La Comisión limita los acuerdos a tres años y los clubes irán hasta el Supremo para defender unos derechos que no expiran hasta 2014
Los clubes se preparan para una nueva guerra del fútbol que puede llegar al Tribunal Supremo. Defenderán hasta las últimas consecuencias unos suculentos ingresos que tenían garantizados hasta 2014 y que ahora quedan en el aire, por lo menos los de los dos últimos años. La Comisión de la Competencia entiende que los contratos televisivos pueden tener una duración máxima de tres ejercicios. El Valencia recibe 49 millones por temporada. Su acuerdo con Mediapro expira dentro de tres campañas. Lo mismo le ocurre al Levante, que negoció este convenio con el G-30, grupo que engloba a casi todos los equipos de Segunda y algunos de Primera.
Competencia considera que el sistema establecido requiere el consentimiento de los dos equipos para la retransmisión de un encuentro, lo que provoca que el número de partidos que se pueden explotar crezca exponencialmente conforme el operador cuenta con mayor número de clubes en cartera.
Este sistema, según la resolución del Consejo de la CNC, provoca que exista un «enorme incentivo» para que los operadores que adquieren de los clubes sus derechos audiovisuales los agrupen y así obtener una explotación óptima en los mercados, tanto en abierto, como de pago, pago por visión, internet o móvil.
Por estas causas, Competencia ha considerado que para que las eficiencias de estos contratos compensen los efectos de cierre de mercado que se ha apreciado es necesario que su duración no sea superior a tres temporadas.
La recién estrenada Ley de la Comunicación Audiovisual establece que estos contratos pueden prolongarse durante cuatro campañas. Así lo especifica el artículo 21, que también subraya que los acuerdos que ya están en marcha a la entrada en vigor de la normativa «permanecerán válidos hasta su finalización».
El Consejo ha resuelto que los contratos vigentes sean considerados compatibles con el Derecho, aunque impone un pero: que su vigencia no supere la temporada 2010-2012. Declara prohibidos o nulos los que no expiren hasta la 2012-13 y siguientes. Esto afecta a numerosos clubes de fútbol profesional, entre ellos los dos de la ciudad: el Levante y el Valencia.
Ambas entidades firmaron con Mediapro. El club blanquinegro rompió con Canal 9 tras dos décadas y el azulgrana se integró en el G-30. Los granotas tienen unos ingresos de 2,5 millones que varían según la clasificación, los partidos retransmitidos y los puntos logrados con las cámaras como testigos. Si asciende a Primera, el Levante recibiría cerca de 13 millones al año.
Fuentes de Mediapro lanzaron un mensaje de tranquilidad al entender que la ley ampara los contratos. Javier Tebas, vicepresidente de la Liga de Fútbol Profesional, subrayó a LAS PROVINCIAS que Competencia sumerge a los clubes en una «incertidumbre legislativa». Este órgano tiene capacidad ejecutiva, aunque impone a los contratos televisivos una duración menor a lo que contempla la ley: pasa de cuatro a tres años. «Se plantean nuevas negociaciones porque la mayoría de los equipos tienen contratos hasta 2014», indicó Tebas. Los clubes recurrirán ante la sala de lo contencioso administrativo de la Audiencia Nacional y, si fuera necesario, al Supremo.
http://valenciacf.lasprovincias.es/noticias/2010-04-17/competencia-anula-contratos-televisivos-20100417.html
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