Victoria. Tres puntos, aunque otra vez demasiados caros, porque Emery pierde a Alexis y Albelda para el domingo en el Vicente Calderón. Más difícil todavía.
No le hizo falta jugar bien al fútbol para desarmar al Getafe, al que le superó por su contundente pegada, retratada otra vez en la figura del incombustible Villa. Después le tocó sufrir en la segunda parte, cuando el árbitro decidió aportar emoción a la noche del lunes. Expulsó a Alexis, no se sabe bien por qué.
Los de Emery se decidieron a aprovechar los espacios que dejaba a sus espaldas el Getafe y el Chori en el minuto diez del partido gozó de su primera gran ocasión como valencianista. El mano a mano con Códina acabó pegando al muñeco.
Con espacios a su favor y dos asistentes de lujo a sus espaldas como fueron Silva y el Chori, David Villa se dedicó a tirar desmarques de ruptura que no llegó a alcanzar. Los roles se intercambiaron en la siguiente acción y fue el Chori el que no llegó a conectar con la punta del pie un medido centro hacia el punto de penalti.
El Getafe planteó un duelo de estrecheces, con las líneas muy juntas, sin dejar apenas espacio en la zona de creación. Una decisión buena o mala, según se mire, para contrarrestar al Valencia, que tiene cohetes por futbolistas. El equipo madrileño dominó al Valencia durante la primera media hora. Entre otras cosas porque ató muy corto a Banega, que sufrió la vigilancia más sofocante de la temporada.
El plan del Getafe tenía buena pinta.
En igualdad de condiciones, la calidad siempre define. Quien la posee tiene mucho ganado. Aunque juegue mal. Aunque llegue poco, poquísimo, como hizo el Valencia. La tercera vez que se fue con claridad hacia el área rival, dio la puntilla. Galopada del Chori comEl fútbol sin gol frente a la pegada, la contundencia.
Animada por el gol, la grada esperaba una segunda parte plácida. Más cuando Villa anotó el segundo gol, poco después de reanudarse el partido. El Guaje culminó otro contraataque con una vaselina perfecta, que hizo sacar los pañuelos a Mestalla y le permitió recuperar el "pichichi" en su titánica lucha con Messi. Quién esperaba una última media hora tranquila, se equivocaba. El partido no dio tregua al Valencia. Primero con el susto de Alexis, que siguió en el campo después de doblarse la pierna en una acción que hizo pensar en otra lesión fatal. El malagueño fue expulsado minutos después por el árbitro. O le dijo algo muy feo a Paradas Romero o este quiso vengarse de alguna acción anterior.
Lo cierto es que a la fatalidad de las lesiones parece que al Valencia se la han juntado las actuaciones arbitrales. El colegiado pasó por alto un penalti sobre Silva y no vio manos en el gol del Getafe, en una jugada extraña, en la que la defensa dio por hecha la ilegalidad. El partido dio paso a un final de sufrimiento, pero fue el Valencia el que más se acercó al gol.
o interior zurdo, servicio perfecto a Villa, que no desaprovechó. 1-0 y a los vestuarios.
Tras el descanso, los fantasmas que pudieran quedar en el recinto de Artes Gráficas se disiparon muy pronto. Lo que tardaron en utilizar el tiralíneas Silva y Villa, tras una pérdida de balón visitante de la que se aprovechó el canario. Y, como vista le sobra, largó el cuero con el guante que tiene en su pierna izquierda para el Guaje, que hizo el resto. Delicatesen del nuevo máximo realizador de la Liga española que, viendo la salida desesperada de Codina, le cruzó por alto el balón con un giro perfecto de tobillo, antes de ingresar en el área. Plástica y belleza superlativas.
creció más si cabe cuando, a quince minutos del final, el Getafe estableció el 2-1 en un remate desde dentro del área de Manu del Moral, en una jugada en la que la defensa se quedó incomprensiblemente parada reclamando una mano.
El Getafe acabó atacando con balones bombeados cómodos para el meta local y el Valencia dispuso de alguna ocasión, sobre todo una de Silva en la prolongación y un claro penalti sobre Maduro del que se desentendió Paradas. Tres puntos que acabaron siendo más de infarto que de oro.
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