El Consejo retira el dorsal más legendario del valencianismo
ALBERTO SANTAMARÍA
Nadie más vestirá el ´6´ del Valencia. O al menos, esa es la intención. Tal y como el lunes avanzó el programa La Trastienda de la 97.7, el dorsal con más enjundia en la historia del club de Mestalla ha sido retirado para siempre. Así quedó fijado en el Consejo de Administración celebrado en las instalaciones del Alameda Palace. Allí, la Junta que todavía presidía Vicente Andreu aprobó esta propuesta por unanimidad. De esta manera, ningún otro futbolista que se enfunde la camiseta del conjunto blanquinegro podrá lucir un número cuya leyenda se ha forjado gracias al juego de tres de los grandes mitos de una entidad que nació hace más de 94 años. Sin duda, los tres valencianos que jamás han pisado el coliseo de la Avenida de Suecia presumieron con orgullo de ese ´6´ que ya es historia. Antonio Puchades, Pep Claramunt y David Albelda ya no conocerán heredero.
Porque ha sido precisamente la huella que este tridente ha dejado en la afición valencianista en diferentes épocas de su historia, la que condujo a los miembros del Consejo a tomar su última decisión. Justo antes de presentar la dimisión en bloque, Andreu, Llorente y compañía no quisieron marcharse sin prestar lo que ellos consideran, su último legado.
Sin embargo, retirar el dorsal 6 no casa con la normativa actual de la Liga de Fútbol profesional. Ésta obliga a que todos los jugadores con ficha profesional de un equipo de Primera a repartirse los números entre 1 y el 25. Es decir, que en el caso de que el Valencia contara con una plantilla formada por 25 futbolistas profesionales, uno de ellos, tendría que lucir el dorsal ´retirado´. Por ello, la medida debe entenderse como un homenaje a la historia.
El mito de este dorsal se inicia con la figura de Antonio Puchades. El centrocampista de Sueca, recientemente fallecido, defendió durante doce temporadas la casaca del equipo de sus amores. Más de una década en la que Tonico fue capaz de expandir el nombre del Valencia Club de Fútbol más allá de nuestras fronteras. Tanto es así, que fue elegido dentro del mejor once del Mundial de 1950 que se celebró en Brasil y en el que la selección española acabó cuarta, la mejor clasificación del combinado nacional hasta el año 2010. Como jugador, guió a los de Mestalla hasta la consecución de una Liga en 1947 y dos Copas del Generalísimo en 1949 y 1954.
Como Puchades, su sucesor también estuvo doce campañas consecutivas en la entidad blanquinegra. Pep Claramunt, debutó con el primer equipo el 11 de septiembre de 1966. Nacido en Puçol y tras un pequeño paso por el Atlético Saguntino, el mediocampista alternó algunos dorsales durante sus primeras temporadas, y ya en su madurez, fijó el ´6´ en su espalda. Con él, conquistó la Liga del 71 con Alfredo Di Stefano en el banquillo. Antes, en 1967 inauguraba su palmarés con una nueva Copa del Generalísimo.
Y por último David Albelda. El capitán del mejor Valencia de la historia. Como ya ocurriera con sus predecesores, su ya eterno dorsal ha estado acompañado del brazalete con la Senyera. Quince campañas siendo uno de los murciélagos del escudo, el de La Pobla Llarga ha levantado un total de seis títulos. Dos Ligas, una Copa de la UEFA, una Supercopa de Europa, una Copa del Rey y una Supercopa de España. Una lista de honores que podrían no acabar ahí si, finalmente, la nueva directiva que encabezada por Amadeo Salvo decide renovarlo. Si esto fuera así, la decisión tomada en el Consejo quedaría aplazada hasta el adiós definitivo del último gran ´6´.
Otros tres ´6´ con mucha enjundia
Otros tres futbolistas se ganaron el favor de Mestalla luciendo el dorsal 6. Roberto Gil en la década de los 70, Enrique Saura durante los 80, y Gaizka Mendieta, entre finales de los 90 y los primeros años del siglo XXI. Este último será recordado por su gol en la final de la Copa del Rey de 1999 en la que el equipo entonces entrenador por Claudio Ranieri se impuso al Atlético de Madrid en el estadio de La Cartuja por 0-3. Además, el vasco tiene el honor de ser el único jugador que, vistiendo la camiseta blanquinegra, ha sido capaz de marcar un gol en una final de la Champions. Fue en 2001 ante el Bayern en Milán.
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