Son algo más de las 12 de la mañana cuando Unai Emery llega a Paterna. Quería ver cuanto antes el CD del partido, profundizar en el análisis
de lo ocurrido la noche anterior en Mestalla. SUPER estaba allí y estas son las primeras reflexiones del entrenador nada más despertar y comprobar con desesperación que el desastre de partido ante Osasuna no fue un sueño. Y después se fue a ver el dichoso CD...
Qué le voy a decir después de la horrorosa segunda mitad contra Osasuna; por ser positivo, sólo se me ocurre que el equipo ha demostrado otras veces que sabe levantarse.
—Es necesario levantarse, tuvimos 45 minutos muy malos y preocupantes en algunos aspectos, pero lo bueno es que podamos solucionarlos y solución hay. Ante Osasuna hay un punto de inflexión, después de ir 3-1 al descanso, esperemos que sea la única vez que nos ocurra y que no se vuelva a repetir.
—¿Qué le pide el cuerpo decir y no ha dicho todavía?
—Tengo unas conclusiones generales; hay algunos jugadores que necesitan dar un paso adelante hacia la personalidad, hacia el carácter y hacia el liderazgo en el terreno de juego. Y ese paso es necesario. Cuando jugadores que ya tienen un perfil de líderes no están en el terreno de juego tienen que aparecer otros, que en el presente es necesario y en el futuro tienen que dar ese paso. Es una crítica constructiva hacia el equipo y los jugadores.
—Pero este equipo sí tiene futbolistas de ese estilo, ¿qué ocurre?
—Carácter y personalidad tiene el equipo, pero en el segundo tiempo no estuvo. No sé si les pesaron los momentos del partido a algunos jugadores o el empuje del rival, o les llegó a palpar el miedo a empatar o perder y eso les hizo estar totalmente bloqueados. Hay jugadores que estaban en el campo y tienen personalidad y carácter, y lo han demostrado, saben echarse el equipo a sus espaldas, pero el lunes al equipo le pudo Mestalla en el segundo tiempo y el juego de Osasuna. Estoy deseando que llegue el primer entrenamiento de la semana y el partido del sábado para que demostremos que eso fue un bache puntual.
—Entonces, ¿faltó experiencia para administrar la ventaja, parar el partido con faltas, perder tiempo?
—El problema no fue ése, el problema es que no fuimos capaces de tener el balón, el problema fue que nos metieron atrás con su juego aéreo y nos costó mucho salir de ahí, y el problema fue que metimos a Osasuna en el partido con el 2-1 y con el 3-2. Y cuando vas con un resultado ajustado ya puedes jugar a la italiana, a la francesa o a la brasileña, porque ellos te van a llegar en alguna ocasión como así ocurrió. Fue un saque de banda de caídas dentro del área, que es su juego, y para evitar eso debemos tener el resultado con dos goles de ventaja para no tener esos miedos ni que Osasuna tuviera opciones.
—¿Físicamente el equipo estuvo mal en la segunda mitad?
—Estoy totalmente convencido de que es una cuestión de mentalidad, lo que nos ocurrió en la segunda parte más mental que físico.
—Desapareció el centro del campo tras el descanso, ¿tanto se echan de menos los kilómetros de Tino?
—Hay jugadores que estaban sobre el césped y deben dar un paso al frente y, con la cabeza arriba, convertir Mestalla en un lugar de acomodo, no un lugar de miedo. Y tras el descanso los jugadores tienen que ser fuertes. Desde que llegué aquí hemos conseguido en un 70 u 80 por ciento de partidos en casa que el equipo esté cómodo. Y si no estuvieron cómodos fue porque el equipo no transmitió desde dentro hacia fuera, y en ese desde fuera, donde estaba todo el campo, se creó un estado de dudas y un estado de miedo que a todos nos comió. Y llegó el empate a Osasuna.
—Ha habido críticas hacia César, pero con él el VCF logró su clasificación para la Champions.
