La sentencia, que refleja un cambio de criterio en la materia tras el reciente fallo del Supremo, amenaza a la futura ciudad deportiva
J. M. | VALENCIA..-
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La futura ciudad deportiva de Porchinos corre peligro de no ver nunca la luz. El proyecto está paralizado por la falta de presupuesto del Valencia y en los últimos quince días ha sufrido dos reveses judiciales. Ayer el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) declaró la nulidad del acuerdo de la Comisión Territorial de Urbanismo que en junio de 2006 aprobó la homologación y plan parcial Masía de Porchinos en Ribarroja, donde el Valencia planea construir su ciudad deportiva. El Valencia va a recurrir la sentencia, y para ello se reunirá hoy su gabinete jurídico con los expertos de urbanismo de la entidad, como el consejero José Manuel Palau, para diseñar el recurso.
El alto tribunal valenciano considera que la adjudicación a Litoral Este de la condición de agente urbanizador no cumple los principios de publicidad y libre concurrencia legales. Además, tilda de «preceptivo y vinculante» el informe de la Confederación Hidrográfica que no se presentó, y por tanto no consta que esté asegurada la disponibilidad de recursos hídricos. El TSJ lo anula también por incumplimiento de los condicionantes de la Declaración de Impacto Ambiental.
La sala estima así el recurso presentado por la plataforma 'Salvem Porxinos', que ya da por hecho que el proceso para construir la ciudad deportiva está paralizado definitivamente. 'Salvem Porxinos' había recurrido esta homologación porque entiende que la recalificación de 1.200.000 metros cuadrados de suelo para edificar 2.880 viviendas para 9.000 personas supone una alteración «sustancial» de la población de Ribarroja, porque el suelo afectado era no urbanizable de especial protección agrícola antes de aprobarse el PAI impugnado, por estar situado en el parque natural de les Rodanes y porque el estudio de impacto ambiental tiene importantes deficiencias.
Tanto la Generalitat como el Ayuntamiento se opusieron, alegando que la plataforma no está legitimada para recurrir, pero el TSJ le ha dado la razón, legitimándola para impugnar la adjudicación a Litoral Este. El cambio en la presidencia del Tribunal y la última sentencia del Supremo constantando la ausencia del preceptivo informe de recursos hídricos han influido en esta variación. Ahora Valencia y Consell pueden presentar recurso, como así será, ya que la sentencia no es firme y el asunto llegará al Tribunal Supremo. De momento, anoche el portavoz de Compromís, Enric Morera, se apresuró a subrayar que la anulación del plan de Porchinos evidencia «el fracaso de la cultura del pelotazo del PP».
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