Nueva semana, mismo objetivo. Este lunes la incertidumbre y el deseo de que lleguen buenas noticias desde Madrid copan los sueños de los seguidores del Valencia, ansiosos de que se anuncie de una vez elacuerdo entre Peter Lim y Bankia respecto a los créditos que el club mantiene con la entidad bancaria. Las partes siguen negociando “con profesionalidad”, como recalcó Jose Ignacio Goirigolzarri en su visita a Valencia el pasado jueves. Sin embargo, la seriedad de las partes no significa forzosamente que el entendimiento vaya a cristalizar en los próximos días, aunque desde el Valencia transmiten tranquilidad y la confianza de que el acuerdo se cerrará en breve.
La Generalitat puso su granito de arena el pasado viernes al tildar de“muy próximo” el acuerdo, aunque el fin de semana ha pasado sin excesivos avances en dicha dirección. La semana, por tanto, se postula como decisiva en una dirección u otra. El club espera la firma como agua de mayo para, ahora sí, acometer a toda prisa varias operaciones abiertas en el mercado de fichajes, pendientes del OK del futuro nuevo propietario para concretarse. Del mismo modo, una dilatación aún mayor de las negociaciones instalaría la preocupación en el seno de Mestalla. Fuentes del club y de la Fundación no ocultan que un nuevo retraso causaría inquietud.
Sin embargo, el banco no parece tener prisa ninguna para marcarse fechas ni plazos. Aunque desde la entidad bancaria se ha deslizado que la sintonía es buena con el equipo negociador de Lim en Madrid, encabezado por la financiera Lay Hoon Chan, también se ha insistido en que el aplazamiento del crédito de 220 millones por un mes -hasta el próximo 27 de junio- es un indicio bastante certero de que las negociaciones pueden ir para largo.
Fuentes de Bankia deslizaban en los últimos días que incluso dicho plazo podía prorrogarse uno o incluso dos meses más en caso de queno hubiese ‘fumata blanca’ al alcanzar cada una de esas fechas límite. Sin embargo, eran incapaces de concretar qué ocurriría a partir del mes de agosto, en caso de alcanzar dicha coyuntura, porque ese mes además vence un plazo por la mitad del importe de los 81 millones de euros prestados a la Fundación VCF en verano de 2009.
La firma negro sobre blanco de la prórroga del plazo hasta el 27 de junio es uno de los asuntos que ocupará a Amadeo Salvo este lunes. El club y el banco pactaron el aplazamiento hace seis días, pero de forma verbal y sin un documento firmado. Curiosamente, ambas partes aclaran que fue la contraria la que pidió la prórroga para dar más tiempo a que se cierre la negociación entre Lim y el banco. El presidente del Valencia aprovechará y mantendrá una toma de contacto con sus compañeros de consejo de administración.
LAS DOS PARTES SE RESERVAN UN ‘PLAN B’
Nadie concibe una ruptura de las negociaciones a corto plazo. Ambas partes creen que el acuerdo llegará, tarde o temprano, pero eso no ha supuesto impedimento para que tanto Bankia como el Valencia hayan dejado la puerta abierta a otras opciones en caso de que Lim y el banco no lleguen a un entendimiento. Hay demasiado en juego y el margen de maniobra sería demasiado escaso si no hay ‘plan B’ definido.
Bankia ha mantenido en los últimos días una toma de contacto con la oferta rusa, como destapa el diario Las Provincias. Los responsables deZolotaya Zvezda insisten en su interés porque consideran que su oferta sigue siendo la mejor y más alta en cantidades, tanto para el club como para el banco, de todas las presentadas. Con Carboni y Subiratscomo cabezas visibles y un fuerte respaldo económico -su oferta supera los 600 millones de euros-, creen que todavía hay mucha tela que cortar.
En el bando contrario tampoco han permanecido a la expectativa. Según pudo saber este periódico, el propio Amadeo Salvo contactó hace un par de semanas -tras la elección de Lim a manos del Patronato- con portavoces de otras iniciativas que han ido llegando al club en los últimos meses para informarles de que se les tendría en cuenta en caso de que Lim y Bankia finalmente no alcanzasen un entendimiento. Iniciativas que, como detalle de interés, no formaron parte del proceso de venta abierto por la comisión gestora y al que concurrieron siete proyectos aspirantes.
El presidente es consciente de que sin acuerdo con el banco, el interés del magnate podría diluirse y, dado que aún no se ha ejecutado formalmente la compra de la mayoría accionarial -falta la luz verde por parte del Protectorado de Fundaciones y la celebración de una Junta de Accionistas para informar del cambio de manos accionarial-, quiere tener abierto el abanico de opciones con otros proyectos y empresas con los que el presidente se ha reunido personalmente en el último medio año, desde que en diciembre se oficializó la intención de llevar a cabo la venta del club.
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