Braulio Vázquez reconoce las apreturas económicas para hacer fichajes y confiesa que «hay jugadores que vuelven por la realidad del club y no por sus merecimientos» - El director deportivo y Rufete mantienen las primeras discrepancias
El Valencia que Miroslav Djukic soñó en entrenar en poco se parecerá al que finalmente dirigirá. Y no por sus peticiones, sino por el momento en el que aterriza en Mestalla. El encorsetado presupuesto impide cualquier dispendio y la dirección deportiva no entablará ninguna negociación si el club debe desembolsar más de seis millones de euros por un jugador. Cantidad que, hoy por hoy, se antoja todo un derroche para unas arcas bajo mínimos. Habrá que vender y cuadrar las cuentas para luego fichar. Así de simple. O complicado. Esta realidad es la que ha llevado a acercar a Mestalla a jugadores como Míchel Herrero o Paco Alcácer e intentar que recalen en Valencia futbolistas cedidos por otros clubes. «Hay jugadores que vuelven por la realidad del club, no por sus merecimientos», sorprendía ayer Braulio Vázquez en el programa Supermurciélago de LevanteTV y la 97,7 Radio. «Habrá que echarle imaginación», lanzaba. Ingenio que puede traducirse en la llegada de jugadores cedidos por parte de otros clubes o por fondos de inversión.
Por gusto deportivo, los dos nombres que en la actualidad figuran en las preferencias de la dirección deportiva son Giovani dos Santos „con el que hay un acuerdo con su abogado pero ninguna negociación con el Mallorca„ y el blaugrana Gerard Deulofeu.
AMPARO BARBETA
El director deportivo, que apuesta por ceder a canteranos como Portu a un equipo de Segunda para que maduren, desveló la posibilidad de que Carlos Delgado se convierta en el cuarto central del equipo. Delgado llegó a debutar con Pellegrino pero una pubalgia cortó su progresión. Esta temporada, todo apunta a que repetirá rol. De momento, tal como reconoció Vázquez, el central realizará la pretemporada con el primer equipo y será Djukic quién decidirá sobre su futuro.
Precisamente la elección de los canteranos que viajarán a Alemania se ha convertido en el primer pulso entre Vázquez, director deportivo, y Francisco Rufete, mánager general de la Ciudad Deportiva del Valencia. Una fricción que Vázquez no quiso reconocer públicamente en el Supermurciélago pero que el entorno de ambos reconocen. «Yo decido que jugadores hacen la pretemporada.
Yo tengo el conocimiento porque los he visto todo el año», sostenía Vázquez, visiblemente molesto con las formas empleadas por Rufete para deshacerse de Juan Sánchez y Paco López, dos de sus colaboradores. «Rufete viene con su gente», se limitó a repetir una y otra vez. Eso sí, respecto a su compromiso con López para que siguiera a frente del filial, el director deportivo reconoció públicamente que éste era real. «Hablé con Paco y le dije que continuaría, pero cuando llegó Rufete tomó una decisión diferente. La parcela del futbol base le corresponde a él», incidía.
Una de las pocas buenas noticias con las que se ha topado en estas semanas Braulio „así lo afirmó tras afirmar que «era tal la situación de inestabilidad que no sabias hacia dónde tirar»„ fue con la concreción de la renovación de Jeremy Mathieu. Porque Vazquez, a pesar de la palabra del francés, temió por ello. «Temí por Mathieu», asentía. Y es que, el gallego desveló que, si él fuera director deportivo del Barcelona, lo habría fichado porque «no hay centrales zurdos y rápidos». Mathieu, desde el pasado viernes, ya ha ligado su futuro al Valencia y sólo una oferta de 20 millones de euros, su clausula, propiciaría su salida. Puertas que el Valencia cierra a Soldado.
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