La gran historia del Valencia CF

manteniendo el tipo

Columna de Luis furio.

Estamos viviendo situaciones de tanta incertidumbre que parece obligado disimular la desconfianza, aunque a lo mejor es necesario hacerlo para no tener que visitar al cardiólogo día sí día también. Pero hay cuestiones de futuro que preocupan si se pretende un Valencia que no baje un solo peldaño.

Horas después de confirmarse el traspaso de Villa al Barça, Manuel Llorente puso las cartas boca arriba. El presidente recordó que en la temporada pasada el club perdió 78 millones de euros y al mismo tiempo anunció que, como la venta se había realizado por 40 millones, persiste el déficit y, por lo tanto, dijo, no se puede descartar que se produzcan más salidas.

Fue el argumento de un panorama gris marengo. De un futuro que estaba anunciado desde que las ínfulas de un presidente que se fue, condujeron a la sociedad hasta la pendiente más acusada y peligrosa de su historia. Mala gestión, más deuda, más déficit, habas contadas. Con un ábaco es suficiente. No hace falta pasar por Económicas para saber que el Valencia está obligado a hacer caja ni tampoco es necesario un análisis de mercado para desvelar que Silva y Mata son los dos espadas que, junto al Guaje, han completado una terna de Champions.

La obligación de los dirigentes es sacar al club del infierno económico y al mismo tiempo deben de mantenerlo en la élite. La experiencia asegura que no existen jugadores imprescindibles, pero la veteranía también puntualiza que un bloque no se consigue así como así, y que es mucho más fácil despedazarlo con cuatro traspasos inadecuados que construirlo sólo con la llegada de buenos futbolistas.

El Valencia está obligado a mantener el tipo y a pesar de las buenas incorporaciones a bajo costo y de aceptar que se produzca alguna salida más, es conveniente que vaya con mucho tiento. No sea que acabemos escuchando la versión del himno de Haendel sólo en la fase de grupos. Para lo que cuesta alcanzar la clasificación, sería desalentador.

http://valenciacf.lasprovincias.es/noticias/2010-05-21/mantener-tipo-20100521.html

"Sin duda, la nota que me pongo es sobresaliente"

En los albores del verano llega el fin de curso y, con él, las notas, una tarea encomendada a los máximos responsables de área. Así, para hacer balance deportivo del Valencia 2009-10, es necesario escuchar las valoraciones del mandamás en esta parcela, Fernando Gómez, tan frontal y sincero como siempre, con argumentos para, entre otros muchos asuntos, justificar la continuidad de Emery o para explicar cómo se sobrevive a las órdenes de un jefe tan exigente como Manuel Llorente, también con voz y, sobre todo, voto en el apartado deportivo. Pero, para empezar, Fernando (otrora 'catedrático' sobre el césped) hace de profesor y pone su primera nota a Unai: "Todos tenemos defectos y virtudes, yo el primero y Unai, también. Hay algunas cosas que han llamado la atención, como la eliminación de la Copa y determinados cambios, pero como el fútbol es tan subjetivo y todos llevamos un entrenador dentro, debemos aislarnos de estas opiniones y decidir basándonos en la imparcialidad y la subjetividad. Poniendo en la balanza esas pequeñas cosas que no ha sabido manejar y sus virtudes como entrenador, se decanta claramente hacia unas sensaciones positivas. Unai le ha sacado el rendimiento a la plantilla que ésta tiene. Y le pondría un notable alto". Aunque la renovación de Unai acabó por sellarse hace sólo una semana, Fernando no quiere dudas: "Hace dos o tres meses que yo ya lo tenía claro. Pero hay cosas que las deciden los jefes y se contempló dejarlo todo para el final, y así se ha hecho con los casos de Unai, Baraja y César".

