David Silva está más cerca del Manchester City cada día que pasa. Así se desprende tras la cumbre mantenida ayer en Barcelona entre representantes del conjunto inglés y Manuel Llorente, presidente valencianista. Ambas partes se citaron en la ciudad condal, por diferentes motivos. Por un lado los emisarios británicos iban a negociar por Yayá Touré y, por otro, Llorente prefirió no reunirse en Valencia para no levantar excesiva expectación, a pesar de que el traspaso del canario es vox populi.
La reunión se centró prácticamente en su totalidad en la parte económica de la operación. El Manchester City se ha venido mostrando desde el inicio de los contactos dispuesto a desembolsar cerca de 35 millones de euros por Silva, cantidad que satisface al Valencia. Ayer sólo se habló de ese aspecto, sin que se pusieran sobre la mesa nombres de ningún futbolista que pudiera recalar en la plantilla de Unai Emery y abaratar el traspaso.
El Manchester City pretende rebajar la cifra que se viene manejando desde el primer momento, a lo que Manuel Llorente se negó de plano y todo apunta a que conseguirá su objetivo. A partir de ahí, se entró en la negociación de la forma de pago, que los responsables del equipo inglés quieren fraccionar a lo largo de los cinco años que probablemente tendrá de duración el contrato del internacional canario del Valencia.
Llorente trata ahora de reducir los plazos y obtener la mayor cantidad de dinero posible en una primera entrega y así se lo expuso a los representantes del Manchester City. Con el dinero que llegue se acometerá la contratación de refuerzos para cubrir las vacantes de Villa y la del propio Silva, ya que hasta el momento el único fichaje realizado por el Valencia para el ataque ha sido el de Roberto Soldado, zona que queda todavía un tanto debilitada, sobre todo teniendo en cuenta que en la temporada a iniciarse habrá que competir con los mejores clubes europeos en la Liga de Campeones.
El traspaso de Silva está cerca y no parece que vaya a peligrar la operación por las diferencias que faltan pulir en el aspecto económico. Todo apunta a que Manchester y Valencia están condenados a entenderse, porque uno quiere comprar y el otro está dispuesto a vender. Las partes van a continuar trabajando hoy, aunque no será cuando se cierre, porque prima el partido de octavos de final del Mundial que han de disputar España y Portugal, en el que estará inmerso David Silva. Sin embargo, sí que se prevé que quede cerrada la operación en el transcurso de esta semana.
Una vez que Manchester y Valencia acuerden la forma de pago entrará en liza Amadeo Rengel, el representante de David Silva, que negociará con el City las condiciones del contrato del futbolista. Contrato suculento de alrededor de tres millones de euros netos por cada uno de los cinco años de duración que el club británico va a ofrecer al jugador valencianista.
La previsión es que en el momento en que ambos clubes cierren la operación, el City y el agente de Silva se sentarán de inmediato a negociar. Si no se dilata excesivamente en el tiempo, es probable que mañana mismo pudieron hablar, ya que la persona que defiende los intereses del futbolista canario reside en Barcelona, donde se encuentran los emisarios del equipo que dirige Roberto Mancini. Eso sí, como queda dicho, no será hoy, pues prima el Mundial.
http://valenciacf.lasprovincias.es/noticias/2010-06-29/cumbre-silva-barcelona-20100629.html
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