—Vamos, por todo lo bueno que ha hecho y está haciendo, César puede tener un día malo, él mismo lo ha reconocido. Pero César es un jugador que se echa al equipo a sus espaldas y será el primero que se levante. La mejor crítica es la de uno mismo, yo hago mucha autocrítica y César también la hizo.
—Queda claro que Emery no es un técnico partidario de que alguien pierda la titularidad por lesión.
—Busco el rendimiento, merecían los dos jugar y si apuesto por César es por varios motivos. Tan bueno era que jugara César como que lo hiciera Guaita, y no es error del partido que César no estuviera bien como si le hubiera ocurrido a Guaita. Es un error colectivo porque los miedos son colectivos.
—Osasuna llevaba un gol fuera de casa y el lunes marcó tres...
—Por eso digo que debemos ser fuertes defensivamente y hacerlo en bloque. En Mestalla debemos ser capaces de imponer nuestro estilo y habrá equipos que te puedan condicionar, pero el de Osasuna nos condicionó mucho. En el segundo parcial nos ganó 0-2 y eso es producto de que nos han superado en situaciones individuales y también colectivas.
—¿Cómo se encuentra a título personal, le habían igualado un 3-1?
—Estoy con fuerzas para solucionar los errores pero, a la vez, con una decepción mía personal hacia el equipo muy grande por el partido de ayer (por el lunes).
—¿Saldrán adelante?
—Sí porque este equipo ha tenido arrestos para salir adelante, somos conscientes de que debemos sufrir para ganar, el equipo debe estar desde lo individual hacia el colectivo con una exigencia muy alta en cuanto a la dedicación y a la predisposición en el juego. Y este equipo lo va a hacer. Además, ni los técnicos ni el presidente vamos a dejar que este equipo se caiga. Siempre que ha habido una caída nos hemos levantado y el jugador que no se levante no estará, y el jugador que no tire del carro no estará, y si el entrenador no consigue que los jugadores que estén dentro saquen su rendimiento, pues no funcionará, pero lo vamos a hacer.
—Se ha dramatizado mucho esta derrota, ¿es de los que piensa que no es para tanto o está justificado?
—La verdad es que nos duele mucho porque es un partido en el que íbamos 2-0 y 3-1. Sabíamos la dificultad, pero lo hemos tenido todo de mano y se nos escapó con una endeblez enorme y la preocupación con la solución va en la misma altura, es mucha. Son dos puntos que no tener nos duele pero mucho más la forma que el fondo en sí. El sábado tenemos un buen partido para darle la vuelta a esto.
—¿Percibió un exceso de confianza en el descanso?
—El mensaje fue totalmente de continuidad a lo del primer tiempo, incluso los jugadores fueron conscientes, pero las palabras son más fáciles de decir que los hechos de hacer. Intentamos poner toda la cortapisa para que no sucediera, pero ocurrió. Una de mis mayores preocupaciones es fortalecer la capacidad mental de los futbolistas y es lo que nos falló ante Osasuna, nos preocupa y es un factor en el que hacemos mucho hincapié.
—A toro pasado, ¿volvería a tomar la polémica decisión de sacar a Dealbert por Banega?
—La solución más viable era esa, además, el jugador estuvo bien, no se le puede achacar nada. El centro del campo lo teníamos perdido, estaban cargando mucho juego aéreo, había que fortalecerse ahí. Había más decisiones, pero la más coherente y razonada era esa.
—Cuando el equipo no tiene el balón usted recurre a la figura del mediapunta, ¿hizo Isco lo que debía?
—Isco salió con el 3-2 para tener más el balón con Banega y Mata, con Pablo para darle empuje a la banda derecha. Es verdad que no conseguimos hacerlo, no fuimos fuertes en todo el segundo tiempo.
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jueves, 16 de diciembre de 2010
Emery: ´El jugador que no se levante no estará´
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