Hace una semana, Emery reclamaba en una entrevista concedida a este diario una "comunicación más fluida" con Fernando, a lo que éste responde: "Si piensa que debemos tenerla, no habrá problema, porque la habrá. Seguiremos hablando, debo tener una muy buena relación con el entrenador, al mismo tiempo que también con el presidente y el vicepresidente. Lo que sí puedo decir es que Unai ha estado al tanto de todos los movimientos de la secretaría técnica, aun sin saber si iba a ser el entrenador la temporada siguiente". En este punto, el director deportivo pone un ejemplo: "Para mí, el peor momento fue la eliminación europea ante el Atlético y, tres días después, la derrota en Mallorca. Hicimos un Europa League buena y deberíamos haber llegado más lejos. Y, quizá públicamente no, pero sí que he estado al lado de Unai, por ejemplo ahí".

En su última visita al Tridente de Brassa de Mar, Fernando se mostró tajante al afirmar que Llorente confiaba en él y que aún lo haría más. Meses después y finalizado el curso, el director deportivo no varía su discurso: "Pienso que es así. He traído a todos los jugadores que hemos propuesto desde la secretaría técnica. Hay diálogo y planificación. Muchas veces es difícil disimular lo que sientes y hay quien piensa que lo mejor es no disimularlo, es el caso de Manolo, que cuando las cosas no salen bien muestra su enfado. Y para equilibrar esto también estamos nosotros". Así se mantiene la relación Llorente-Fernando, basada en un principio: "Después de trabajar varios meses con él, puedo confirmar que Manolo es exigente y quiere que todos nos sintamos exigidos".

Proyecto.
Con la confianza de Llorente depositada sobre él y asegurada la continuidad de Emery, Fernando trabaja en la planificación del Valencia 2010-11. "Queremos hacer un equipo lo suficientemente competitivo como para mantener los objetivos que este club tiene. Por lo que, a priori, pienso que debemos pelear por lo mismo que se ha perseguido en los últimos diez años. Y de vez en cuando, este club debe hacer llegar un título a su vitrina, porque es algo que necesitamos. Además, en la Champions creo que el objetivo debe ser pasar la primera fase, con total seguridad, y después intentar llegar lo más lejos posible", subraya Fernando, quien ya ha cerrado las incorporaciones de Ricardo Costa, Feghouli y Topal, cuya llegada justifica: "Considerábamos que debíamos meter más físico en el equipo y reforzar la posición de mediocentro defensivo, algo que hemos podido hacer con Topal".

Marcha de Villa.
Fernando habla de 'su' nuevo Valencia, en el que no estará Villa, pero sí su sustituto, aunque no quiere dar su nombre: "Está aún por decidir quién vendrá. Sí que jugadores como Gignac, que incluso se ha interesado por nuestro club, es inaccesible por su precio, porque es difícil que paguemos 14 millones por un jugador. Hay cinco o seis alternativas, pero dependerá del dinero que haya disponible". Aquí, Fernando no esconde una posibilidad planteada en enero para abaratar el posible fichaje de Soldado, uno de los candidatos que más gusta: "Se habló con los agentes de Miku, que son los mismos que los de Soldado, por si podía haber una situación algo mínimamente más ventajosa con respecto a este delantero pero no se aceptó".

Habrá sustituto para Villa, algo distinto a si se marcha también Silva: "Si se le traspasa, creo que con los jugadores que tenemos ahí en la plantilla es suficiente. Aunque el Chori cometió un error hace poco por el que ha pagado, creo que, dentro de unos meses, será un jugador importante para el Valencia. Además, pienso que el entrenador valora la posibilidad de jugar con tres centrocampistas".

Fernando aborda con sinceridad la situación de otros nombres propios. El primero, Zigic: "Es un caso extraño porque suele hacer goles para la participación que tiene y pienso que no ha jugado los suficientes partidos de titular, sin que con esto analice la decisión del entrenador. Si se queda o si sale es algo que veremos, aunque si decide continuar, tendrá un sitio". El segundo, Marchena: "Le queda un año de contrato y estamos encantados de que siga aquí, no queremos que se vaya, aunque mi forma de pensar sigue siendo que todos los jugadores están en venta. Yo no le prometí ninguna mejora de su contrato". Y el tercero, y último, Mata: "Sé que su agente dice que le quedan dos años con el Valencia, pero en su contrato pone tres".

