Posibles escenarios ante el impago de la Fundación VCF a Bankia

H. GÓMEZ. HOY Bankia puede ejecutar el aval y cobrar de la caja del Gobierno valenciano. Puede aceptar las acciones como pago o puede alcanzar un acuerdo con el Gobierno para no ejecutar, opción que más fuerza toma

VALENCIA.

Se veía venir y llegó. Llegó el momento en que la Fundación VCF reconoció que no tiene ninguna solución para hacer frente al pago de los intereses del crédito que recibió recibió de 75 millones de euros en 2009 y se amplió en 2010 a 81 millones.

Su presidente Társilo Piles reconoció este viernes tras la reunión de la comisión económica creada para tratar de encontrar una solución al pago de los intereses. "Todo lo que podíamos haber mirado anteriormente es imposible porque no vamos a hacer nada que incurra en la ilegalidad o en asistencia financiera. Lo tenemos muy difícil y si la semana que viene no hay soluciones no podremos hacer frente a los intereses. Siempre pienso que mientras estemos vivos hay posibles situaciones. Ahora mismo no le vemos salida y que no podemos cumplir".

Lo que hizo el presidente de la Fundación VCF no fue otra cosa que avisar que no podrán pagar los 4.8 millones que le deben a Bankia desde el pasado mes de agosto. Ante ese impago se abren una serie de posibles escenarios para la Fundación VCF (prestatario), para el Instituto Valenciano de Finanzas (avalista) y para Bankia (prestamista).

1- Bankia decida ejecutar el aval que tiene del Instituto Valenciano de Finanzas, que es el Gobierno valenciano.

En este caso Bankia se cobraría los 81millones de euros de la caja pública y convertiría a la Generalitat Valenciana en la máxima accionista y por ende en la dueña del Valencia CF. En ese caso las autoridades no podrían escurrir el bulto y deberían colocar al frente del club de Mestalla a personas de su confianza para tratar de recuperar ese dinero.

Si llegara este punto, en el que la Generalitat pasara a ser la máxima accionista del Valencia habría un serio problema, ya que la Liga de Fútbol Profesional impide que una misma entidad sea la máxima accionista de dos clubes profesionales y el Gobierno valenciano ya lo es del Elche CF. La solución a ese problema pasaría porque uno de los dos clubes pasase a ser propiedad de otra persona o entidad mediante una venta o cesión de los títulos.

2- Bankia decida aceptar las acciones a cambio de cancelar la deuda. En ese caso, totalmente descartado por el banco en estos momentos, Bankia se convertiría en la máxima accionista del club a la par que en el principal acreedor de la entidad de Mestalla.

Sería una situación totalmente anómala ya que el banco sería el dueño de una sociedad que le debe 200 millones de euros.

3- La Generalitat y Bankia alcancen un acuerdo, ya han mantenido conversaciones, para que la entidad bancaria no ejecute el aval y que el Gobierno valenciano gane tiempo para encontrarle un comprador a esas acciones.

En ese caso, la Fundación dejaría de ser la poseedora de las acciones y por tanto de ser el máximo accionista del Valencia CF. En ese caso sería la Generalitat la máxima accionista, con un único objetivo: encontrar un comprador de las acciones que les liberará de la pesada carga que supondría tener que asumir el pago de 81 millones para comprar las acciones del Valencia CF.

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