las rotaciones de emery

El Valencia recibe al Génova con miedo a repetir los errores que han impedido al equipo ganar los últimos cuatro partidos

Cuatro partidos consecutivos sin ganar lleva el Valencia. Y eso, a Mestalla, le intranquiliza. Por eso el partido de esta noche contra el Génova (21.05 horas) ha cogido matices que hace un par de semanas muy pocos podían intuir. Al Valencia actual le ha entrado un tembleque impensable porque cuando se conoció la composición de este grupo de la Europa League, ni el conjunto italiano -que llega hoy como primero al ganar 2-0- ni los otros dos acompañantes (Lille y Slavia de Praga) podían ni pueden equipararse en calidad y profundidad a la plantilla que maneja Emery. Pero el destino ha querido que en Lille la pifiara Unai -por mucho que se resista a reconocerlo abiertamente- con aquella espectacular vuelta de tuerca al engranaje de las rotaciones y que en los otros tres encuentros de la liga doméstica disputados, entre unos y otros, el Valencia se quedara con las vergüenzas al aire.
Para tapar esta vía de agua que se ha abierto todos han querido poner algo de su parte. Desde el presidente, Manuel Llorente, que se acercó por Paterna para hablar con unos y otros -perdió la oportunidad de concienciar a los jugadores- hasta el entrenador, que por lo que se intuye aplicará unas rotaciones más light; pasando por los futbolistas, que parecen concienciados, al menos de manera aparente, de que tienen que extremar la concentración.
Por eso el de hoy es de esos partidos que sin querer ha cogido más trascendencia de la que realmente y en lo que hace referencia a la clasificación puede tener. Porque si el Valencia gana ni mucho menos podrá decir que ha asegurado su pase a la siguiente fase (se clasifican los dos primeros de grupo) e incluso en función de cómo lo haga el debate sobre sus males puede continuar dando mucho que hablar. Desde luego, si el Génova sale de Mestalla con los tres puntos, sobre Unai Emery empezará a crearse una nebulosa muy peligrosa.
El técnico, no obstante, se ha dado cuenta de la intranquilidad que ha invadido el club. Albelda, un día antes, apuntaba que cambiando once jugadores es difícil que salga bien la cosa. De ahí que el Valencia de esta noche no será ni el del sábado contra el Atlético ni el que jugó en Lille. Emery cogerá un poco de aquí y un poco de allí, lo va a agitar todo y saldrá un mixto salpicado de jugadores que pueden considerarse titulares.