El color naranja dominará las gradas del renovado estadio del Valencia
P.H. | VALENCIA.-
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El murciélago del escudo y el color naranja van a apoderarse del estadio de Mestalla. Así es el diseño que lucirá el interior del viejo estadio del Valencia, que el pasado mes de mayo cumplió 90 años desde que se construyera en 1923.
Los trabajos de limpieza de las sillas y de mejora de la comodidad en el coliseo valencianista previstas por el club serán aprovechadas para el lavado de cara que ha decidido hacer la directiva. El objetivo es claro: renovar la marca 'Valencia Club de Fútbol' a través de la «impactante» imagen interior del estadio. También está ya siendo pintada la fachada de la avenida de Suecia y están reparándose algunas grietas y desperfectos en la parte exterior.
El cambio de imagen de Mestalla, según informaron fuentes del club blanquinegro, forma parte del plan estratégico 'Gloval', cuya finalidad es diferenciar la marca 'Valencia CF' de otras propuestas futbolísticas y, al mismo tiempo, incrementar su valor.
El presidente del club, Amadeo Salvo, argumentó que este cambio estético integral en el interior del campo responde a la necesidad de hacer más atractiva la percepción que se tiene de la entidad. «Con esta acción damos un gran paso. El estadio del Valencia Club de Fútbol presentará una imagen corporativa moderna, limpia y colorista», subraya el presidente.
El proyecto 'Gloval' marcó la candidatura de Salvo a la presidencia, con la aspiración de aumentar la autoestima de la afición y el valor de la entidad valencianista.
Con este nuevo diseño, según agrega Salvo, se busca «impactar a los visitantes y que los aficionados se enorgullezcan de su estadio», al mismo tiempo que se aprovecha para limpiar y mejorar los asientos. La mayoría tienen al menos entre 10 y 15 años, desde que los últimos fueron instalados en la última ampliación.
Desaparece el azul
La renovación se hará pintando las sillas y cambiando las que estén deteriorados. De esta manera, desaparecerá el azul que predomina actualmente en buena parte del graderío y que presenta un tono muy descolorido en algunas zonas. El color blanco, muy presente actualmente, prácticamente desaparecerá, aunque no del todo.
La tribuna tendrá todos los asientos naranjas. También el anfiteatro, excepto los que formarán la palabra Mestalla, en letras mayúsculas blancas.
En los cuatro niveles de graderíos existentes en los fondos (las zonas de detrás de las porterías) se combinarán los colores naranja y blanco.
El nuevo diseño de las zonas norte y sur prevé «un degradado bicolor entre el blanco en la parte superior y el naranja avanzando hacia el césped»; es decir, en la parte de arriba se combinarán ambos colores y en las zonas más cercanas a la hierba irá ganando protagonismo el tono de la segunda equipación. Además, en los fondos se podrá leer el lema 'Amunt València' (una palabra en cada zona) en letras negras.
Pero quizás lo más impactante será el diseño del graderío central. Un enorme murciélago de 90 metros de ancho recibirá a los jugadores rivales cuando salgan del túnel de vestuario antes de los partidos y del calentamiento, para tomar contacto con el césped.
La imagen del 'rat penat' que corona el escudo valencianista ha ido ganando prestigio y cada vez está más presente en los artículos que vende el club: ropa de calle, complementos, menaje de hogar... Ahora, se refuerza el murciélago como símbolo del Valencia. El enorme quiróptero negro con sus alas desplegadas incluirá en su interior las iniciales 'VCF' en color blanco.
De esta manera, aunque predominará el naranja de la segunda equipación, el blanco y el negro de la primera también estarán representados en la nueva imagen.
El naranja, color corporativo
En cualquier caso, según confirmaron fuentes del club, en el futuro se pretende potenciar el naranja como el color corporativo del club. Quizá gane protagonismo en el nuevo estadio, con independencia de la imagen de marca de un potencial patrocinador principal.
De momento, y después de que se descartaran otras opciones como los colores de la Senyera, el naranja y el murciélago acompañarán a la afición de Mestalla los próximos dos o tres años, plazo mínimo marcado por el club antes de que comiencen las obras y se produzca el traslado a la avenida Corts Valencianes.
El proyecto tiene un presupuesto que ronda los 165.000 euros, una inversión que la entidad considera muy reducida en comparación con el impacto de marca esperado.
Los trabajos de limpieza y pintura en el vetusto Mestalla, el campo más antiguo de Primera División tras el derribo de San Mamés, comenzarán esta misma semana. El objetivo del club es que la renovación esté terminada para el partido de la jornada 3 ante el FC Barcelona. Esto significa que en el primer encuentro de Liga, ante el Málaga, el estadio mezclará su nueva imagen con la antigua.
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