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Martes 24 de mayo | Entrenamiento a las 11h en Paterna. Primeros 15 mins abiertos a los mmcc. Miércoles 25 de mayo | Entrenamiento a las 11h en Paterna. Primeros 15 mins abiertos a los mmcc. Jueves 26 de mayo | Entrenamiento a las 11h en Paterna. Primeros 15 mins abiertos a los mmcc.

ORGULLO

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lunes, 11 de octubre de 2010

Emery: ´Aún no estamos al cien por cien´

El técnico del Valencia habla de un nuevo ciclo con la recuperación de los viejos valores de trabajo y humildad para superar a los rivales y competir por los títulos, con nuevos futbolistas que han venido porque son los que encajan en esa idea, con una nueva química con la afición. El cóctel, al menos de momento, funciona, y con ello el Valencia ha despejado muchas dudas y genera una nueva ilusión.

Unai, díganos, ¿cómo se ve la vida y el fútbol desde el primer puesto?
—Sobre todo es importante disfrutar de los momentos. Hemos tenido un buen inicio, la afición está contenta, tiene ilusión con su equipo, puede mirar la clasificación y sentirse a gusto con su Valencia, pero nosotros todo ese disfrute lo hacemos desde el trabajo.
—¿Ser entrenador del Valencia y ser líder le deja tiempo para conectar con la calle y ser consciente de cómo está la afición con el equipo?
—Ahí lo importante es mantener el equilibrio. Cuando las cosas no van tan bien lógicamente la afición que tanto quiere a su equipo está más triste, ahora el equipo está bien, la gente está contenta. Queremos que siempre esté satisfecha y que el equipo le responda, pero sabemos que hay momentos en que no es así. Tener equilibrio en estos momentos es bueno para que cuando se dé alguna circunstancia negativa podamos también mantenerlo, pero está claro que nosotros trabajamos para la afición, trabajamos para el Valencia, para sus seguidores, para que vean a su equipo jugar bien sabiendo que jugar bien es el camino para ganar.
—¿Se disfruta más ese liderato quizá por lo inesperado?
—Está claro que ha habido salida de jugadores importantes, pero se han quedado futbolistas que quieren ser importantes y han venido jugadores que también quieren escribir un presente y un futuro en el Valencia. Los que se han ido ya lo han escrito, han ganado títulos y han sido muy representativos para la afición, pero todos los ciclos terminan, el fútbol vive constantemente en regeneración y el Valencia no escapa de ella. Eso y una crisis que el club también está acusando explica que este año ha habido que hacer una regeneración aún más acentuada, pero no por ello se ha dejado nunca de buscar un Valencia competitivo al máximo nivel. Siempre puede generar dudas no conocer el rendimiento de un equipo con futbolistas nuevos, pero trabajamos para despejar todas esas dudas y la mejor manera es con buenos resultados. Eso lo hemos conseguido, pero quizá es momento de decirle a la afición que ni en pretemporada sin resultados éramos tan malos ni ahora pensemos que somos los mejores. Si el Valencia es líder es por la máxima implicación de todos, incluso de la afición con su equipo, hay que seguir en esa línea de unión dentro y fuera, con esa química.
—Si tuviera que evaluar ahora al equipo, ¿qué nota le pondría?
—No me gusta dar notas ni hacer análisis prematuros, pero estoy muy contento no por los resultados, sino por cómo está trabajando la gente, por cómo estamos consiguiendo que en Valencia la gente esté contenta con el fútbol. De eso especialmente estoy satisfecho. Más que de los resultados, de cómo estamos trabajando y de la ilusión que la afición nos transmite.
—Le íbamos a cuestionar por su grado de satisfacción con algunos factores, pero ya se adelantó con los resultados y la implicación de los jugadores. ¿Y con la confección de la plantilla, por ejemplo?
—Estoy muy contento con el trabajo que se está realizando en el club en todos los sentidos, desde la confección de la plantilla con futbolistas que han tenido un seguimiento muy amplio en tiempo para poder estar aquí, la predisposición de los futbolistas para entender que si en algo tenemos que pasarnos es en dedicar tiempo en la preparación de todos los detalles para jugar un partido, en querer conseguir algo que a veces es fácil y otras difícil como es trabajar en familia, una familia grande que es el Valencia en la que todos trabajen en la misma dirección. En eso estoy especialmente satisfecho porque creo que se está consiguiendo hacer una gran familia en la que todas las partes, dentro y fuera, se sientan partícipes e involucrados.
—Villa decía el otro día que echa de menos el día a día del Valencia…
—Yo considero Paterna mi segunda casa, vivo cerca de Paterna porque voy mucho en cualquier momento del día, igual a las cinco de la tarde aparezco, a las ocho, un domingo que tenemos fiesta... Voy, estoy un rato allí trabajando, mirando cosas, me tomo un café en la cocina, estoy muy a gusto allí.
—¿Su grado de satisfacción con el juego del equipo?
—Estoy satisfecho con las bases con que funciona este equipo, pero mejora siempre hay. En el fútbol nunca encuentras la perfección, la buscas pero nunca la vas a encontrar. El equipo debe mejorar, está dando cosas muy buenas pero hay facetas en las que tiene que dar pasos porque si no mejora es posible que las derrotas puedan llegar.
