Si el papelón de Juan Antonio Pizzi para sacar al Valencia a flote es de aupa, no le quiero ni contar el de Vicente Douwens, el fichaje estrella para la dirección de marketing del Valencia que pronto cumplirá 100 días en el cargo.
Un galáctico del marketing deportivo fichado a golpe de talonario por Amadeo Salvo para recoger dinero de donde no lo había hasta su llegada, los llamados 'ingresos atípicos'.
De su tarea conocemos que ha viajado por el mundo reuniéndose con todo tipo de empresas para 'colocarles' el naming y el terciario del nuevo estadio. Un viaje que al final se ha convertido en travesía por el desierto porque quien manda de verdad ha decidido poner a la venta el club.
También conocemos que cerró el pasado mes un contrato de colaboración con una importante empresa china. Para ser más concretos, el acuerdo consiste en que los chinos ponen televisores nuevos en Mestalla y Paterna a cambio de publicidad.
Los objetivos de triplicar los ingresos comerciales, mejorar la imagen de la marca Valencia CF, diseñar un completo plan de marketing... Todas las buenas intenciones plasmadas en papel no podrán cumplirse si la 'pelotita' no entra.
Y muchísimo menos cuando a nivel institucional, el Valencia es una olla express. ¿Qué empresa apostaría por invertir en un club inmerso en una guerra civil en la que no se acaban las balas¿.
El próximo verano expiran los dos contratos de patrocinio más importantes que tiene el club de Mestalla en la actualidad, los de Jinko Solar y MSC Cruceros que reportan a la entidad casi 4 millones de euros. Acuerdos que se firmaron con el equipo en Champions, una época donde quedar tercero era lo habitual. Veremos como lidia Douwens esta situación si el equipo no entra en Europa League (la Champions a día de hoy es una utopía) en lo que será una de sus primeras pruebas de fuego.
Dos sponsors que por cierto, reportan una cantidad entre los dos muy similar a la que aporta la multinacional Intel al FC Barcelona por aparecer ¡en el interior de la camiseta¡
20 millones de dolares ni más ni menos durante las 5 temporadas que ha firmado la marca tecnológica con los culés. Una cifra astronómica para la mayoría de equipos de Primera y por la que pondrían a disposición del patrocinador hasta la mismisima frente si fuese necesario de jugadores, cuerpo técnico y directiva para estampar el logo.
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