Valdez reconoce que la victoria ante el Athletic supone "un golpe de energía para ganar confianza y tener tranquilidad"
AMPARO BARBETA VALENCIA
La sonrisa con la que los jugadores trabajaron ayer refleja el estado de ánimo con el que el Valencia afronta el partido europeo contra el Bate Borisov. Además de los tres puntos y el escalar en la tabla, la victoria sobre el Athletic ha servido para reanimar a un grupo que tenía la autoestima muy baja. "Necesitábamos la victoria como el comer", sostenía ayer Roberto Soldado, mientras Nelson Valdez reconocía que la victoria supone "un golpe de energía para ganar confianza y tener tranquilidad". "Necesitábamos una victoria así", suspiraba. El paraguayo, autor del gol de la victoria ante el Athletic, recordaba ayer lo que sintió al marcar: "Uff, fue un subidón. Todo cambió muy rápido. El gol de Tino, el mio. Cuando vi que el balón estaba dentro sentí una alegría tremenda. Recuerdo a todos los compañeros abrazándome, dándome besos y a uno de los argentinos que me decía 'Hijo de puta la has metido'" , bromeaba. "Es uno de esos goles que me costará olvidar", confiesa. Y es que ayer, Váldez se sentía importante.
Acompañado de un primo y sus dos hijos, el delantero se convirtió en el protagonista de la mañana. Los aficionados le agradecieron el gol -su primero en Liga-, Pellegrino le felicitó por el tanto y sus compañeros le correspondieron regalándole carantoñas y mimos durante el entrenamiento. Casualidad o no, el delantero vestía ayer una camiseta en la que se podía leer la palabra "winner! (ganador)".
"A cualquier futbolista le gusta jugar más y quien diga lo contrario miente. Como delantero busco marcar y, cuando esto ocurre y el gol sirve para ganar, me siento muy feliz" reconocía. Y si no juega, lo acepta. "Trato de hacer mi trabajo en el día a día y no poner nunca una mala cara. El técnico es quien decide y yo acepto", afirma. "Creo que me caracterizo por tratar de meter actitud en el equipo y de darle aire fresco. La afición me apoya y eso me gusta mucho. Desde que comienzo a calentar, la afición me apoya y yo trato de alegrarles, pero no siempre puedo", lamentaba tras reconocer que, el segundo gol de Aduriz (1-2), hizo jugar al equipo "a la desesperada" porque, entre los jugadores, se generaron "algunos nervios" porque se temía por la victoria. "Se sacó la garra e hicimos un gran sacrificio para remontar el partido. Con eso nos debemos quedar", afirma. Ahora se trata de trasladar el carácter mostrado en el tramo final del partido al encuentro contra el Bate Borisov. "Hay que ganar como sea y somos conscientes de ello. Queremos pasar de ronda y una victoria nos ayudaría. El Bate es la sorpresa del grupo y, si nos ganara, ya estaría prácticamente clasificado por lo que saldrá a muerte. Pero también nosotros nos jugamos mucho. Ahora tenemos energía positiva y esto nos puede ayudar volver de Bielorrusia con un resultado positivo", explicaba.
Bernat y Viera están bien
Juan Bernat y Jonathan Viera, que acabaron el partido contra el Athletic con molestias, trabajaron ayer con cierta normalidad. Cierto es que, para los titulares el entrenamiento fue muy liviano. El valenciano sufrió un pinchazo en el muslo-y por ello pidió el cambio- y el canario un "bocadillo" en la pierna izquierda tras un choque con Amorebieta. Los dos jugadores confían en superar el dolor y poder jugar mañana contra el Bate Borisov.
Juan Bernat y Jonathan Viera, que acabaron el partido contra el Athletic con molestias, trabajaron ayer con cierta normalidad. Cierto es que, para los titulares el entrenamiento fue muy liviano. El valenciano sufrió un pinchazo en el muslo-y por ello pidió el cambio- y el canario un "bocadillo" en la pierna izquierda tras un choque con Amorebieta. Los dos jugadores confían en superar el dolor y poder jugar mañana contra el Bate Borisov.