—¿La clave de este Valencia líder se resume en la palabra actitud?
—Actitud es un acto de voluntad y la voluntad la podemos dar cualquiera, por eso muchas veces reprochamos tanto que alguien no tenga actitud. Que se puede entender, en todos los trabajos se puede tener un mal día, tenemos algún problema externo que nos influye, por eso tenemos siempre que liberar mucho al futbolista para que llegue muy limpio a los entrenamientos y sobre todo a los partidos, para que al menos el acto de voluntad sea siempre algo implícito, hay que educar ese hábito de que la actitud esté siempre presente.
—Y parece bastante evidente que este año la voluntad colectiva no es la del año pasado.
—Una cosa sí creo, desde mi llegada a Valencia la actitud ha ido siempre de menos a más, la actitud tiene que estar siempre y eso es lo que no se puede perdonar. Creo que siempre ha habido actitud, pero no siempre una actitud de cien por cien. Siempre hemos ido buscando, insistiendo... El año pasado había actitud, hace dos años también, otra cosa es que se pudiese mejorar. Incluso ahora hay que mejorar cosas de actitud, estamos más altos que nunca, pero no al cien por cien. El Valencia es una selección de futbolistas que cumplen con eso, al final la exigencia aquí para que consigamos cosas es muy alta, entonces la actitud tiene que ser muy alta, igual había futbolistas que a esta exigencia no llegaban y hay que buscar el cien por cien porque es la única manera de conseguir el triunfo individual y colectivo.
—Qué diferente es entrenar a Aduriz, Soldado, Topal, Tino que a Hildebrand, Helguera, Hugo Viana...
—El Valencia quizá en un momento perdió los valores que tenía, que para ganar al Madrid y al Barcelona tenía que trabajar con una actitud tremenda para suplir otras carencias. Ahora llevamos tres años en los que esa actitud ha ido de menos a más, esa actitud que estaba en un nivel 50 teníamos que elevarla al menos a un 70, igual ahora no estamos más que a un 70 ó 75 y la tenemos que seguir elevando, seguro, pero eso es algo que el Valencia siempre ha tenido, esa voluntad de trabajar aspectos del juego donde limar con los demás, es la única manera de suplir las desventajas que puedas tener con esos equipos.
—¿Se puede decir que el Valencia este año tiene una clase media-alta?
—Sobre todo tenemos un equipo, porque la selección que se hace a la hora de confeccionar una plantilla va en esa línea, futbolistas de calidad, futbolistas que quieran competir, que tengan compromiso, y todo eso tiene que asentar una base de actitud muy alta. Y en esa base hay futbolistas que han sido muy importantes y que quieren seguir siendo importantes, o que han perdido una posición y la quieren recuperar, que también lo hay.
—Albelda para el primer caso y Joaquín para el segundo…
—Por ejemplo, y esos están aquí porque están demostrando que siguen teniendo ganas. Además tenemos un ejemplo como el de César, con una edad incluso por encima del entrenador, y que trabaja, tiene ilusión como uno de veinte y es un ejemplo para todos en el vestuario, todo el que esté cerca de él tiene que aprender. Yo aprendo de César, porque tengo ese concepto, hay que aprender de todos.
—Sobre el campo, sin Banega falta juego por dentro, ¿es un problema?
—Pero lo puede dar Tino Costa, lo puede dar Manuel Fernandes, el año pasado Éver dio un nivel muy alto, pero el equipo ha funcionado sin él, eso es importante, y lo recuperamos ahora que vienen partidos en los que tenemos que estar todos ahí. Tenemos que volver a reforzar la idea de equipo porque no van a poder jugar siempre los mismos todos los partidos y el rendimiento ha de ser igual siempre.
—¿A Manuel Fernandes lo damos ya por rehabilitado?
—Manuel tiene unas cualidades muy buenas y la mente no ha estado en consonancia con sus cualidades físicas o futbolísticas. ¿Por qué? Porque él no estaba del todo asentado aquí, tenía en la cabeza que quizá era mejor salir, eso lo hemos trabajado y Manuel es el primero que ha puesto de su parte. Debe ser un ejemplo para toda la plantilla de que necesitamos el máximo de todos en las dos facetas, el máximo de mentalidad y de cualidades, de esa suma llegaremos a lo mejor que puede ser este VCF. En el momento en que empecemos a fallar, el equipo será peor.
—Cuando hay actitud colectiva es más fácil que todos se suban...
—Hay que hacer unas inercias de trabajo en las que los futbolistas sepan que hay unas exigencias y que a partir de ahí disfruten de su trabajo. Ser futbolista es una profesión y una vocación para disfrutarla, lógicamente con unas exigencias de trabajo que han de ser altas. Paterna con su gimnasio, sus instalaciones, su sala de vídeo, se ha construido para trabajar, y el Valencia va limando diferencias a los demás equipos con ese trabajo. Cuando ganó ligas trabajaron mucho y consiguieron acercarse. Cuando llegué ya sabía que es así como puede estar el Valencia arriba, luego hay que hacer una selección de futbolistas que también sean conscientes de ello. Y este año los jugadores saben que el que no esté en esa línea se queda rezagado, no va a tener sitio.
—¿Chori Domínguez?
—Chori tiene una predisposición muy buena, le ha costado adaptarse y coger su rol en el Valencia, que es un equipo en el que necesita trabajar mucho. Ahora mismo él está en esa línea, poniendo de su parte, trabajando horas incluso fuera del equipo para recuperar parte de lo que perdió en la pretemporada. Tiene que superarse, es un jugador importante con unas cualidades interesantes para este Valencia.
