La Fundación disolverá el jueves su comisión económica y comunicará a los patronos su incapacidad para pagar al banco - La Ley del Deporte impide que una entidad tenga en propiedad más de un club y la Generalitat ya es propietaria del Hércules
JOSÉ MANUEL BORT VALENCIA
La Fundación del Valencia comunicará a sus patronos, el próximo jueves, que no ha encontrado soluciones al pago de los intereses del préstamo con Bankia. Será por la tarde, en una junta general extraordinaria convocada para anunciar el fracaso en las negociaciones con el máximo acreedor del propietario del club y del Valencia. Antes, por la mañana, se reunirán por última vez los miembros de la comisión económica, creada hace unas semanas para negociar directamente con el banco. Este grupo, formado por Társilo Piles, Joaquín Ríos Casanova (director general de industria), Vicente Gil (consejero), Salvador Belda (presidente del Valencia femenino), Antonio Birlanga (exconseller de economía) y Carlos Zafrilla (exbancario), se disolverá después de sus intentos frustrados por refinanciar el crédito de 81 millones de euros con Bankia y por conseguir un nuevo aval de la Generalitat Valenciana. Tal como anunció el asesor económico del Valencia, Vicente Andreu, el pasado sábado en Levante-EMV, la Fundación pidió una garantía de 2 millones de euros al Consell, pues el patronato dispone de casi tres millones para el abono de los 5 que debía pagar en 2012 en concepto de intereses.
La disolución de la comisión especializada en operar con Bankia es un gesto evidente de la rendición de la Fundación para hacer frente a sus obligaciones bancarias. Su presidente, Társilo Piles, confesó públicamente la pasada semana que las posibilidades de alcanzar una solución eran muy remotas, aunque no había perdido totalmente la esperanza. "Aún estamos vivos. Hay dos posibles soluciones y la próxima semana nos reuniremos para ver si se puede pagar", aseguró entonces. Días después, se confirman las peores noticias. A menos de 15 días para que venza el plazo para pagar a Bankia, la Fundación arroja la toalla. Si la Generalitat Valenciana no da un paso al frente de forma inminente, Bankia deberá decidirá el último día de este mes la futura gestión accionarial del Valencia. Puede quedarse con las acciones del patronato (el 70 por ciento del total de los títulos del club) que tiene pignoradas o ejecutar el aval del Instituto Valenciano de Finanzas (IVF). En ese caso, el crédito vencería automáticamente y se cobraría los 81 millones de euros al gobierno autonómico, que pasaría a ser dueño del club de fútbol con mayor relevancia social de la Comunitat Valenciana.
La posibilidad de que el Consell se queda en propiedad con las acciones del Valencia abre un escenario repleto de dudas y conjeturas por atar. Hay mucha niebla en el horizonte. La Ley del Deporte impide que una misma empresa o institución sea propietaria de más de un 5 por ciento de un club de la misma competición, la Liga de Fútbol Profesional (LFP) en este momento. Así lo determina también la normativa de la FIFA, que no permite que ninguna persona física o jurídica de un club tenga "cualquier tipo de poder en la gestión, administración, y/o actuación deportiva de cualquier otro club que participa en la misma competición".
La Generalitat tiene en su poder el Hércules, así como la pignoración de las acciones del Elche, en ambos casos por una situación similar a la que vive ahora el Valencia. La CAM, ahora Sabadell-CAM, ejecutó el 24 de enero el aval de 18 millones de euros al IVF por el 67 por ciento de las acciones del Hércules, después de que su fundación no pudiera hacer frente al préstamo con el banco. Concretamente, no pudo pagar el primer plazo, que ascendía a 500.000 euros. El IVF también intentó embargar el estadio José Rico Pérez, durante el proceso del traspaso de los títulos, una operación que no llegó a realizarse porque el estadio es propiedad de la empresa Aligestión, participada por el máximo accionista de la entidad, Enrique Ortiz.
El Elche, en manos públicas
El caso del Elche presenta más contrariedades. En febrero de 2011 recibió dos préstamos por 14 millones de euros -9 de la CAM y 5 del Banco del Valencia- para cubrir su ampliación de capital, ambos avalados por el IVF. El primero fue ejecutado, mientras que el segundo está pendiente del ascenso del club ilicitano. La Generalitat tiene pignoradas las acciones a su favor a falta de que el Elche pague 5 millones, pendientes de sus logros deportivos. Se ha comprometido a pagarlos la próxima temporada, en la que espera estar en Primera División, y recuperar el poder del club. El caso del Levante UD es distinto.
En esta situación, la Generalitat Valenciana no puede, legalmente, quedarse el control accionarial del Valencia. El traspaso de ese 70 por ciento de los bonos choca con la normativa legal, por lo que la pelota está en el tejado de Bankia. El banco no podría, por tanto, ejecutar su aval sobre el IVF sin tener preparada alguna fórmula para evitar la ilegalidad.
El caso del Elche presenta más contrariedades. En febrero de 2011 recibió dos préstamos por 14 millones de euros -9 de la CAM y 5 del Banco del Valencia- para cubrir su ampliación de capital, ambos avalados por el IVF. El primero fue ejecutado, mientras que el segundo está pendiente del ascenso del club ilicitano. La Generalitat tiene pignoradas las acciones a su favor a falta de que el Elche pague 5 millones, pendientes de sus logros deportivos. Se ha comprometido a pagarlos la próxima temporada, en la que espera estar en Primera División, y recuperar el poder del club. El caso del Levante UD es distinto.
En esta situación, la Generalitat Valenciana no puede, legalmente, quedarse el control accionarial del Valencia. El traspaso de ese 70 por ciento de los bonos choca con la normativa legal, por lo que la pelota está en el tejado de Bankia. El banco no podría, por tanto, ejecutar su aval sobre el IVF sin tener preparada alguna fórmula para evitar la ilegalidad.
http://www.levante-emv.com/deportes/2013/01/15/manos-bankia-consell/966827.html
No hay comentarios:
Publicar un comentario