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Plan de entrenamiento

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Martes 24 de mayo | Entrenamiento a las 11h en Paterna. Primeros 15 mins abiertos a los mmcc. Miércoles 25 de mayo | Entrenamiento a las 11h en Paterna. Primeros 15 mins abiertos a los mmcc. Jueves 26 de mayo | Entrenamiento a las 11h en Paterna. Primeros 15 mins abiertos a los mmcc.

ORGULLO

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martes, 14 de febrero de 2012

Una roca en el reestreno europeo

Una roca en el reestreno europeo

A principio de temporada, Tony Pulis decidió echar el balón a tierra. Dirigía a un equipo serio, que había conseguido meterse en Europa después de llegar a la final de la FA Cup (cayó ante el Manchester City) y cuyo principal referente era el larguirucho Peter Crouch, 44 veces internacional, otrora delantero de Liverpool y Tottenham. Pulis suma seis campañas como técnico del Stoke City y apostó por el buen fútbol para intentar codearse con los siete u ocho mejores equipos de la Premier, soñando con meterse de lleno por los puestos europeos.
Cotas altas para Pulis, que pronto renunció a perseguir las victorias raseando el esférico. Volvió al más puro estilo inglés para mantener el paso en la Liga. Desde entonces, el Stoke escapa a pocos de los tópicos que salpican a los equipos británicos. La intensidad y fortaleza física son las bases sobre las que se asienta el día a día del conjunto del Britannia Stadium. Ahora, justo cuando recibe al Valencia en la Europa League, atraviesa la peor racha de la temporada. Los de Pulis suman cinco jornadas sin ganar (aunque consiguieron un meritorio empate ante el Chelsea) desde que batieran a domicilio al Blackburn Rovers del valenciano Rubén Rochina.
Unai Emery ha preparado a conciencia a sus hombres. Sirva como prueba el pragmático pero acertado análisis que ayer realizó Ángel Dealbert en sala de prensa: «Nada más terminar el encuentro ante el Sporting ya hablábamos del partido contra el Stoke City. Los que seguimos el fútbol sabemos cómo juegan, son muy poderosos a balón parado y muy fuertes en casa». El castellonense, no obstante, asumió el papel de claro favorito casi sin quererlo: «Nuestra intención es ir al estadio del Stoke y ganar. Tenemos mucha ilusión por que el equipo quiere llegar lo más lejos posible en esta competición. Hay ganas de sentenciar la eliminatoria allí».
El Britannia Stadium no podría albergar la final de la Copa del Rey por aquello del aforo, pero los casi 30.000 asientos de los que disponen estarán bien cubiertos el jueves ante el Valencia. Ya se ha colgado el no hay billetes en un estadio que, como es habitual es las Islas Británicas, registra una gran entrada domingo tras domingo. Este año, los de Pulis no han conseguido hacer de su estadio precisamente un fortín. Suma cuatro victorias, cuatro empates y cuatro derrotas como local, ha sumado quince goles a favor y tiene catorce en contra. En general, el Stoke tiene un problema de cara a puerta: sólo el Wigan -colista- suma menos goles que el conjunto de Pulis en la Premier League.
De los 24 tantos anotados, seis llevan la firma de su estrella Peter Crouch. El 'espárrago' escenifica como nadie el terror aéreo que producen los rivales ingleses. Sus dos metros no impiden que sepa jugar el balón con los pies, aunque negar que su mejor virtud es el remate de cabeza es ignorar la evidencia. Se perfila como compañero suyo Cameron Jerome, otro portento físico al que el Stoke fue a buscar al Birminghan por 4 millones de libras. Pulis suele alternar a Jerome con Walters (segundo máximo goleador del Stoke en Premier) o Jones, internacional por Trinidad y Tobago. Todos los atacantes superan el 1,85 de altura.
La prueba de fuego corresponde a Rami y Víctor Ruiz, previsible pareja de centrales del Valencia para el jueves. El perfil de sus rivales les obliga a mantener los noventa minutos la alerta en las jugadas de estrategia. En este sentido, el Stoke City no es muy diferente al Bayer Leverkusen y Osasuna, dos equipos que viven en mundos diferentes pero que consiguieron complicar la vida a los blanquinegros hasta derrotarles.
No sólo de gigantes viven en la delantera. Su guardameta titular, Sorensen, alcanza el 1,95. Sobrio, seguro y experimentado, ha llegado al centenar de partidos con Dinamarca y es un fijo para disputar la Eurocopa. Hutt y Shawcroos son sus fieles guardianes. El primero, alemán, llegó al Stoke en 2009 y desde entonces es insustituible. La pasada temporada consiguió seis goles gracias a su fortaleza aérea. El segundo, británico, posee el físico del madridista Pepe, pero no su velocidad. Es el principal defecto de los dos centrales del conjunto de Pulis: son lentos y se les puede ganar la espalda con facilidad.
Wilson (incansable y con proyección ofensiva) y Wilkinson (de los peores del equipo con el balón en los pies) son dueños de los laterales de un Stoke que tiene en Rory Delap a su principal escaparate fuera de las islas. Sus saques de banda recorrieron el mundo la pasada temporada. El irlandés aprovecha sus dotes para la jabalina (especialidad que practicó de joven) para impulsar el balón a casi 40 metros de distancia. Sus mini-córners dieron al Stoke siete goles sólo en 2010: cinco en FA Cup y dos en la Premier. Veterano de guerra (35 años) sus piernas no acompañan lo que quisieran sus saques de banda.
El peso del equipo lo lleva el irlandés Glenn Whelan, de 27 años. Es indiscutible para Pulis desde que llegara procedente del Sheffield Wednesday hace ya cuatro temporadas. Su acompañante en el centro del campo es de momento una incógnita, aunque Wilson Palacios apunta a titular ante el Valencia. El hondureño llegó a la Premier en 2008 y ha dividido su estancia en tres equipos: Wigan, Tottenham y Stoke City. No ha conseguido en el conjunto del Britannia Stadium ser el que enamoró a la liga inglesa hace un par de temporadas, pero es un mediocentro incansable que siempre aporta cuando le ha tocado jugar. Además, tiene gol. Eddington -grandes virtudes desde el extremo- y Jermaine Pennant (exjugador del Zaragoza) se disputan la banda izquierda.
El Stoke es todo eso, una roca en el aspecto físico que afronta ante el Valencia uno de los duelos más relevantes de su historia. Eliminó al Hajduk Split y Thun para meterse en la fase de grupos de la Europa League -dejó fuera al Dinamo de Kiev y Maccabi de Tel Aviv y sólo le superó el Besiktas- y ahora acude a la cita con los blanquinegros con la piel de cordero pero sin nada que perder. El primer asalto, ante su público, es su mejor oportunidad para poner en entredicho la teórica superioridad del Valencia. Y luego, el 23 de febrero a las 19 horas, llegará Mestalla...
http://valenciacf.lasprovincias.es/noticias/2012-02-14/roca-reestreno-europeo-20120214.html