—¿Las oportunidades que le ha dado van en esa línea?
—Conforme va entrando se acercará más a su rendimiento, no puedo quitarlo si juega un partido mal porque entonces no vamos a poder recuperar nunca el mejor nivel del Chori. Hay que insistir, ayudarle, pero para que él ayude.
—Además hay una explicación táctica: sólo hay dos delanteros.
—Tenemos a Chori y a Mata que deben ayudar a los delanteros, son los siguientes puntas del equipo tras Soldado y Aduriz. Con otras características, no tan específicos, pero son los que tienen que aportarnos el gol y esa situación intermedia para llegar a la portería.
—Emery ha hecho más de un guiño últimamente a la cantera...
—El Valencia era un equipo de cantera que se pasó a cartera y tiene que volver de nuevo a cantera. Desde que llegué siempre hemos mirado, he visto partidos del filial y los sigo viendo. Hay una hornada de futbolistas que están llamados a ser importantes en el VCF.
—¿Es Isco el número uno para estar en el primer equipo?
—Bueno, tenemos primero unas realidades como Guaita, que ya está en el primer equipo y queremos que sea portero del Valencia durante mucho tiempo. Tenemos a Míchel, que ha salido cedido para seguir creciendo. Antes también ha estado Pablo y ahora los que tienen que dar el paso son Isco, Alcácer, Iván Rubio, Portu... Todos quisiéramos que llegaran pero al menos han de tener la oportunidad de estar ahí si se lo ganan. Isco entrenó con nosotros muy bien en pretemporada, está rindiendo a un buen nivel en el filial, esos son los pasos que hay que dar. Estoy convencido de que tendrá la oportunidad.
—¿En Copa con el Logroñés?
—No lo sé, la oportunidad la tendrá seguro, pero los momentos no están escritos. Aparecen.
—¿Guaita ha dado un paso atrás?
—Nosotros tenemos que tener tres porteros, contamos con Guaita, César y Moyà, ellos son los que tienen que defender la portería. Cada uno tendrá su momento, ahora tenemos un presente con un rendimiento muy alto de César, pero habrá un futuro en el que necesitaremos porteros porque César no va a jugar con cincuenta años. De aquí a diez años Moyà y Guaita pueden ser porteros del Valencia.
—¿Y no sería mejor con 30 partidos en primera?
—Pero hay algo importante, lo que el Valencia necesita. ¿Jugaría en otro sitio? Puede ser, pero no podemos caer en el error de dejarle marchar y que luego tengamos percances y echarle de menos, que esté defendiendo otra portería cuando aquí el Valencia le necesita. Es un tema que se habló mucho en pretemporada buscando lo mejor para el Valencia y para Guaita. Quizá todas las soluciones sean buenas, pero todas a la vez no puede ser.
—Guaita ha ido una vez convocado y Moyà el resto. ¿Decisión técnica?
—No, no, Guaita vino con una lesión de hombro, estuvo en pretemporada más tiempo parado infiltrándose y ahora ha tenido otro proceso en el que hemos tenido que pararle. Con él llevamos un proceso de retraso por su hombro.
—¿Y llegará para la Copa?
—El reto tanto de Guaita como de Moyà es que tienen que ser los porteros del Valencia cuando ya no esté César, pero eso está en sus manos y así se lo hemos dicho a ellos. Ahora que hay un rendimiento muy alto de César es cuando el reto es mayor para ellos, saber y aprender de César para estar preparados.
—Pero está aplazando la decisión al futuro indeterminado, ¿quién jugará ante el Logroñés? Esa es la decisión ahora...
—La decisión ahora es quién juega en Barcelona.
—Ya se lo decimos, jugará César.
—Yo quiero que cuando juegue César estemos todos encantados, si le toca jugar a Moyà que haga un gran partido y todos encantados. Y cuando juegue Guaita lo mismo.
—Pero eso es muy difícil...
—Lo sé, es difícil, pero yo transmito esa confianza y ese reto para los dos de que estén preparados para que la portería siga al mismo nivel pase lo que pase. Ambos deben sentirse satisfechos de que el Valencia cuenta con ellos y son necesarios.
—¿Qué valoración hace de los cuatro capitanes?
—Lo importante de la capitanía es que la ejecuten, que sean representativos de sus compañeros, que sean un ejemplo. Es importante el contenido, no el brazalete, sino lo que representa llevar ese brazalete.
—¿Y tiene más contenido ahora que la temporada pasada?
—Siempre ha tenido contenido. Yo siempre he sido partidario de que, sabiendo que es importante quién lleva el brazalete, todos se sientan importantes, todos sean un ejemplo para los compañeros, todos se sientan capitanes del equipo. Es un concepto, además, aplicable.
—Por último, explique lo del 4-3-3 de la pretemporada.
—En pretemporada no tuvimos ni a Chori ni a Mata, los dos que más claramente pueden jugar en el 4-2-3-1. Teníamos muchos pivotes, Topal, Albelda, Tino Costa, Éver y Manuel, y para que todos fueran cogiendo minutos y participando el 4-3-3 era el sistema más adecuado a los jugares que teníamos en ese momento. ¿Por qué no jugábamos con dos puntas? Si hacíamos dos partidos de 45 minutos y en el primero jugamos con dos puntas, en el segundo no quedaba ninguno.
—¿Entonces no veremos jugar al equipo con ese sistema?
—Ha habido momentos clave en mis dos temporadas en el Valencia en que, con ese sistema, el equipo ganó partidos en momentos muy importantes, en Getafe, con el Espanyol., Seguro que sí lo veremos.

