La Generalitat va a intentar «hacer el mínimo desembolso, o ninguno», con el préstamo que se concedió a la Fundación
P. HUGUET | VALENCIA..-
Febrero es clave. Este mes es el plazo que se ha marcado el Gobierno valenciano para llegar a un acuerdo con Bankia sobre la deuda que contrajo la Fundación Valencia CF con esta entidad: 81 millones, más unos intereses de otros 4,8 millones.
Después de que hace apenas un mes la Fundación admitiera que no puede afrontar su deuda, la Generalitat pasó a un primer plano, como avalista del préstamo. Pero, por ahora, el Consell «no ha asumido en absoluto que tenga que hacer el pago». El motivo, según subrayó ayer el vicepresidente del Gobierno autonómico, José Císcar, es que las negociaciones abiertas con Bankia tienen como principal objetivo «intentar hacer el mínimo desembolso, o ninguno, en este momento».
De hecho, Císcar insistió en que desde el Ejecutivo valenciano se está tratando «incluso de no pagar los intereses». A pesar de ello, añadió: «Bueno, si hubiera que pagar los intereses, lo haríamos, pero en ningún caso pagaremos el principal». Además, reconoció que no hay un solo interlocutor con Bankia. Puede ser él mismo o los consellers de Hacienda, de Economía o de Educación y Deporte.
Si el portavoz del Consell se mantuvo ayer en la estrategia de presionar públicamente a Bankia proclamando que no va a pagar los intereses, también utilizó el mismo demoledor argumento de la semana pasada: «Tenemos otras prioridades: la sanidad, la educación, el empleo, bienestar social... por nombrar las más importantes». Muy lejos, según este argumento, queda ahora mismo la intención de destinar dinero público para pagar la deuda de la Fundación Valencia Club de Fútbol.
No obstante, en otra de sus respuestas José Císcar dejó entrever que sí está bastante asumido que habrá que pagar. Fue cuando se le preguntó por qué uso se pretende dar a las acciones del Valencia que compró la Fundación: «La Generalitat, si tiene que asumir deuda de una entidad privada finalmente, tendrá que vigilar que los intereses públicos queden cubiertos: que vuelva a las arcas públicas el desembolso que se tenga que hacer».
Cataluña y la F-1
Otro de los frentes que tiene activo el Gobierno valenciano en el ámbito deportivo es el Gran Premio de Fórmula 1. Esta semana, desde el circuito de Montmeló se aseguraba que no había ningún acuerdo para que las dos regiones se alternaran para hacer la carrera.
«El acuerdo verbal (para turnarse) no ha variado en absoluto. Ningún miembro del Gobierno catalán nos ha dicho que lo que teníamos cerrado ya no esté en vigor», destacó Císcar. Además, «se sigue en conversaciones para una rebaja sustancial del canon»
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