Mestalla vuelve a bostezar

Dsde los tiempos de Cúper, que Mestalla no bostezaba tanto. Aquel técnico al que algunos aún siguen reverenciando y anteponiéndole el tratamiento de don -don Héctor, le llaman, como si fuera una eminencia científica del fútbol- hizo del campo valencianista el territorio del tedio. El domingo, el personal volvió a cabecear, y no echó una siestecilla porque hacía un frío que pelaba, pero quienes prefirieron instalarse ante el televisor, a mitad de partido ya estaban más allá que aquí. El Valencia no tuvo ninguna chispa y el Sporting de Gijón, sin ese impulso que irradiaba Manolo Preciado, parece un niño huérfano de padre y madre. Es un equipo triste y compungido. Así que ya el personal se estaba marchando en busca de calor reparador del hogar, cuando apareció Jonas y maquilló el partido. De manera que el resultado final dará por bueno un encuentro que fue un peñazo. Como titulaba ayer este periódico, los goles tienen un efecto balsámico, pero no sirven para atajar los males de fondo. El Valencia no acaba de carburar y esta victoria coyuntural frente al visitante más flojo que ha pasado por aquí en muchos años, posee efectos paliativos pero no curativos. Habrá que ver al equipo ante envites de mayor enjundia como los que le aguardan de inmediato. 

Casualidades. La Liga se va decantando. El Madrid se muestra intratable y si alguien osa toserle, como ha ocurrido en las últimas jornadas, siempre hay un lance salvador que le rescata del atolladero. Esas casualidades arbitrales son accidentes del juego, por tanto, no caigamos en la vulgaridad de atribuirles mayor protagonismo. Simplemente, la concatenación de errores a su favor, es una fatalidad que desquicia a sus rivales, en el momento más oportuno. Hay cosas que no cambian nunca.



http://www.levante-emv.com/deportes/2012/02/14/mestalla-vuelve-bostezar/881222.html