Desde que Manuel Llorente fue elegido para gestionar el Valencia y frenar la imparable caída económica de la entidad, el actual presidente se ha visto obligado a trabajar en dicho objetivo, pero con la doble misión de que el equipo no perdiera potencial deportivo. La tijera del presidente entró en acción desde que aterrizó, no había otra alternativa para tratar de atajar la sangría y, por el momento, se están cumpliendo las directrices previstas. Esta temporada se ha reducido la deuda de manera considerable, en unos 100 millones de euros, a lo que hay que añadir los ingresos por venta de futbolistas.
Ahora mismo, entre los traspasos realizados y los jugadores que finalizan contrato, la entidad valencianista se ha ahorrado ya 12 millones de euros. Por un lado, la venta de David Villa al Barcelona supone que el club blanquinegro evite el pago de seis millones de euros que le costaría el futbolista la próxima temporada. El traspaso de Nikola Zigic al Birmingham evita costear otros 2,2 millones.
Por otra parte, la marcha de Rubén Baraja reporta al Valencia el ahorro de otros tres millones, mientras que la cesión de Míchel al Deportivo de La Coruña -a un paso de cerrarse-, debe colaborar para no pagar los 600.000 euros que tiene el futbolista en concepto de ficha.
En total, casi 12 millones de euros que la entidad de Mestalla dejará de abonar, cantidad que podría incluso duplicarse en las próximas semanas con la salida de otros jugadores. Por ejemplo, el Valencia ahorraría seis millones más si traspasa a David Silva. Más de seis si se desprendiera de Asier del Horno y 1,2 si al portugués Hugo Viana se lo queda definitivamente en propiedad el Sporting de Braga.
Al margen de las cifras, por lo que hace referencia a las negociaciones que se mantienen para la salida de futbolistas, la más cercana, poco menos que inminente, es la de Míchel quien, salvo cambio brusco de última hora, jugará en el Deportivo la próxima temporada. El club gallego espera poder presentarlo el lunes.
La única diferencia es que los de Riazor desean incluir una cláusula en la que se contemple una opción de compra futura, a lo que se niega el Valencia. Sin embargo, no se espera que sea motivo para romper la operación.
El Deportivo, al mismo tiempo, ha preguntado al Valencia por la posibilidad de incorporar a su plantilla a Jordi Alba, pero aquí encuentra más dificultades; hasta tal punto es así que apenas alberga esperanzas de conseguir sus servicios después de la magnífica evolución del joven futbolista en el tramo final de la presente temporada. Todo dependerá de la plantilla final valencianista en la que, ahora mismo, el zurdo catalán tiene cabida.
Por último, el Zaragoza está interesado en Rubén Baraja, aunque por ahora parece difícil que club y jugador unan sus destinos.
http://valenciacf.lasprovincias.es/noticias/2010-05-28/valencia-ahorra-millones-sueldos-20100528.html
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