A Emery se le atragantó ayer la rueda de prensa. El técnico llegó sonriente, y salió malhumorado. El vasco atravesó el dintel de la puerta satisfecho por saber que el Schalke 04 era el rival de octavos de la Liga de Campeones, y acabó mascullando por las "incómodas" preguntas recibidas sobre el desgobierno del vestuario. Y es que, aunque el técnico se esforzó en trasmitir que el equipo "está unido" y todo "va perfecto", la realidad, y así lo reflejan los hechos, es diferente. En una semana, dos jugadores han sido sancionados por sus indisciplinas (Mathieu y Banega), otro llamado al orden por cuestionar y criticar públicamente al técnico (David Navarro) y, justo horas después de prohibirse las entrevistas y la disputa de partidos amistosos durante las Navidades, Bruno Saltor se saltó la norma y habló para una emisora catalana criticando y calificando de "imposición" la prohibición. Aún así, Emery aseguró, inicialmente, tener el "control absoluto" del vestuario. Sin embargo, tras escuchar la retahíla de preguntas sobre su autoridad, relajó su firmeza. "El equipo está unido, aunque a veces se deshilacha y se tiene que volver a coser", ejemplificó.
Como es habitual en él, Emery intentó justificar cada una de las faltas cometidas. Sobre la ausencia a un entrenamiento de Mathieu y la resaca con la que acudió a Paterna Banega, Emery afirmó que los jugadores "ya han sido sancionados", que en el grupo "hay disciplina y se ejecutan las decisiones" y abogó por "corregir y evitar" estos actos. De David Navarro y el menosprecio hacia su autoridad, Emery desveló que, en el vestuario, el capitán había "pedido perdón". "Lo que dijo se le escapó y es consciente de ello. Ha corregido", justificó. Más duro fue, sin embargo, hacia Bruno, el más molesto por no poder jugar con la selección catalana un amistoso "Se ha equivocado. Los jugadores deben ser conscientes de que se deben al Valencia. Lo que decide el club no se cuestiona", dijo en tono elevado. "En un grupo de 26 es normal que cada uno tenga una opinión, pero las decisiones del club se deben respetar y no cuestionar", apuntó el técnico.
Cómo no, el entrenador respaldó la decisión del departamento de comunicación de prohibir a los jugadores hacer entrevistas. "Los jugadores donde deben hablar es en el campo", sostuvo. "Necesitamos la máxima concentración para ganar en Anoeta y no nos podemos desviar de este objetivo. Si el club ha adoptado esta decisión, bienvenida sea. Todos debemos ir en la misma dirección y no cada uno pensando en lo mejor para él", argumentó. "Sé que los partidos se ganan en los terrenos de juego, pero todo ayuda", incidió. Así, el técnico opinó que, si el equipo gana hoy en Anoeta, "calmará" la tensión. "El epicentro de lo negativo -remarcó Unai- ha sido el empate con el Osasuna, ahora sólo queda pensar en ganar a la Real Sociedad. Es la oportunidad perfecta para que el equipo se refuerce". El momento, hoy a partir de las 22 horas. Un encuentro en el que no estarán los lesionados Moyà, Chori y Banega -tiene una contusión en el tobillo-, el sancionado Albelda así como Dealbert, Isco y Feghouli, fuera por decisión técnica.
Como es habitual en él, Emery intentó justificar cada una de las faltas cometidas. Sobre la ausencia a un entrenamiento de Mathieu y la resaca con la que acudió a Paterna Banega, Emery afirmó que los jugadores "ya han sido sancionados", que en el grupo "hay disciplina y se ejecutan las decisiones" y abogó por "corregir y evitar" estos actos. De David Navarro y el menosprecio hacia su autoridad, Emery desveló que, en el vestuario, el capitán había "pedido perdón". "Lo que dijo se le escapó y es consciente de ello. Ha corregido", justificó. Más duro fue, sin embargo, hacia Bruno, el más molesto por no poder jugar con la selección catalana un amistoso "Se ha equivocado. Los jugadores deben ser conscientes de que se deben al Valencia. Lo que decide el club no se cuestiona", dijo en tono elevado. "En un grupo de 26 es normal que cada uno tenga una opinión, pero las decisiones del club se deben respetar y no cuestionar", apuntó el técnico.
Cómo no, el entrenador respaldó la decisión del departamento de comunicación de prohibir a los jugadores hacer entrevistas. "Los jugadores donde deben hablar es en el campo", sostuvo. "Necesitamos la máxima concentración para ganar en Anoeta y no nos podemos desviar de este objetivo. Si el club ha adoptado esta decisión, bienvenida sea. Todos debemos ir en la misma dirección y no cada uno pensando en lo mejor para él", argumentó. "Sé que los partidos se ganan en los terrenos de juego, pero todo ayuda", incidió. Así, el técnico opinó que, si el equipo gana hoy en Anoeta, "calmará" la tensión. "El epicentro de lo negativo -remarcó Unai- ha sido el empate con el Osasuna, ahora sólo queda pensar en ganar a la Real Sociedad. Es la oportunidad perfecta para que el equipo se refuerce". El momento, hoy a partir de las 22 horas. Un encuentro en el que no estarán los lesionados Moyà, Chori y Banega -tiene una contusión en el tobillo-, el sancionado Albelda así como Dealbert, Isco y Feghouli, fuera por decisión técnica.
Emery avisó de que "el partido contra la Real Sociedad es muy importante después de dejar escapar dos puntos contra Osasuna". "Sabemos de la dificultad, porque la Real se encuentra en un buen momento de juego y en Anoeta se ven sólidos", manifestó. Por ello, Emery opinó que el Valencia tendrá que "estar a un nivel muy alto" para superar al rival, "partiendo desde la solidaridad dentro del terreno de juego". El técnico dijo que no tiene la sensación de que sea un partido especial por su regreso a San Sebastián. "Tengo que competir cien por cien para ganar. No me puedo desviar en nada que no sea en beneficio del Valencia", asumió. Además, el vasco consideró que "la vulnerabilidad del equipo viene por el empate en casa" y que "a partir de ahí está la oportunidad para recuperar". "Hay que ser muy fuertes mentalmente para aguantar al rival", avisó.
¿Y qué hay de su relación con Llorente Emery respondió: "Cuando se gana, y es normal, viene con una sonrisa en la boca; cuando se pierde, con el cuchillo entre los dientes". ¿Cómo irá el domingo
¿Y qué hay de su relación con Llorente Emery respondió: "Cuando se gana, y es normal, viene con una sonrisa en la boca; cuando se pierde, con el cuchillo entre los dientes". ¿Cómo irá el domingo
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