HÉCTOR GÓMEZ. HOY El conjunto valencianista asume que tiene que pagar un millón de euros por el jugador y busca un equipo que pueda asumir la cesión con ese coste. El próximo 30 de junio será valencianista
VALENCIA.
El Valencia anda en la búsqueda de un equipo que le solucione el problema que tiene con Nicolás Otamendi. La entidad valencianista reconoció que existe un acuerdo con el Oporto por la cesión del futbolista a cambio del pago de un millón de euros, y una opción de compra que ronda los quince millones de euros.
El club de Mestalla se dio cuenta tarde de que el pasaporte italiano de Nicolas Otamendi era ‘dudoso' -el Oporto no lo hace efectivo y lo tiene inscrito como futbolista extracomunitario- y a última hora tuvo que tomar una decisión entre Vinícius y el argentino. La facilidad de encontrar otro central y la dificultad de cerrar un delantero hicieron que finalmente llegara el brasileño a Mestalla.
Desde el pasado viernes Rufete y su secretaría técnica trabajan para encontrar una salida para el zaguero argentino, ya sea en Rusia o en Argentina, pero lo que el Valencia no se esperaba es que el Oporto hiciera pública la operación y dejara a la entidad valencianista al pie de los caballos.
La intención del Valencia es contar con Otamendi a partir del próximo 30 de junio y lo más probable es que el jugador llegue ‘pagado' por Jorge Mendes o incluso podría ser costeado por Peter Lim que ya ha demostrado en este mercado invernal que está dispuesto a invertir en futbolistas como ha hecho con Rodrigo y André Gomes, del Benfica.
El futbolista, por su parte, está mosqueado puesto que sabe que se juega el Mundial y no puede quedarse los últimos cuatro meses antes de la cita de Brasil sin jugar, así que tiene un cabreo importante. El zaguero argentino estaba convencido de jugar en el Valencia y en una liga como la española pero finalmente va a verse obligado a jugar en una liga menor, ya sea en el Zenit, que ya estuvo interesado en Adil Rami, o en Vélez Sarsfield.
El Valencia tuvo un error de calculo al cerrar una operación con un coste por el préstamo sin tener claro si iba a poder utilizar al futbolista, debido a que no se había comprobado previamente si el pasaporte italiano que alega tener Otamendi es válido o no. Ahora, la entidad valencianista se ve en la dificultad de encontrar un club que se haga cargo de las responsabilidades económicas que asumió el conjunto dirigido por Amadeo Salvo con el Oporto. El conjunto luso, como es lógico, quiere su dinero, y no le importa si el que se lo paga es el Valencia o cualquier otro equipo, pero quiere cobrar el millón de euros que acordó por la cesión.
Por ello, el Valencia trabaja a destajo para cerrar una cesión del futbolista y entonces hacer un comunicado oficial en el que explicar toda la operación llevada a cabo y, posiblemente, anunciar que Otamendi será jugador valencianista a partir del próximo 30 de junio.
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