http://www.superdeporte.es/valencia/2010/10/11/emery-cien-cien/107788.html

El mismo idioma para Llorente y el agente de Mata

En Dénia todavía siguen esperando la llamada del Valencia para preparar el acto en el que Mata enterrará un viejo litigio y pasará a formar parte, económicamente hablando, de la élite del club. La renovación contractual del internacional continúa siendo un tema que da para hablar, aunque conforme van pasando las fechas la estridencia de las declaraciones de unos y otros ha dado paso a un lenguaje mucho más dulce y cordial, lo que refleja a las claras la recta final en la que han entrado el presidente valencianista, Manuel Llorente, y el padre y agente del futbolista. La sensación es que está todo perfilado. El sábado, Llorente anunciaba que Mata no será el protagonista de esta semana mientras que el arranque de la que viene tiene de inmediato la cita de Champions en Glasgow. Llorente iba un poco más allá de lo habitual y anticipaba además que «al final se hará». Por parte de Mata, y aunque la consigna es hablar cuanto menos mejor, al menos se admite la «buena sintonía» que hay, aunque el retraso que lleva el presidente en solucionar esta cuestión es más que evidente.

http://valenciacf.lasprovincias.es/noticias/2010-10-11/mismo-idioma-para-llorente-20101011.html

El mismo idioma para Llorente y el agente de Mata

En Dénia todavía siguen esperando la llamada del Valencia para preparar el acto en el que Mata enterrará un viejo litigio y pasará a formar parte, económicamente hablando, de la élite del club. La renovación contractual del internacional continúa siendo un tema que da para hablar, aunque conforme van pasando las fechas la estridencia de las declaraciones de unos y otros ha dado paso a un lenguaje mucho más dulce y cordial, lo que refleja a las claras la recta final en la que han entrado el presidente valencianista, Manuel Llorente, y el padre y agente del futbolista. La sensación es que está todo perfilado. El sábado, Llorente anunciaba que Mata no será el protagonista de esta semana mientras que el arranque de la que viene tiene de inmediato la cita de Champions en Glasgow. Llorente iba un poco más allá de lo habitual y anticipaba además que «al final se hará». Por parte de Mata, y aunque la consigna es hablar cuanto menos mejor, al menos se admite la «buena sintonía» que hay, aunque el retraso que lleva el presidente en solucionar esta cuestión es más que evidente.