C. V. | VALENCIA..-
El pasado 5 de agosto, en plena gira norteamericana, el Valencia se citó en Nueva York con el gigante del marketing Wasserman. Sin embargo, Amadeo Salvo, el patrono Salvador Belda y el consejero Manuel Peris aprovecharon para reunirse por espacio de una hora con los responsables de una empresa especializada en la gestión de estadios cuyo nombre quedó oculto tras un riguro documento de confidencialidad. LAS PROVINCIAS desveló aquel encuentro y ayer la Cadena Ser puso nombre a la empresa en cuestión. Se trata de AEG.
Esta poderosa firma se dedica a gestionar espacios deportivos. Es decir, en teoría no sería la que podría poner el dinero para acabar la obra del estadio, sino para la explotación posterior del mismo.
Es para el primer aspecto donde se pone cuesta arriba la búsqueda del inversor y lo que al Valencia verdaderamente le motiva. Si nadie aporta el dinero, el proyecto sufre un parón considerable. De hecho, las previsiones de este consejo empiezan a apagarse porque ya parece claro que este no va a ser el año en que vuelvan los obreros a entrar al nuevo Mestalla. Se quería tener antes de Navidad encima de la mesa un ramillete de propuestas y eso es algo que ya se ha descartado.
Es verdad que Amadeo Salvo, junto con Aurelio Martínez, ha mantenido diversas tomas de contacto con grandes empresas que podrían estar interesadas (Arena e IMG) y que incluso han venido a ver en qué momento se encuentra el estado de las obras, pero al tratarse de una inversión tan importante -pese a la rebaja se sitúa en torno a los 90 millones de euros- no se puede hacer de la noche a la mañana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario