Reitera una y otra vez César, que de esto sabe mucho, que no hay debate en la portería del Valencia. Vamos, que si al final juega Guaita o si en cambio lo hace César, da lo mismo o lo mismo da. Pero no es así del todo y aunque lo fuera, la verdad es que de algo hay que hablar. Ya se sabe que además de ver ganar a su equipo, a los aficionados les encanta encontrar temas de debate con cierta miga. Y éste, por mucho que se empeñe César, lo tiene. Quizás tiene más trascendencia a medio y largo plazo que a corto, pero a nadie le escapa que en función de lo que decida Emery se puede marcar un punto de inflexión importante.
No se quiso mojar ayer el entrenador ni tampoco dio ninguna pista verbal de la que tirar. Guaita merece seguir porque en dos partidos no sólo no ha cometido ningún desliz para irse al banquillo sino que, además, se ha doctorado en escenarios de prestigio como el Bernabéu y Old Trafford. Mantener a Guaita en el once es una apuesta tan lógica como optar por César argumentando después, eso sí, que el veterano meta, hasta el momento de caer lesionado, era el que más confianza ha demostrado en todo el campeonato disputado. Haga lo que haga Unai, apuesta segura es saber que al entrenador le van a llegar tantos respaldos como palos. Es algo que el entrenador no va a poder evitar, pertenece por así decirlo a la idiosincrasia que suele desprender la grada de Mestalla.
Lo último por lo que se han decantado los internautas en LAS PROVINCIAS era por Guaita, alejando incluso a César hasta la tercera posibilidad, por detrás incluso del lesionado Moyà. Otra consulta realizada entre algunos peñistas ofrecía la opción de la alternancia. Para todos los gustos.
Al menos, y como cuestión que puede tranquilizar al técnico, importante es el dato que el rival que desfila esta noche por Mestalla va a ayudar en lo de no echar leña al fuego. Si alguien piensa a priori que el Osasuna complicará el partido a César o a Guaita, sólo hay que echar un vistazo a sus registros fuera de casa para pensar que juegue quien juegue, el portero del Valencia puede convertirse hoy en un espectador más del partido.
El Osasuna es, con diferencia, el visitante más inocentón de la Primera División. Un punto de 21 disputados es el bagaje que ha sido capaz de recoger el equipo que prepara el impulsivo Camacho. Los navarros sólo han salido vivos esta temporada de Riazor (0-0). El resto de partidos se cuentan por derrotas: un gol a favor y 12 en contra fuera del Reyno de Navarra. Ahí es nada. La cosa viene de lejos porque desde el 31 de enero todo son disgustos. Casi un año viajando para nada. La cifra es significativa cada vez que cumple de visitante: un empate de los últimos 45 puntos en juego.
Al Valencia le interesan, como siempre, los tres puntos y esta vez porque de ganar se quedaría con la recompensa añadida de tener la Champions a uno. No es plan de ir dejando escapar oportunidades antes de despedir un año que se cerrará con buen sabor. Estar entre los dieciséis mejores equipos de Europa es algo reconfortable, sobre todo para Emery para quien da la impresión de que no hay tregua posible. Si ya de por sí es difícil evitar que haya alguna salida de madre dentro del grupo, peor lo tiene cuando hay un jugador que se deja cautivar por la noche de Valencia, o cuando otro llega tarde, o cuando los hay que no se enteran ni de cuándo tienen que ir a trabajar. Tratando de hacer bien las cosas, y Emery es bastante meticuloso -a veces excesivo-, siempre hay fugas.
Para hacer la lista esta vez el técnico ha tirado por el camino más fácil: todos. Todos los que están sanos, porque Manuel Fernándes -descartado- está pero con las maletas hechas. Entra David Navarro tras dos partidos en los que el técnico prefirió ignorarlo; vuelve a la titularidad Banega en compañía de Maduro para el centro del campo porque no hay otro remedio (el partido del argentino en Manchester merecería dejarlo en el banquillo un tiempo), y todo apunta a que Joaquín volverá a adelantar a Pablo. Otro de los puntos de interés se lo llevará el elegido para el lateral izquierdo. Si fuera por los méritos hechos por ambos en Old Trafford, Emery jugaría hoy sin lateral. El técnico tiene hoy tres bajas por lesión (Chori, Moyà y Topal) y dos por sanción (Albelda y Tino). José Antonio Camacho, por su parte, tres (Camuñas, Damiá y Rúper).
http://valenciacf.lasprovincias.es/noticias/2010-12-13/portero-titular-valencia-20101213.html