Nota para Fernando.
Además de valorar la temporada de Unai, el director deportivo no se esconde a la hora de ponerse nota a él mismo: "Yo me pondría un sobresaliente, sin ninguna duda y con humildad. La plantilla cuesta menos, el saldo económico es ampliamente positivo a mi favor, hay seis o siete futbolistas que han venido a coste cero y pueden ser titulares con el Valencia. Aunque está claro que he tenido el fallo de Carleto". Y en el capítulo de fallos, no quiere incluir a Moyá, aunque matiza: "Es un buen portero, merecedor de estar en el Valencia, pero después de ver su participación esta temporada, creo que podría haber venido este verano, habiendo gastado ese dinero en otra posición o, simplemente, sin haber invertido". Donde sí reconoce haber fallado es en el filial: "Es una mala noticia para el Valencia. Yo propuse destituir al entrenador pero se decidió esperar. Ahora, estoy de acuerdo con que Vicente Mir sea el nuevo técnico".

Fernando se prepara para su tercera temporada en un cargo que sigue gustándole como el primer día: "El fútbol no te deja parar, sólo tengo seis días de descanso seguidos al año, Valencia es una plaza con un seguimiento mediático impresionante, en algunos casos hay situaciones paradójicas alrededor, bastantes mentiras, acusaciones gratuitas sobre filtraciones, cuando a mí no me interesan. Pero es lo que lleva el cargo y no tengo problema; me importa que el trabajo salga bien". Esto a las puertas de la campaña en la que finaliza su contrato: "No voy a convertir mi caso en uno como el de Unai este año, estoy tranquilo y no voy a hablar nunca de esto. Eso sí, soy de la opinión de no comprometer al próximo director deportivo, se me hace cuesta arriba pensar en firmar a alguien sin saber si seguiré yo o si estará o no el mismo entrenador".

http://www.as.com/futbol/articulo/duda-nota-pongo-sobresaliente/dasftb/20100521dasdaiftb_15/Tes

Todo en venta

El Valencia está abierto a negociar la salida de cualquier jugador. Los traspasos permitirán, por una parte ingresar dinero, y por otra rebajar el coste de la plantilla. Y es que, Manuel Llorente está dispuesto a llevar a cabo su plan, sea cual sea el desgaste. La parcela económica le gana, momentáneamente, la partida a la deportiva. La hoja de ruta establece que, una vez traspasado David Villa e ingresados 40 millones, David Silva -tal como anunció Levante-EMV-, será el siguiente en abandonar el club.
El traspaso del canario al Real Madrid podría rondar los 32 millones de euros. Y es que, al margen de que el mediapunta fuera una petición de Pellegrini y agrade o no a Mourinho -al que sitúan como próximo técnico del Madrid-, se trataría de un fichaje presidencialista con el que Florentino Pérez vendría a demostrar su gusto por el trato exquisito del balón que practica el internacional canario. Todo un guiño.

Ahorrar sueldos altos
Al margen de lo que ocurra con Silva, el Valencia estudiaría con agrado las ofertas que reciba por Fernandes, Banega y Zigic. Futbolistas con una valoración superior a los diez millones. Y es que, el Valencia estaría dispuesto a deshacerse de cualquier jugador, con ficha alta, que facilitara la entrada de dinero y permitiera ahorrar su sueldo. Lo ideal, por tanto, sería deshacerse de Asier del Horno quien no cuenta para Emery y cobra 1,8 millones, pero su mercado es mínimo.
Así, todo indica, que están en la "pole" Miguel y Marchena. Al luso se le dejaría salir por poco más de dos millones, cantidad similar con la que se ha tasado a Carlos Marchena quien la próxima temporada quedará libre. Y es que, las deudas aprietan y se trata de jugadores con fichas altas. "No descartamos la salida de otros jugadores", anunció el presidente Manuel Llorente. "Tengo imputs por varios futbolistas pero nada en concreto", desveló el presidente tras incidir que "el objetivo primordial del consejo es dar viabilidad económica al club". Mientras se concretan otras operaciones, Manuel Llorente y Javier Gómez tratan de hacer encaje de bolillos para equilibrar un presupuesto que el año pasado tuvo 78 millones de pérdidas.

http://www.levante-emv.com/deportes/2010/05/21/venta/707278.html