejo en funciones hasta que haya un nuevo presidente del club.
Es el actual consejo de administración valencianista, que anunció su dimisión el pasado viernes, el que tiene que dar el primer paso para la transición. Está previsto que en las próximas horas, Manuel Llorente, en nombre del consejo, se reuna con Federico Varona, presidente de la Fundación, para darle a conocer la fecha de la junta general extraordinaria de accionistas una vez haya sido fijada por el consejo saliente.
2. Nuevo Patronato de la Fundación VCF: Desde antes de ser nombrados oficialmente ya preparaban un proyecto social, deportivo y económico para el Valencia CF.
Contemplaban las dos alternativas: trabajar de la mano de Manuel Llorente, única y exclusivamente, sin el consejo de administración, o por el contrario trabajar sin Llorente, como así ha ocurrido.
Están a la espera de noticias por parte del ya expresidente valencianista para conocer los tiempos. Ellos trabajan a destajo, muchas han sido las reuniones que han mantenido en los últimos veinte días, para preparar su aterrizaje en el club. Para ello, y como ya informaba este periódico ayer, desde el pasado viernes el nuevo patronato ha empezado a tantear a las personas que quieren colocar en el consejo de administración del club.
Amadeo Salvo es la persona con más números para ser el presidente del club si el patronato tiene total independencia para elegirlo y la Generalitat sigue con la idea de no vender el Valencia. El director general de Power Electronics, tiene clara su idea para gobernar el club, y pasa por aumentar de manera importante los ingresos atípicos de la entidad.
Salvo sería un presidente con papel institucional y ejecutivo, pero apoyado por un importante grupo de técnicos en economía, que se encargarían de llevar las cuentas del club y el apartado financiero.
Según ha podido saber PlazaDeportiva.com, Salvo lleva semanas trabajando en su proyecto e incluso se ha reunido con varios exjugadores, de la plantilla del doblete, para sumarlos a su futuro equipo de trabajo.
Por su parte, el sector económico del nuevo patronato, que encabeza Aurelio Martínez junto con Varona, ya prepara la estrategia para renegociar con Bankia los 81 millones que le debe la Fundación VCF a la entidad bancaria.
Según fuentes de ese nuevo patronato, la negociación será con el único aval de un proyecto solvente. Es decir, no tendrán el aval de la Generalitat Valenciana a no ser que el juez atienda el recurso presentado por el banco la semana pasada y que obligaría al Gobierno valenciano a reponer dicho aval.
3. Generalitat Valenciana: Nunca han dejado de estar detrás de todas las decisiones. José Císcar, reconoció el pasado viernes que el nuevo patronato lo había colocado el Gobierno valenciano.
Concedieron un aval a la Fundación, a través del Instituto Valenciano de Finanzas, para que comprara las acciones del club con un préstamo de Bankia de 81 millones de euros. Ese aval fue anulado por un juez, pero la semana pasada la entidad financiera lo recurrió, y lo hizo convencida de que ese aval se le repondrá. La Generalitat no se ha desmarcado en ningún momento del problema del Valencia CF y tampoco lo hará ahora.
En el mes de enero el Gobierno valenciano, cuando pagó 4,8 millones de intereses por el impago de la Fundación VCF, tuvo la firme intención de vender el club a aquel que le quitara el problema económico y asegurara una gestión responsable del Valencia CF.
Hoy, han colocado un patronato eminentemente técnico para asegurarse de que la Fundación VCF paga a Bankia, ya que corren el peligro de tener que hacer frente a ese pago si el juez acepta el recurso del banco. Además, hay quien dentro del Consell sigue siendo favorable a vender el club, siempre y cuando sea a alguien que acredite solvencia y seriedad.
Tienen un discurso público muy claro: negar cualquier vinculación con la toma de decisiones respecto al futuro del Valencia CF. Sin embargo, entre bambalinas siguen sin tener claro que hacer. Unos se niegan a vender el club por temor a equivocarse y vender a la persona equivocada, mientras otros abogan por quitarse de en medio y vender.
Ellos son los que deciden. De momento han optado por un patronato que controle el club y asegure el pago a Bankia. Eso sí, también designaron al director de Industria, Joaquín Ríos Casanova como la persona encargada de atender a los interesados en la compra del club. En las últimas semanas, Casanova ha dado largas a aquellos con los que mantenía conversaciones, pero nunca ha cerrado la puerta del todo. La venta del club es vista por muchos como la única solución posible.
4. Bankia: La entidad financiera lleva años apoyando al Valencia y a la Generalitat en este problema. El Valencia le debe 200 millones de euros. Sin embargo, el club de Mestalla no es su principal problema porque siempre ha cumplido con los pagos.
El Valencia ha pagado sólo en intereses alrededor de 70 millones de euros en lo últimos 4 años. El banco tiene un acuerdo de refinanciación con el club cerrado a falta de pequeños flecos, que no se ha pasado a papel por el problema de la Fundación VCF.
Ahí es donde reside el caballo de batalla. Bankia quiere tener detrás del préstamo de 81 millones de euros a una entidad solvente, ya que la Fundación VCF no lo es. Hasta hace un mes tenía el aval, que fue anulado por un juez, y que ahora lucha en los juzgados por recuperar.
El banco no tendría problemas en aceptar la venta del club. Eso sí, de los 81 millones de euros que le debe la Fundación VCF no está dispuesto a perdonar nada en un posible negociación con hipotéticos compradores. Fuentes de Bankia afirman con rotundidad que ganarán el recurso presentado y que la Generalitat tendrá que volver a avalar a la Fundación, con lo que tendrán asegurado el cobro de ese dinero.
La situación sería distina si se tratase de la deuda del club. Si llegara algún comprador solvente y estuviera dispuesto a hacer una oferta conjunta por la propiedad y la deuda de la entidad, el banco podría estar dispuesto, según fuentes financieras, a aceptar una quita de la cantidad que hoy le adeuda el Valencia CF.
En definitiva, el actual consejo de administración del Valencia y el nuevo patronato decidirán en los próximos días cuál es el futuro inmediato de la entidad, pero las decisiones importantes están en manos de la Generalitat valenciana, sobre todo, y de Bankia. El Gobierno valenciano debe decidir cual es la mejor manera para conseguir pagarle al banco los 300 millones que le deben entre Fundación VCF y Valencia CF. Hay dos opciones, que lo pague todo el Valencia CF o vender el club y que un comprador asuma la deuda.
De momento Bankia está al día y sigue sigue a la espera. Sin embargo, el escenario puede cambiar si llegado el 27 de agosto, la Fundación VCF no paga. Entonces el banco podrá alzar la voz, algo que también puede hacer ya, al tener enfrente a tres entidades que le adeudan enormes cantidades de dinero. Si hay compradores y presentan una oferta formal por el global de la deuda, Valencia CF más Fundación VCF, el banco la estudiará con mucha atención.