ANDRÉS GARCÍA Dídac Vilà ya está en España para resolver su futuro y para acercar, hasta donde se pueda, su fichaje por el Valencia. No hay que olvidar que sus decisiones están supeditadas a la inminente marcha de Jordi Alba al Barcelona. El lateral izquierdo del Milan puso fin el lunes a sus vacaciones de verano en Cancún y regresó a Barcelona para abordar su destino la próxima temporada. O lo que es lo mismo, para empezar a preparar su llegada al Valencia. El futbolista aterrizó en tierras catalanes y se citó por la tarde con su agente para informarse de todas las propuestas que están encima de la mesa — entre ellas la del Valencia que es la que más gusta— valorarlas y decidir. Y es que, tanto el agente como el jugador quieren presentarse a la reunión con el Milán con las ideas claras. El agente, que el lunes tenía previsto reunirse con el Milán, aplazó la cita para hablar con el jugador y firmar este martes en Tel Aviv la contratación de otro de sus representados, Carlos García. La reunión en la que Dídac le dirá al conjunto italiano que se quiere ir al Valencia se ha dejado para finales de semana.
Dídac ha estado disfrutando de unas merecidas vacaciones durante los últimos días en Cancún. El catalán ha querido desconectar del mundo del fútbol y de su propio futuro. Hasta el punto que ni siquiera mantuvo contacto con sus agentes durante su estancia vacacional en México. Apagó el teléfono móvil y solo lo encendió el pasado domingo para comunicar su regreso al Aeropuerto de El Prat. El futbolista quiere empezar a definir el que será su futuro deportivo de la próxima temporada. A su favor juegan dos cosas. Muchos clubes están interesado en él y tiene contrato con el Milán. Con la tranquilidad que eso conlleva. En su contra juega que sus intenciones deportivas no pasan precisamente por quedarse en el conjunto rossonero. Tampoco el Milan tiene previsto contar con él. La voluntad firme de Dídac es dar un paso adelante en su progresión jugando en uno de los equipos grandes de la Liga BBVA y, como ha quedado demostrado con los casos Villa, Silva, Mata o Jordi Alba, sabe que el Valencia puede ser el mejor trampolín para su carrera. De todo eso es de lo que se habló ayer en la conversación que mantuvieron las dos partes. Se mire desde donde se mire, el Valencia es el favorito.
Otra de las motivaciones para elegir el Valencia es la opción de jugar Champions. El perico ha cuajado una gran temporada en el Espanyol convirtiéndose en un fijo de Mauricio Pochettino, pero quiere subir un escalón y repetir lo mismo en otro equipos con mayores aspiraciones. La experiencia ‘española’ del Espanyol, en calidad de cedido, ha funcionado como quería y el jugador valora la posibilidad de repetirla. Eso sí, vestido de blanquinegro en lugar de blanquiazul.
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