El futuro presidente del Valencia ve en el capitán la persona ideal para liderar la transición hacia el modelo de cantera
JUAN CARLOS VILLENA | VALENCIA..-
«Mi idea es acabar esta temporada y pensar en otras cosas. En un 90 ó 95% de posibilidades me marcharé». La frase la pronunció David Albelda el 1 de febrero, abriendo así la puerta de salida del equipo en el que ha jugado quince temporadas en Primera División. Un mes después, tras la eliminación frente al PSG en los octavos de final de la Champions, rubricó esas palabras declarando en París que «creía» que había sido su último partido europeo defendiendo la camiseta del Valencia. Una de las actuaciones que se plantea el nuevo consejo de administración del club, cuya hoja de ruta ya confecciona Amadeo Salvo como vicepresidente deportivo de la Fundación, es convencer al capitán para que renueve su contrato por una temporada. Eso sí, tal y como confirmaron varios de los patronos de nuevo cuño ayer a LAS PROVINCIAS, no se va a plantear una postura de fuerza o insistencia hacia el futbolista para evitar que se vea presionado a contestar sobre su futuro antes de la toma de posesión del nuevo equipo gestor, tras la junta del 4 de junio. Si hasta entonces Albelda confirma al club su decisión de abandonar la entidad, o se pronuncia en declaraciones públicas, ese objetivo se complicará.
Y para saber cuál será el definitivo discurso del capitán no habrá que esperar demasiado, ya que cuando se acerque el último partido en Mestalla, programado para el 28 o 29 de mayo frente al Granada, el futbolista deberá aclarar si se va a despedir de la afición o acepta ese ofrecimiento que se le pone sobre la mesa. En las últimas ocasiones en que Albelda ha respondido a alguna pregunta sobre su futuro no ha sido tan contundente como hace tres meses. «Mi mente está ahora en ver si metemos al equipo en Champions. Estoy centrado en terminar la Liga de la mejor manera», comentó el 24 de abril, en la presentación de su campus de verano en La Pobla Llarga.
El ofrecimiento de renovación del club, entendiéndose por tal al nuevo consejo que tomará posesión dentro de un mes, está basado en varios aspectos. El fundamental es que la entidad quiere que Albelda sea el jugador que lidere la transición en el vestuario, desde el actual proyecto a la implantación del nuevo modelo deportivo donde se volverá a dar una importancia capital a la cantera. La actual plantilla tan sólo cuenta con cuatro jugadores valencianos, el propio Albelda, Bernat, Soldado y Guaita. Los dos últimos, con contrato en vigor, volverán a ser objeto de deseo (el Barcelona no quita ojo al portero de Torrent) y el club deberá decidir, en función de si se ha clasificado o no para la Champions, si atiende las ofertas que llegan por su mejores jugadores.
Ni la Fundación ni el actual equipo gestor, presidido por Vicente Andreu pero donde Manuel Llorente sigue teniendo delegada la firma hasta que finalice el traspaso de poderes, prevén ofrecer la renovación al capitán hasta que acabe la temporada. La decisión final, por tanto, la tendrá que tomar Amadeo Salvo, que se perfila como nuevo presidente de la entidad tras la junta del 4 de junio.
Albelda terminará la temporada con 35 años, cumple los 36 el próximo 1 de septiembre, y debutó con la camiseta valencianista en Primera División, de la mano de Claudio Ranieri, el 15 de marzo de 1998 en La Romarada, donde el Valencia logró una victoria por 0-2. Aquel día, el centrocampista de La Pobla Llarga sustituyó a Adrian Ilie en el minuto 77 de partido.