Confirmado Emery en el banquillo del Valencia, queda cerrar alguna incorporación más, poner nombres a las bajas y preparar la pretemporada con mucho criterio, porque la próxima campaña será dura, como todas, pero sobre todo porque Sevilla y Atlético van a reforzarse para volver a la zona ´Champions´. Es normal que la continuidad del entrenador, Emery o quien fuera, sea acogida con división de opiniones entre el valencianismo. Demasiados vaivenes ha generado el equipo, algunos propios y otros por cuenta ajena, pero ahora hay que arropar al técnico para que redoble su implicación. Por eso, mejorando los guarismos actuales (20 victorias, 9 derrotas y 8 empates), con una defensa renovada y regularidad en las alineaciones, se puede hacer un gran papel. Ese compromiso lo han adquirido tanto el preparador vasco, como el presidente Llorente, así que una vez puesto el marcador a cero entre ambos, existe una perfecta sintonía de cara al futuro.
Consecuente
Además la renovación se hace por segunda vez con total convencimiento en fondo y forma, tras el necesario periodo de reflexión, pero si hemos dado por muy bueno estar por segundo año consecutivo de forma directa en la Liga de Campeones y que la tercera plaza es una nota alta, era de cajón seguir contando con el mismo entrenador. Esta cuarta temporada de Emery en Mestalla es un reto para él, pues debe coronar el cuatrienio con alguna alegría. La base para la ilusión existe y será más posible si el valencianismo acude unido, pues se van a poner muchas facilidades —Grada Jove incluida— para que el estadio sea cada vez más animoso.
La guinda
Tras zanjar positivamente el asunto Emery, llega el tiempo de Gameiro, el ´Villa francés´ que está peleando la Secretaría Técnica del Valencia con solvencia contrastada. Como contábamos ayer, al menos no se escapará como Chicharito, el punta mexicano del United que pudo ser blanquinegro pero que el antecesor de Braulio Vázquez dejó escapar en una clara negligencia, visto cómo triunfa en el Manchester. La operación está en marcha y puede tener un final feliz. Así que la satisfacción puede multiplicarse
http://www.superdeporte.es/joan-carles-marti/2011/05/18/emery-sale-reforzado/128417.html